Aralar resta poder al sector navarro para facilitar la uni¨®n con EH Bildu

El VI Congreso de Aralar librar¨¢ este s¨¢bado en Bilbao un pulso interno que podr¨ªa abrir heridas en esta formaci¨®n en Navarra. La decisi¨®n de la Ejecutiva Nacional de modificar los estatutos para restar capacidad de decisi¨®n a su organizaci¨®n navarra ha puesto en pie de guerra a un grupo de militantes, entre los que figura el hist¨®rico Txentxo Jim¨¦nez, muy descontentos con la decisi¨®n oficial de ¡°limitar la autonom¨ªa territorial¡± del partido para implantar ¡°el centralismo¡± y, con ello, ¡°evitar la existencia de espacios que escapen a su control pol¨ªtico¡±.?

La ponencia estatutaria que la direcci¨®n del partido somete a votaci¨®n en este congreso plantea la eliminaci¨®n de Navarra como un ¡°¨¢mbito organizativo diferenciado¡± de Euskadi y del Pa¨ªs Vasco franc¨¦s. Seg¨²n la nueva redacci¨®n, Navarra tendr¨¢ la misma consideraci¨®n que Gipuzkoa, Bizkaia o ?lava. Una enmienda a la totalidad suscrita por 12 militantes navarros ¡ªfiguran m¨¢s de la mitad de la Ejecutiva de Navarra¡ª considera que se trata de un intento de ¡°suprimir las competencias de la organizaci¨®n navarra¡±: ¡°Resulta inaudito que quienes hemos sido pioneros en la defensa del derecho a decidir, ahora que est¨¢ m¨¢s en auge que nunca queramos negarlo a nivel interno¡±.

Los firmantes ¡ªel parlamentario Jim¨¦nez, Pablo Azkona, F¨¦lix Esparza, Mikel Nuin, Floren Luqui, Pedro Huarte y Zutoia Toral, entre otros¡ª sostienen que este golpe de tim¨®n estatutario ha sido ejecutado por ¡°un reducido grupo de dirigentes¡± con el ¨¢nimo de ¡°reforzar los mecanismos de control pol¨ªtico por parte de la direcci¨®n y el aparato¡±, aseguran en su enmienda a la totalidad, que asumen que ser¨¢ derrotada ¡°con total seguridad¡±.

En el fondo, aseguran fuentes de este sector cr¨ªtico, subyace ¡°una estrategia liderada por el coordinador general [Patxi Zabaleta] para evitar trabas en Navarra a la confluencia de Aralar con EH Bildu¡±. ¡°Zabaleta est¨¢ obsesionado con la confluencia, incluso org¨¢nica, con la otra izquierda abertzale¡±, a?aden.

Desaparece la figura del coordinador general y Rebeka Ubera ser¨¢ secretaria general

Miembros de esta corriente contraria a la l¨ªnea oficial opinan que Zabaleta quiere ¡°dejar todo preparado para acabar en EH Bildu antes de su despedida¡±. En este congreso, el l¨ªder de Aralar desde su constituci¨®n en 2001 abandonar¨¢ el cargo y entregar¨¢ el testigo a la parlamentaria vasca y secretaria de Organizaci¨®n, Rebeka Ubera. Tras el c¨®nclave que se clausurar¨¢ el 15 de noviembre en Pamplona, la formaci¨®n de izquierdas perder¨¢ otra de sus se?as de identidad, al eliminar la figura del coordinador general por la de secretario general, al que acceder¨¢ Ubera. Zabaleta ser¨¢ investido ¡°presidente honor¨ªfico¡±.

La direcci¨®n de Aralar tiene muy definida su hoja de ruta pol¨ªtica para el futuro, seg¨²n refleja el contenido de la ponencia pol¨ªtica. En esta se reafirma la voluntad de ¡°ir m¨¢s all¨¢ de los acuerdos estrat¨¦gicos¡± con el resto de partidos de forman la coalici¨®n EH Bildu, a la que Aralar se integr¨® tras su congreso de 2011 en Derio. Aralar considera necesario ¡°ir construyendo, junto con el resto de fuerzas de la coalici¨®n, la estructura unificada y democr¨¢tica que requiere la izquierda abertzale. Nos encontramos ante la necesidad de dar saltos cualitativos, superando la mera uni¨®n de fuerzas, para conseguir la estructura, la democracia interna y la efectividad que nos reclama la sociedad¡±, reza la ponencia.

Aralar quiere dar ¡°por finalizado¡± el camino abierto en 2000, cuando se produjo la escisi¨®n de Batasuna, y cerrar ¡°el ciclo de la divisi¨®n de un modo natural¡±. ¡°Aralar seguir¨¢ trabajando dentro de EH Bildu para que sea un punto de encuentro y un movimiento de ciudadanos de izquierda, abertzales, soberanistas, ecologistas, feministas, independentistas y dem¨®cratas...¡±, propugna la actual direcci¨®n. Sectores cr¨ªticos con la l¨ªnea oficial consideran que ¡°se est¨¢ buscando una pista de aterrizaje para acabar en Sortu¡±.