Los ecologistas solo admiten que fueron a Cofrentes a protestar

Los nueve primeros activistas de Greenpeace en declarar por su acci¨®n reivindicativa de febrero de 2011 en la central nuclear de Cofrentes aseguraron ayer que solo quer¨ªan protestar contra este tipo de energ¨ªa. Que no ten¨ªan un plan preconcebido para desestabilizar la central, ni respond¨ªan instrucciones de la organizaci¨®n ecologista. Tampoco causaron desperfectos ¡ªm¨¢s all¨¢ de la enorme pintada en una de las torres de refrigeraci¨®n¡ª, ni hicieron da?o a nadie, seg¨²n su versi¨®n.

La fiscal¨ªa les imputa los delitos de des¨®rdenes p¨²blicos, da?os y lesiones, por los que pide dos a?os y ocho meses de prisi¨®n para cada uno de los 17 procesados, as¨ª como el pago de 360.000 euros en concepto de multas e indemnizaciones, a los que deber¨ªa hacer frente Greenpeace.

La defensa intent¨® dibujar unos hechos ¡°pac¨ªficos¡± y desorganizados

La acusaci¨®n ¡ªsecundada por la propietaria de la central, Iberdrola, y los guardas jurados¡ª mantiene que mientras los 16 activistas y el fotoperiodista Pedro Armestre intentaban entrar en el complejo con la ayuda de una radial y otras herramientas, se dio un forcejeo con los guardas. Tres salieron heridos, dos de ellos con contusiones y otro, siempre seg¨²n la fiscal¨ªa, por un corte de car¨¢cter leve de la radial en el abdomen.

Sin embargo, los nueve imputados declararon ayer que sortearon la primera valla ¡°pasando por encima, porque estaba tirada¡±, y que superaron las otras dos a trav¨¦s de unos agujeros que encontraron en las mismas. Uno de ellos se recre¨® incluso narrando c¨®mo entr¨® ¡°cargado con 45 kilos o m¨¢s a la espalda¡±, por su propio pie, y sin que nadie se lo impidiera. Todos afirmaron haber recibido un mensaje de m¨®vil a modo de convocatoria, aunque negaron tener alguna idea de qui¨¦n pudo ser el remitente del mismo.

Los testimonios dibujaron la escena de aquel 15 febrero de 2011 como la de un confuso ¡°barullo¡±, donde las decisiones se iban tomando ¡°sobre la marcha¡±, sin cumplir ¨®rdenes de nadie, y en la que no se entend¨ªa lo que dec¨ªan unos guardas jurados nerviosos, ¡°diciendo cosas sin sentido¡± e incapaces de controlar a sus perros. El corte abdominal habr¨ªa sido causado por un alambre suelto. El car¨¢cter pac¨ªfico de la acci¨®n fue reivindicado de manera repetida.

Las preguntas de los abogados defensores se centraron en apuntalar esta idea. Tambi¨¦n en que no hubo organizaci¨®n, que los intrusos no encontraron resistencia para entrar y que no pretend¨ªan poner en peligro las instalaciones (algo que, seg¨²n las notas informativas del Consejo de Seguridad Nuclear de aquel d¨ªa, no llegaron a hacer). De las penas de c¨¢rcel que la acusaci¨®n solicita para los 17 acusados, dos a?os corresponden al delito de des¨®rdenes p¨²blicos, por lo que de su confirmaci¨®n o no puede depender que los acusados ingresen en prisi¨®n.

Yo lo que recuerdo es que vi una torre y pens¨¦: 'Voy a hacer que vea todo el mundo que esta energ¨ªa no es segura' El primer acusado de la sesi¨®n

Iberdrola, que cifra en 221.000 euros los perjuicios por desperfectos y horas de trabajo perdidas, incidi¨®, adem¨¢s de en los da?os y las lesiones, en que se tuvo que declarar la alerta de emergencia.

Antes de comenzar los interrogatorios, la magistrada del Juzgado de lo Penal 11 de Valencia acept¨® como prueba un v¨ªdeo presentado el lunes pasado por el abogado de Iberdrola. Se trata, seg¨²n dijo este, de extractos de v¨ªdeo de las c¨¢maras de seguridad de Cofrentes. Los abogados defensores hab¨ªan rechazado de plano la admisi¨®n de la prueba, criticando que, despu¨¦s de la ¡°dilatada¡± fase de instrucci¨®n, la acusaci¨®n esperase ¡°hasta el ¨²ltimo momento¡± para presentar las im¨¢genes. Sugirieron de manera reiterada que pod¨ªan haber sido manipulados e hicieron constar sus protestas firmes. La juez respondi¨® que solo tendr¨¢ en cuenta las im¨¢genes en caso de poder garantizar su autenticidad.

Durante la jornada de ayer se sucedieron las muestras de apoyo al fotoperiodista Pedro Armestre, que fue a cubrir de manera independiente los hechos. La Asociaci¨®n Nacional de Informadores Gr¨¢ficos de Prensa y Televisi¨®n y la Agrupaci¨®n de Periodistas de UGT pidieron la retirada de cargos contra ¨¦l. La Uni¨® de Periodistes Valencians, por su parte, calific¨® de ¡°desproporcionada¡± la pena propuesta por la fiscal¨ªa y record¨® que una hipot¨¦tica condena ¡°condicionar¨ªa sus pr¨®ximas coberturas informativas¡±.

El tono del relato que ofrecieron los nueve activistas se ilustra bien en las frases del primer interrogado: ¡°Yo lo que recuerdo es que vi una torre y pens¨¦: ¡®Voy a hacer que vea todo el mundo que esta energ¨ªa no es segura¡±. ¡°?Y no cree que para eso est¨¢n los representantes pol¨ªticos, por ejemplo?¡±, le pregunt¨® la fiscal, a lo que este contest¨®: ¡°S¨ª, alguna vez lo habr¨¢n hecho... Pero quiz¨¢ no se les hab¨ªa escuchado¡±.