El fiscal pide c¨¢rcel para 12 ¡®¨¢ngeles del infierno¡¯ por tr¨¢fico de drogas
El juez les acusa de tr¨¢fico de drogas, extorsi¨®n y posesi¨®n de armas prohibidas
El gran golpe policial contra la rama catalana de los ?ngeles del Infierno llega a juicio. La Fiscal¨ªa pide penas de hasta 13 a?os y medio de c¨¢rcel para una docena de miembros de la violenta banda de moteros, a los que acusa de tr¨¢fico de drogas, extorsi¨®n y posesi¨®n de armas prohibidas. La operaci¨®n Valkiria, lanzada en 2009 por los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil, puso en evidencia la conexi¨®n entre la banda de la calavera alada (de tendencias neonazis) y los Boixos Nois. Uno de los acusados, que afronta una petici¨®n de ocho a?os y medio de c¨¢rcel, es Jos¨¦ Antonio Romero Ors, alias Jaro, un ultra del Bar?a que cumpli¨® pena por asesinar a un seguidor del Espanyol en 1991 y que particip¨®, tambi¨¦n, en un intento de agresi¨®n al expresidente Joan Laporta.
El relato de la Fiscal¨ªa abarca, en realidad, dos operaciones contra los ?ngeles del Infierno, cuya actividad delictiva se ha mantenido a lo largo del tiempo. Una, en 2007 y la otra, en abril de 2009. Manuel Polo, el hombre que afronta la mayor petici¨®n de pena (13 a?os y medio) es la constante de esos dos intentos por descabezar la secci¨®n catalana de los Hell's Angels, una banda surgida en California a finales de la Segunda Guerra Mundial. Polo era un asiduo del local, situado en el barrio de Poblenou de Barcelona -durante a?os, aut¨¦ntico fort¨ªn del grupo- que utilizaban para distribuir hach¨ªs y coca¨ªna. En su casa, la polic¨ªa hall¨® medio kilo de coca¨ªna, adem¨¢s de dos armas de fuego. Dos a?os m¨¢s tarde, Polo dorm¨ªa en el local y era habitual de otro establecimiento (tambi¨¦n en el Poblenou) destinado a almacenar sustancias estupefacientes.
Aunque la polic¨ªa conoc¨ªa sus actividades desde los a?os 90 -entonces se hac¨ªan llamar Centuriones; m¨¢s tarde adoptaron la marca internacional¨C la deconstrucci¨®n de los ?ngeles del Infierno empez¨®, como es habitual en el mundo subterr¨¢neo del crimen, con la denuncia de una v¨ªctima. En mayo de 2007, uno de los procesados, Marco Antonio Rodr¨ªguez, fue a visitar a un hombre que, supuestamente, ten¨ªa una deuda con la banda por drogas. Le exigi¨®, exhibi¨¦ndole una pistola y bajo la amenaza de matarle, la entrega de una furgoneta Mercedes Benz que conduc¨ªa. El veh¨ªculo result¨® no ser suyo, sino de la empresa de transportes para la que trabajaba. Rodr¨ªguez se present¨® ante su jefe, le indic¨® que hab¨ªa estacionado la furgoneta en un parquin de Granollers y le exigi¨® que, de ahora en adelante, la n¨®mina del deudor la cobrar¨ªa ¨¦l.
Rodr¨ªguez particip¨® en otros actos de intimidaci¨®n, como uno ocurrido en noviembre de ese mismo a?o en el bar Correcaminos, en Malgrat. ?l y otro acusado observaron que un tipo luc¨ªa una chaqueta con la insignia de los ¡°?ngeles Guardianes¡±. Este tipo de bandas consideran un triunfo robar las insignias a los rivales, as¨ª que Rodr¨ªguez y su amigo exigieron al hombre que se quitara la chaqueta. Pese a las amenazas, el hombre -que result¨® ser un polic¨ªa local de Arenys- se resisti¨® y logr¨® huir en un descuido. ¡°Ya nos encontraremos en la carretera¡±, le dijo Rodr¨ªguez.
La principal actividad de la banda, sin embargo, era el tr¨¢fico de drogas. En 2007, utilizaban como tapadera un local de ¡°ocio¡± de la calle Fluvi¨¤ para ¡°el almacenamiento de hach¨ªs y coca¨ªna¡±, seg¨²n el escrito del fiscal Roberto Valverde, al que ha tenido acceso EL PA?S. All¨ª dispon¨ªan de armas blancas -cuchillos, navajas, palos de madera, defensas extensibles, etc¨¦tera- para ¡°proteger de manera violenta¡± la mercanc¨ªa. En los registros de ese a?o, la polic¨ªa encontr¨® droga, pero en escasas cantidades.
La investigaci¨®n judicial sigui¨® abierta y los investigadores comprobaron que los ?ngeles del Infierno -pese a que algunos hab¨ªan estado en prisi¨®n provisional- mantuvieron intacta su actividad. Los pinchazos telef¨®nicos permitieron a los polic¨ªas dar un salto cualitativo en 2009 y detener a algunos responsables tras una entrega controlada de droga. En febrero de ese a?o, tres acusados se concertaron para recibir a un miembro de la rama italiana y venderle coca¨ªna en un local de Poblenou que uno de ellos utilizaba como vivienda. El italiano se llev¨® la droga y fue detenido en el peaje de Martorell por la polic¨ªa, que encontr¨® en el coche casi un kilo de coca¨ªna y 151.000 euros en efectivo. El hombre no est¨¢ entre los acusados porque ya fue condenado a seis a?os de prisi¨®n por esos hechos.
En esa entrega controlada sit¨²a la Fiscal¨ªa, precisamente, la participaci¨®n de El Jaro. Cuando lleg¨® el italiano, la banda llam¨® al miembro de los Boixos Nois para que ¡°transportase al mismo local la coca¨ªna convenida¡±. El transporte, finalmente, fue a cargo de otra persona, lo que no impidi¨® que la polic¨ªa registrara la casa del ultra, en Sant Adri¨¤ de Bes¨°s. Los Mossos hallaron 100 gramos de coca¨ªna, adem¨¢s de nunchacos, navajas y bates de b¨¦isbol. En su moto, encontraron una pistola. El asesino del espa?olista Frederic Rouquier afronta una petici¨®n de ocho a?os y medio por tr¨¢fico de drogas y tenencia de armas prohibidas, adem¨¢s del pago de una multa de 185.000 euros. En su casa, la polic¨ªa encontr¨® tambi¨¦n una bufanda con la palabra ¡°Antilaporta¡± escrita en may¨²sculas.
La Fiscal¨ªa atribuye a los 12 ¨¢ngeles del infierno encausados varios delitos (robo con intimidaci¨®n, coacciones, contra la salud p¨²blica y tenencia de armas prohibidas, seg¨²n los casos) pero no logrado probar el de asociaci¨®n il¨ªcita, una obsesi¨®n de todos los cuerpos policiales que han perseguido a la banda de moteros. Los investigadores destacan el car¨¢cter jer¨¢rquico y paramilitar del grupo filonazi, que se registr¨® en Espa?a como asociaci¨®n. Seg¨²n los polic¨ªas, tambi¨¦n se dedicaban al cobro de morosos y ofrec¨ªan seguridad privada en conciertos, aunque estas circunstancias no constan en la acusaci¨®n de la Fiscal¨ªa.
Las penas van desde los dos hasta los 13 a?os y medio, aunque se sit¨²an en una media de unos ocho a?os de prisi¨®n. Los Hell's Angels se consideran a s¨ª mismos una ¡°hermandad¡±. Uno de sus lemas es: ¡°Cuando hacemos el bien nadie se acuerda de nosotros. Cuando hacemos el mal, nadie lo olvida¡±. Tampoco les olvida la polic¨ªa: en julio de 2013, una nueva operaci¨®n se sald¨® con m¨¢s de 50 detenidos en Mallorca y Alemania. Adem¨¢s del tr¨¢fico de drogas, este otro cap¨ªtulo se lucraba con la explotaci¨®n sexual de mujeres. Seg¨²n la Audiencia Nacional, que ya les ha procesado, llegaron a encerrar a las prostitutas en jaulas para perros.
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