Podemos y los pactos con Bildu

Pues ya est¨¢n aqu¨ª. Aquellos que ocuparon la Puerta del Sol y las plazas del Reino de Espa?a y continuaron su trabajo de debates en los barrios y universidades. Aquellos que tejieron redes y que a partir de ellas se movilizaron contra los desahucios, salieron a la calle en mareas blancas, verdes o naranjas. A aquellos a los que siempre se les dec¨ªa lo mismo desde el Partido Socialista y particularmente desde el Partido Popular, a los que se les retaba, se les desafiaba a concurrir a las elecciones. Se les dec¨ªa que la ¨²nica representaci¨®n leg¨ªtima era la parlamentaria.

Todo ello desde la seguridad absoluta de la imposibilidad de resquebrajar el entramado bipartidista blindado por una legislaci¨®n electoral acorazada.

Pues bien, ya est¨¢n aqu¨ª. Han aceptado el reto y el miedo se ha instalado en el pleno centro de Madrid. Tanto los unos como los otros sienten el miedo por la aparici¨®n de una fuerza pol¨ªtica sin mochilas y que quiere transformar la realidad y no ¨²nicamente verla pasar.

Daremos por bueno los resultados de las encuestas que han aparecido ¨²ltimamente. De todas maneras, aunque no lo fueran, parece seguro que ser¨¢n una fuerza determinante en Ayuntamientos, Diputaciones y Gobiernos auton¨®micos, sea cual sea la f¨®rmula que utilicen.

En este escenario lo primero que se le viene a uno a la cabeza es ?Y ahora qu¨¦? Dicho de otra manera, ?Con qui¨¦n van a pactar? Por empezar por alg¨²n lado: En la comunidad foral navarra las encuestas ofrecen la posibilidad de un gobierno de Bildu y Podemos o de Podemos con el apoyo de Bildu. Parece l¨®gico si uno examina los programas de una y otra fuerza.

La cuesti¨®n soberanista tampoco parece un impedimento grave porque las dos fuerzas parten del reconocimiento del derecho a decidir. Aunque el paso siguiente sea divergente. Las dos fuerzas aprecian la necesidad de un cambio completo en Navarra, superar el r¨¦gimen de UPN que ha contado de una u otra manera con el sustento del partido socialista navarro.

En la Comunidad Aut¨®noma Vasca la situaci¨®n m¨¢s significativa es la de Gipuzkoa donde gobernada por Bildu, se ve enfrentada ahora al pacto entre socialistas y PNV para arrebatar el gobierno a los independentistas. Sin embargo, con arreglo a las encuestas la llave la tendr¨¢ Podemos, ser¨¢ quien decida, siempre si hacemos caso a las encuestas, si gobierna el aparato del Estatuto de Gernika o si lo hace una fuerza progresista con Podemos o sin ellos.

Lo mismo cabe decir, m¨¢s a¨²n leyendo el acuerdo marco para el programa econ¨®mico de Navarro y Torres al respecto de la convergencia del citado programa con la actuaci¨®n y el propio programa de Bildu.

Medidas estrella en el ¨¢mbito fiscal como la recuperaci¨®n del impuesto sobre el patrimonio que se menciona en el citado documento ya ha sido aplicado en Gipuzkoa. Gipuzkoa est¨¢ a la cabeza de la lucha contra el fraude en cuanto a resultados y dotaci¨®n de medios, es puntera en la protecci¨®n social siendo el territorio que mayor cobertura ofrece, equiparable por no decir superior a las de los pa¨ªses UE-15.

En el Gobierno de Bildu en la Diputaci¨®n Foral de Gipuzkoa se ha instalado la idea de aproximar, en la medida de las competencias y de las posibilidades, el sistema de garant¨ªa a un sistema universal de ciudadan¨ªa. Cito todas estas cuestiones porque son las m¨¢s ejemplificadoras de la convergencia de programas y objetivos: Ser¨ªa antinatural una actuaci¨®n de Podemos que, de una u otra manera, dejara el gobierno en manos de la derecha.

Pero llegamos a la cuesti¨®n del objetivo estrat¨¦gico de Podemos. Este no es otro que La Moncloa, el Gobierno de Espa?a y pactos con Bildu en particular en Navarra y tambi¨¦n, pero en menor medida en Gipuzkoa, ser¨¢n aprovechados por los enemigos de Podemos para abrirles un nuevo frente. ?Subordinar¨¢ Podemos sus pactos de progreso a su objetivo estrat¨¦gico? ?Subordinar¨¢ Podemos Navarra y Gipuzkoa para evitar ataques?

Lo que si me atrever¨ªa a afirmar con seguridad es que el pacto entre Podemos y Bildu ser¨ªa real si las elecciones generales se anticiparan a las municipales y forales.