Fallece el ¡®stone¡¯ Jordi Tard¨¤
El periodista present¨® durante 30 a?os el programa de m¨²sica ¡®Tarda Tard¨¤¡¯
¡°Paraula de Stone!¡±. Una frase que durante mucho tiempo ha tenido un significado muy especial en los ambientes catalanes del rock ya no volver¨¢ a sonar con la misma intensidad en las ondas radiof¨®nicas catalanas. Su creador y defensor, Jordi Tard¨¤, falleci¨® en la madrugada del domingo en su domicilio de Matar¨®, ciudad en la que hab¨ªa nacido en 1955 y en la que siempre residi¨® a pesar de centrar la mayor parte de su actividad en Barcelona.
¡°Paraula de Stone!¡±, fruto de su gran admiraci¨®n por los Rolling Stones y pronunciada con su peculiar entonaci¨®n gangosa, fue siempre la r¨²brica de todas sus opiniones rockeras y sirvi¨® de signo de admiraci¨®n para concluir todos sus programas en Catalunya R¨¤dio y otras emisoras del grupo radiof¨®nico de la Generalitat en las que trabajaba.
Tard¨¤ fue de los primeros en incorporarse a esa emisora cuando a¨²n estaba naciendo. Si bien ¨²ltimamente se emit¨ªa desde la p¨¢gina web, su programa Tarda Tard¨¤ se ha emitido ininterrumpidamente desde 1985, estaba a punto de celebrar los treinta a?os en antena, centr¨¢ndose siempre en primicias de actualidad y gran cantidad de retransmisiones de conciertos nunca editados en disco. Entre las primeras, que los The Beatles supervivientes grababan nuevas canciones con una cinta con la voz de John Lennon, o que a Freddie Mercury le quedaban pocas horas para morir.
La actividad radiof¨®nica de Tard¨¤, que hab¨ªa comenzado su vida profesional trabajando en la productora de conciertos de Gay Mercader, le hab¨ªa convertido en un icono del panorama musical catal¨¢n pero probablemente las actividades por las que m¨¢s se le recuerden sean las relacionadas con el coleccionismo. Primero, alrededor del rock y de sus estrellas y, en los ¨²ltimos a?os, a partir de la figura de Tintin.
Con el alma de coleccionista irredento, Tard¨¤ fund¨® desde Catalunya R¨¤dio la Fira del Disc de Col.leccionista de Catalunya, evento que comenz¨® de forma t¨ªmida en el Hotel Oriente de las Rambles barcelonesas en 1985 y que lleg¨® a convertirse en una de las ferias de la especialidad m¨¢s concurridas del mundo. Un certamen anual que ten¨ªa su punto ¨¢lgido en la subasta que el propio radiofonista dirig¨ªa y en la que fueron vendidos los objetos m¨¢s dispares e incre¨ªbles, desde pelos de los componentes de The Beatles hasta ba?eras de ¨ªdolos del pop, junto a rarezas discogr¨¢ficas.
Discutidos problemas de gesti¨®n acabaron con esa feria en 2004 y los comerciantes del ramo montaron una nueva que todav¨ªa se sigue celebrando con mucha menos repercusi¨®n medi¨¢tica, pero Tard¨¤ no tir¨® la toalla de su af¨¢n coleccionista y se lanz¨® a la aventura de crear en 2011, con su propia e inmensa colecci¨®n, un Museo del Rock en el centro comercial Les Arenes de Barcelona que tampoco lleg¨® a consolidarse, probablemente la mitoman¨ªa rockera no alcanza en la capital catalana el nivel de otras urbes del planeta. El Museo del Rock tuvo una vida corta, poco m¨¢s de un a?o, y fue, en realidad, la continuaci¨®n de una idea previa de caf¨¦-museo que Tard¨¤ hab¨ªa puesto en marcha a?os antes en el Port Ol¨ªmpic.
Siempre entre ese coleccionismo y la mitoman¨ªa rockera, Tard¨¤ public¨® varios libros y una novela, La puerta del infierno, y, en estos ¨²ltimos a?os, destac¨® por su vertiente Tintin¨®fila organizando varias exposiciones, siempre con curioso y sumamente valioso material propio, sobre la figura del h¨¦roe del c¨®mic creado por Herg¨¦.
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