Seis millones de euros para que Mir¨® ¡®vuelva¡¯ a Mont-roig
Arranca el proyecto para recuperar la mas¨ªa donde vivi¨® y trabaj¨® el pintor


En una carta manuscrita por Joan Mir¨® consta la invitaci¨®n que le hizo llegar a su admirado amigo Vasily Kandinsky para que se acercara hasta Mont-roig (Baix Camp) a visitarle. ¡°Tienes que venir en septiembre a probar las uvas de esta tierra, son extraordinarias¡±, le indicaba Mir¨® al pintor ruso. La mas¨ªa tarraconense donde el artista catal¨¢n se recluy¨® para perfeccionar su t¨¦cnica escult¨®rica y sus trabajos en volumen no es hoy aquel remanso de paz rural donde Mir¨® respiraba inspiraci¨®n. Delante de la casa, donde la vista se topa con el mar, sigue habiendo campo, ¨¢rboles y hasta se podr¨ªan encontrar uvas. Pero, en la parte posterior del Mas Mir¨®, all¨¢ donde en tiempos se divisaba la sierra del Colldejou, hay hoy una autov¨ªa de cuatro carriles y, al lado, las v¨ªas del tren. Y a¨²n un poco m¨¢s all¨¢, la autopista con otros cuatro carriles.
Eclipsado por tanto hormig¨®n, el Mas Mir¨® ha permanecido semi olvidado cuando se hace recuento del legado del autor. Pero ya no m¨¢s. As¨ª lo pretende la Fundaci¨® Mas Mir¨®, que ha anunciado una inversi¨®n de seis millones de euros para levantar la tercera pata del tri¨¢ngulo mironiano. Palma, Barcelona y Mont-roig. Lo revelaba Joan Punyet Mir¨®, el nieto del pintor, al asegurar que se trata de ¡°un proyecto ambicioso a nivel mundial¡± que pretende que ¡°Mont-roig sea una localidad indispensable en el mundo de Mir¨®¡±.
La propuesta muse¨ªstica y arquitect¨®nica del Mas Mir¨® pretende convertir el espacio en un fiel reflejo del entorno que imbu¨ªa al pintor en los d¨ªas en que traz¨® su c¨¦lebre La mas¨ªa y, de hecho, la casa conserva aun hoy el tocador que aparece en su Caballo, pipa y flor roja y la mesa modelo de La table (Nature morte au Lapin), pintado en Par¨ªs en 1920 y que en 1995 fue vendido por la casa de subastas Christie¡¯s, en Londres, por m¨¢s de 940 millones de pesetas. Los trabajos en el Mas Mir¨® est¨¢n planeados por etapas, se ir¨¢n realizando a medida que haya financiaci¨®n, pero arrancaran en cuesti¨®n de meses y se pretende que ¡°desde su primera fase sea visitable¡±. El proyecto est¨¢ tutelado por los estudios RCR y Varis Arquitectes.
En ning¨²n caso se trata de habilitar la se?orial vivienda como espacio de exposiciones sino m¨¢s bien, como dice Rosa Maria Malet, directora de la Fundaci¨® Joan Mir¨®, emular el modelo que se ha sabido encontrar en Giverny con la maison Monet. Se busca perpetuar el estudio donde trabajaba el artista y rememorar el paisaje donde se solazaba Joan. Aquel Joan a quien su padre, enojado porque el muchacho hab¨ªa decidido hacerse pintor, le espet¨®: ¡°Recuerda que hasta el aire que respiras me pertenece a m¨ª¡±. Joan Punyet Mir¨® recordaba ayer que su bisabuelo no estaba en lo cierto del todo porque ¡°la casa la compr¨® mi bisabuela¡±.
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