Derecho a la vida, pese a la hepatitis C

Beatriz Noguera tiene 72 a?os, hace m¨¢s de 30 que lucha contra la hepatitis C, tiene una hermana inv¨¢lida a su cargo y reivindica su ¡°derecho a la vida¡±. Es una de los enfermos a los que, asegura, se le ha denegado el nuevo tratamiento que le recet¨® el especialista. Una quincena de personas se han encerrado en el Hospital Trueta durante tres d¨ªas para reclamar los tratamientos de ¨²ltima generaci¨®n, muy caros, pero cuyo tratamiento garantiza una eficacia del 95%. En apenas un d¨ªa de encierro han recogido 1.500 firmas de apoyo a su petici¨®n.

Beatriz trabaj¨® en un centro de menores delincuentes dependiente de la Generalitat durante 35 a?os. En el momento que le diagnosticaron la hepatitis C tambi¨¦n se la detectaron a varios de sus compa?eros. ¡°Ellos soportaron el Interfer¨®n, una especie de quimioterapia, y se curaron, pero igual que otros, yo tuve efectos secundarios muy graves y tuve que dejarlo. Desde entonces esperaba un nuevo tratamiento para poder curarme y ahora no me lo dan¡±, se lamenta. ¡°Me enviaron al Hospital Cl¨ªnic a mediados de diciembre¡±, a?ade, ¡°y all¨ª me dijeron que no me pod¨ªan dar el nuevo f¨¢rmaco por motivos econ¨®micos¡±. ¡°Llevo cotizando 35 a?os y creo que tengo derecho a la vida¡±, mantiene visiblemente emocionada y con tono reivindicativo.

Otro de los criterios que aplica la Administraci¨®n para que los enfermos de hepatitis C accedan al tratamiento es la fase de la enfermedad en la que se encuentran. Noguera est¨¢ en la fase m¨¢s elevada, F3-F4, con cirrosis hep¨¢tica y sin embargo no se le ha concedido el nuevo tratamiento. Sospecha que en la criba tambi¨¦n es determinante la edad. En principio, seg¨²n los criterios hechos p¨²blicos por el Departamento de Salud, deber¨ªa poder acceder a ¨¦l.

Tiene claro que ¡°las autoridades sanitarias mienten. No es verdad que est¨¦n dando el tratamiento a todo el mundo. No est¨¢ garantizado, porque a m¨ª me han rechazado y hay mucha gente en la misma situaci¨®n¡±. Critica que el Gobierno act¨²e movido por el dinero. Es verdad que el coste es elevado ¡ªunos 25.000 euros¡ª, reconoce, pero recuerda que tanto en Francia como en Alemania se ha pactado con los laboratorios, algo que seg¨²n ella no se hace aqu¨ª porque ¡°no hay voluntad pol¨ªtica¡±. A pesar de su situaci¨®n, no cree que el problema sean los m¨¦dicos: ¡°Ellos est¨¢n luchando por conseguir los medicamentos que necesitamos¡±.

Seg¨²n Salud, hasta noviembre del 2014, 1.978 pacientes con hepatitis C, de un total de 30.000 afectados, han sido tratados en Catalu?a con un coste de 22'1 millones de euros financiados por la Administraci¨®n catalana. De los enfermos tratados, 393 ya han recibido los nuevos f¨¢rmacos. Concretamente 174 han sido tratados con Simeprevir y 219 con Sofosbuvir, dos medicinas aprobadas por las autoridades sanitarias el 1 de agosto y el 1 de noviembre de 2014, respectivamente. Seg¨²n la Asociaci¨®n de Afectados por la Hepatitis C de Catalu?a, en el Espa?a hay m¨¢s de 481.000 personas con la enfermedad.