Cine sobre la realidad

Mikel Olaciregui (Pasaia, 1956) llevaba m¨¢s de 20 a?os vinculado al Festival de Cine de San Sebasti¨¢n cuando, en 2012, acudi¨® a Madrid con el encargo de dirigir la Cineteca de Matadero, una sala dedicada al cine documental. Acababa de dejar la direcci¨®n del certamen donostiarra, un puesto que ejerc¨ªa desde 2000. ¡°Entend¨ª que se me hab¨ªa pasado ya el arroz, por decirlo de alguna manera¡±, explica. ¡°Necesitaba un cambio¡±.

Meses antes se paseaba como espectador por la novena edici¨®n de DocumentaMadrid, el festival internacional dedicado en exclusiva al cine documental, que ahora dirige. ¡°Entonces era un festival disperso, vistoso, que potenciaba m¨¢s la cantidad que la calidad. Nos pidieron que lo redimension¨¢ramos, porque sobre todo nos encontramos con una realidad: la inversi¨®n que hab¨ªa hecho hasta entonces el Ayuntamiento de Madrid no se pod¨ªa hacer. Ordenamos un poco y lo hicimos m¨¢s peque?o. Eso, tal y como lo vemos nosotros, le da m¨¢s consistencia. Tiene m¨¢s l¨®gica y nos fuimos al modelo en el que ahora estamos¡±.

Trailer de 'Tell The Spring Not To Come This Year', (Reino Unido, 2014)

En 2015 DocumentaMadrid, que comienza el jueves 30 de abril y se clausura el 10 de mayo, tiene un presupuesto de 200.000 euros y es un complemento anual a la actividad diaria de la Cineteca. La estructura es tan sencilla que Olaciregui la desgrana en 10 segundos. ¡°Una competici¨®n de largos y otra de cortos; dos retrospectivas y un panorama del documental espa?ol reciente¡±.

Ser¨¢n en total 80 filmes, aunque el n¨²cleo duro es la secci¨®n internacional, en la que participan 14 pel¨ªculas. Son documentales en su mayor¨ªa ¨¢speros, que tratan temas densos y espinosos desde una perspectiva autoral. ¡°Nos han llegado 1.069, y hemos elegido los que nos han parecido los mejores. No puedes escoger t¨² los temas. Hay tres pel¨ªculas cuyo tel¨®n de fondo es la guerra. Pero cada una tiene un prisma, una mirada, una forma de entenderla. De los veteranos estadounidenses de Irak a Tell The Spring Not To Come This Year, que habla de una compa?¨ªa del Ej¨¦rcito afgano¡±. En algunos casos parecen incluso intentos de lavar la propia conciencia. Estrellas de Hollywood como Leo DiCaprio o Natalie Portman producen ¡ªes decir, pagan¡ª trabajos claramente sociales. ¡°Algo de eso hay. Esta ma?ana un productor me dec¨ªa: ¡®Hacemos documentales por vocaci¨®n¡±.

'The Seventh Fire' (EE UU, 2014)

Si la protagonista de la saga de Thor est¨¢ detr¨¢s de The Seventh Fire, que habla de las bandas de nativos estadounidenses, la estrella de Titanic es el financiador de Virunga, un premiado trabajo en el que narra la desigual pelea de los guardabosques de un parque nacional de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo para defender el h¨¢bitat de los ¨²ltimos gorilas de monta?a del mundo. ¡°Son artistas que, aparte de grandes generadores de taquilla, tienen sensibilidad con determinadas causas. Portman va ahora a estrenar una pel¨ªcula dirigida por ella y hecha en hebreo, por ejemplo. Tienen inquietudes, y trabajos que les dan mucho dinero, que invierten en causas con las que est¨¢n comprometidos¡±.

Aunque Virunga sigue figurando en la secci¨®n oficial, ha quedado excluido de las pel¨ªculas a concurso en el ¨²ltimo minuto. Ayer la organizaci¨®n de DocumentaMadrid descubri¨® que hab¨ªa sido exhibido en un ¨²nico pase en un peque?o festival espa?ol. Y solo optan al premio de 10.000 euros aquellos que no hayan sido proyectados previamente en Espa?a. ¡°Son cosas que pasan. Nos enteramos y nos ha faltado tiempo para sacarla de la competici¨®n. Da pena, porque es una pel¨ªcula muy espectacular, pero tampoco pasa nada, lo importante es que la pel¨ªcula se vea, el premio es secundario¡±.

'Virunga', (EE.UU, 2014)

La cifra de 10.000 euros parece considerable ¡ªhay tambi¨¦n un segundo premio de 5.000 euros¡ª, pero el director del certamen le quita importancia. ¡°Hay que tener en cuenta el nivel de las pel¨ªculas. Est¨¢ por ejemplo la continuaci¨®n de The Act Of Killing, que gan¨® el Oscar en 2014. Es un dinero muy peque?ito para ese tipo de obras¡±. El atractivo del festival no es, asegura, el premio en met¨¢lico. ¡°El festival tiene una trayectoria. Son ya 12 ediciones, tiene un prestigio, est¨¢ bien situado. Y creo que tambi¨¦n la centrificaci¨®n a la que lo hemos sometido ha sido bien recibida por la industria. Las pel¨ªculas se sienten seguras, bien tratadas, en una competici¨®n de alto nivel¡±.

Hay excepciones a esa crudeza tem¨¢tica. Olaciregui mantiene la neutralidad que se le exige a alguien en su posici¨®n a la hora de apuntar sus favoritos entre los filmes a concurso, pero no puede evitar que se le escape una peque?a debilidad por una de las rarezas presentadas, Chante Ton Bac D¡¯abord, un musical franc¨¦s que ser¨¢ el que abra el certamen el jueves. ¡°Es valiente, porque es una nueva forma de afrontarlo. Ves a chavales discutiendo, en un trance dif¨ªcil, y que entonces canten canciones que han compuesto ellos mismos tiene una valent¨ªa formal por la que hay que apostar¡±.

The look of silence (2014)

Esa b¨²squeda de nuevos lenguajes demuestra que el documental ha crecido como g¨¦nero en los ¨²ltimos a?os. ¡°Se est¨¢ haciendo m¨¢s y es m¨¢s cine. Hace 10 a?os los documentales eran algo como los de La 2. Mira, en San Sebasti¨¢n la primera vez que se puso un documental a competici¨®n fue siendo yo director. Era En construcci¨®n, de Jos¨¦ Luis Guer¨ªn. F¨ªjate, en 65 a?os de festival solo hace 15 de esto. Esta concepci¨®n m¨¢s autoral del documental como algo m¨¢s que un reportaje de relleno es relativamente reciente, salvo excepciones, claro¡±. Olaciregui tiene claro qu¨¦ documentales le interesan: ¡°Los que hacen cine sobre la realidad, tratan temas con mayor profundidad que las noticias que se ven en televisi¨®n y las desarrollan con una cierta pretensi¨®n art¨ªstica, ¨¦tica y est¨¦tica¡±.

Uno de los ciclos paralelos de esta edici¨®n est¨¢ dedicado precisamente al contraste entre realidad y ficci¨®n. Una doble mirada se celebrar¨¢ en la filmoteca espa?ola y exhibir¨¢ filmes de ficci¨®n y documentales que hablan de lo mismo. ¡°Ha sido uno de los grandes divertimentos a la hora de preparar el festival. Por ejemplo, Amytiville, un cl¨¢sico de terror de los setenta sobre una casa encantada, cuenta con un documental en el que aparecen personas que aseguran que estuvieron en aquel lugar y hab¨ªa presencias¡±.

'Robles, Duelo al sol' (Epa?a, 2015)

La secci¨®n nacional tiene tambi¨¦n 14 pel¨ªculas, las mismas que la internacional, con una producci¨®n mucho menor. Eso har¨ªa sospechar que la internacional se queda estrecha o la nacional ancha. ¡°Son dos tipos de elecciones distintas. De fuera buscamos lo mejor del a?o. De Espa?a buscamos una producci¨®n muy reciente. Pel¨ªculas terminadas hace un m¨¢ximo de seis meses. Algunos son estrenos absolutos en Madrid que se estrenan en paralelo con el Festival de M¨¢laga que se celebra esta semana. Y se ve gran vitalidad en cuanto a recursos narrativos y formales del documental espa?ol. Hay un gran desfase entre las pel¨ªculas que se producen y las que llegan a estrenarse y a tener un n¨²mero de espectadores aceptable¡±.

Dentro de esa secci¨®n apenas hay documentales rodados en Madrid, aunque muchas de las productoras son madrile?as. ¡ª¡°Hay mucha presencia perif¨¦rica, es cierto"¡ª. La excepci¨®n es Robles, duelo al sol, en la que el nieto de John Dos Passos viaja a Madrid para esclarecer la investigaci¨®n que inici¨® su abuelo durante la Guerra Civil sobre la desaparici¨®n de su amigo Jos¨¦ Robles, traductor al espa?ol de Manhattan Transfer. En la internacional figura como ¨²nica presencia espa?ola Desde que el mundo es mundo, el retrato de un agricultor y su familia luchando en tiempos de crisis, una coproducci¨®n con Austria dirigida por G¨¹nter Schwaiger, austr¨ªaco residente en Madrid. Pero el director del certamen s¨ª que cree que hay se?as de identidad dentro del documental de la comunidad. ¡°El de Madrid suele tratar de los problemas de la gran urbe, la soledad y el aislamiento, que es menos habitual en el resto de Espa?a¡±.

M¨¢s informaci¨®n en www.documentamadrid.com