La junta de la prisi¨®n concede el r¨¦gimen abierto a Jos¨¦ Luis N¨²?ez
El expresidente del Bar?a entr¨® el 16 de noviembre en Quatre Camins para cumplir una pena de dos a?os y dos meses
El expresidente del FC Barcelona Josep Llu¨ªs N¨²?ez Clemente se comer¨¢ los turrones en casa. La junta de tratamiento de la prisi¨®n de Quatre Camins le otorg¨® la semana pasada el tercer grado penitenciario, lo que le permitir¨¢ abandonar la c¨¢rcel en la que ingres¨® el 16 de noviembre y acudir¨¢ solo a dormir de lunes a jueves.
La aplicaci¨®n de la medida est¨¢ pendiente de la ratificaci¨®n de la Secretar¨ªa de Servicios Penitenciarios de la Generalitat, pero se da por hecho que avalar¨¢ la decisi¨®n de la junta de tratamiento y que a partir del pr¨®ximo d¨ªa 23, a m¨¢s tardar, el conocido empresario pasar¨¢ el d¨ªa fuera de prisi¨®n.
N¨²?ez tiene 83 a?os y entr¨® en prisi¨®n junto a su hijo, Jos¨¦ Luis N¨²?ez Navarro, para cumplir cada uno una pena de dos a?os y medio por participar en la trama de corrupci¨®n y sobornos de los inspectores de Hacienda en Catalu?a y que implic¨® a diversos constructores.
La junta de tratamiento de Quatre Camins ha considerado en su decisi¨®n la edad del expresidente barcelonista, el hecho de que haya abonado con su hijo los tres millones de euros de multa que le impuso el Tribunal Supremo -que redujo la pena inicial de seis a?os de la Audiencia de Barcelona- y la consideraci¨®n de que puede continuar el tratamiento penitenciario fuera de la c¨¢rcel. El encarcelamiento de N¨²?ez fue ordenado por la Audiencia de Barcelona sin esperar a que el Gobierno resolviera sobre la petici¨®n de indulto, en la que tanto el tribunal sentenciador como la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n informaron en contra. Los jueces, adem¨¢s, consideraron que las posibilidades de que prosperase la medida de gracia eran ¡°pr¨¢cticamente nulas¡± y recordaron que el constructor ¡°no ha dado la menor muestra de arrepentimiento¡±.
En el caso de N¨²?ez hijo fuentes penitenciarias consultadas explicaron que tambi¨¦n se beneficiar¨¢ del r¨¦gimen abierto y que antes de que finalice el a?o pasar¨¢ el d¨ªa fuera de la c¨¢rcel.
Crist¨®bal Martell, abogado de ambos presos, defendi¨® ayer la clasificaci¨®n en tercer grado de sus clientes al recordar que se trataba de hechos ocurridos hace m¨¢s de 20 a?os y que los retrasos en la tramitaci¨®n de la causa eran ajenos a ellos. Tambi¨¦n record¨® que N¨²?ez padre e hijo no fueron condenados al pago de responsabilidad civil.
La concesi¨®n del tercer grado penitenciario a N¨²?ez por la junta de tratamiento de la c¨¢rcel se suma al r¨¦gimen abierto conocido tambi¨¦n esta semana del que disfruta Llu¨ªs Gavald¨¤, el principal condenado por el caso Pallerols. El recluso, que fue director general de Empleo de la Generalitat cuando se desviaron los fondos destinados a la formaci¨®n de parados, fue condenado a a?o y medio de c¨¢rcel por malversaci¨®n. Al cabo de 73 d¨ªas disfrut¨® de un permiso y cuando regres¨® ya empez¨® a disfrutar del tercer grado.
El diputado de la CUP David Fern¨¢ndez reproch¨® a Artur Mas la concesi¨®n de ese beneficio en la sesi¨®n de control y el presidente de la Generalitat esgrimi¨® que tambi¨¦n beneficiaba al 22% de los presos. Olvid¨® recordar que en la pr¨¢ctica totalidad de los casos de delincuentes comunes, han de tener cumplida la mitad de la condena para lograr el tercer grado y abonar la responsabilidad civil derivada del delito.
Despu¨¦s de que EL PA?S difundiera la noticia, el grupo parlamentario de ICV impuls¨® una reprobaci¨®n del consejero de Justicia, Germ¨¤ Gord¨®, as¨ª como la petici¨®n para que fue revocado el tercer grado a Gavald¨¤. Los ecosocialistas se quedaron solos en el intento, pues ning¨²n otro grupo se sum¨® a la petici¨®n para incluir ese punto en el orden del d¨ªa del pleno que finaliza hoy y poder votar la reprobaci¨®n. Al final, ICV llevar¨¢ el tema a la comisi¨®n de Justicia del Parlament.
El PP se sum¨® ayer a las cr¨ªticas y reclam¨® la comparecencia del consejero para que explique la concesi¨®n del tercer grado a ¡°un pol¨ªtico de CiU condenado por corrupci¨®n¡±.
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