Cinco pacientes narran al juez los abusos de un jefe m¨¦dico de Salt

Cinco pacientes narraron ayer, en un juicio, los abusos a los que fueron sometidas, presuntamente, por Josep C. M., ex jefe de Urgencias del Hospital Santa Caterina de Salt (Giron¨¨s). El m¨¦dico, que ya fue despedido en su d¨ªa por ¡°mala praxis¡±, se sienta desde ayer en el banquillo de los acusados y afronta una petici¨®n de m¨¢s de 18 a?os de c¨¢rcel por diversos delitos. Las mujeres relataron los comentarios y mensajes de claro contenido sexual que el m¨¦dico les dirigi¨®. ¡°Hola seductora paciente, me encantar¨ªa tenerte entre mis brazos y hacerte el amor apasionadamente toda la noche¡±, explic¨® una de ellas. El juicio a Josep C. M., deb¨ªa haber comenzado con su declaraci¨®n. Su defensa, sin embargo, pidi¨® que declare en ¨²ltimo lugar y la Audiencia de Girona lo acept¨®.

Las cinco pacientes que denunciaron al m¨¦dico por abusos sexuales explicaron que no se conoc¨ªan entre ellas ni le conoc¨ªan a ¨¦l previamente. Todas coincidieron en afirmar que el ex jefe de Urgencias las toc¨® ¡°como hombre y no como m¨¦dico¡±. Tambi¨¦n relataron que les hizo comentarios lascivos y, en algunos casos, lleg¨® a llamarlas o mandarles mensajes. Las mujeres se sintieron ¡°humilladas¡± y ¡°avergonzadas¡± y justificaron no haber denunciado hasta meses despu¨¦s de los hechos por ¡°verg¨¹enza¡±, por ¡°querer pasar p¨¢gina¡± o por pensar que nadie las iba a creer porque ¡°era la palabra del m¨¦dico contra la m¨ªa¡±.

Al conocerse a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n, la primera de las denuncias que se present¨® en el Hospital de Santa Caterina, tres de las mujeres pensaron que era el mismo que las hab¨ªa ¡°vejado¡± a ellas y le denunciaron tambi¨¦n. En dos casos, tuvieron la ayuda de las doctoras de cabecera. Varias de ellas aseguraron que su objetivo es que ¡°no pueda volver a ejercer la medicina¡±.

Las v¨ªctimas relataron que el m¨¦dico les hizo comentarios lascivos y, en algunos casos, lleg¨® a llamarlas o mandarles mensajes

Las cinco v¨ªctimas relataron c¨®mo acudieron por dolor en la cadera, en el sacro o por una hernia umbilical y el m¨¦dico acab¨® toc¨¢ndoles los pechos o poniendo las manos en el pubis o la vagina.

La primera de las v¨ªctimas, una joven venezolana que jugaba al f¨²tbol, acudi¨® a urgencias al hospital por dolor en la cadera. Relat¨® c¨®mo el m¨¦dico, adem¨¢s de hacerle masajes en la nuca, le dijo: ¡°D¨®nde vas con tanto m¨²sculo, lo que est¨¢s es muy buena como para echar un buen polvo¡±. La joven relat¨®, con entereza, que se sinti¨® confundida y se lleg¨® a plantear ¡°si era un m¨¦dico o un loco que hab¨ªa entrado¡±. Josep C. cogi¨® sus datos de la ficha m¨¦dica y le dijo iba a visitarla pr¨®ximamente a su casa para mantener relaciones sexuales. Dos d¨ªas despu¨¦s, explic¨® ella, la llam¨® y le dijo que estaba frente a su casa. La llamada se acab¨® cuando la joven amenaz¨® con denunciarle.

Las otras cuatro denunciantes explicaron situaciones similares. Una de ellas acudi¨® por una hernia y el m¨¦dico acab¨® masaje¨¢ndole el cl¨ªtoris. ¡°No me toc¨® como un ginec¨®logo¡±. ¡°Me toc¨® el pecho¡± ¡ªafirm¨® otra de las v¨ªctimas¡ª ¡°como toca un hombre, no un m¨¦dico¡±.

El fiscal le acusa de cinco delitos de abuso sexual, dos de ellos con introducci¨®n de miembros corporales por v¨ªa vaginal y pide para ¨¦l 18 a?os de c¨¢rcel y el mismo tiempo de inhabilitaci¨®n. Tambi¨¦n, que no se pueda acercar a menos de 500 metros de las v¨ªctimas y que las indemnice con un total de 26.000 euros. La defensa mantiene que se trata de un profesional con 25 a?os de trayectoria ¡°irreprochable¡± y asegura que las exploraciones que hizo fueron con criterios m¨¦dicos y no con ¨¢nimo libidinoso.