Osakidetza no paga el Sovaldi a un enfermo de hepatitis C que lo compr¨®

El Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, ha rechazado pagar el importe del Sovaldi, o compensarle con una parte, a un enfermo diagnosticado hace 30 a?os de hepatitis C, y que decidi¨® hipotecarse y comprarlo como un medicamento extranjero, ante la disyuntiva de sobrevivir o empeorar de forma irreversible y quiz¨¢s morir, en un momento en el que el sector p¨²blico todav¨ªa no lo suministraba.

En una resoluci¨®n administrativa firmada el pasado 5 de febrero, y recurrida en marzo, el Servicio Vasco de Salud, Osakidetza desestim¨® hacerse cargo de los 50.000 euros que el paciente, al que le prescribieron el medicamento Sovaldi, desembols¨® para conseguirlo. La Administraci¨®n argumenta que ¡°el paciente accedi¨® libremente a la compra del Sovaldi¡±.

En el recurso, la familia insiste en que tanto los m¨¦dicos de la p¨²blica que le trababan en el Hospital de Basurto, en Bilbao, como despu¨¦s los de la privada que le consiguieron el medicamento previo pago de 50.000 euros, coincidieron en que, despu¨¦s de tres d¨¦cadas conviviendo con la enfermedad, hab¨ªa entrado en una fase precirr¨®tica en la que que hab¨ªa que actuar con rapidez para frenar da?os quiz¨¢s irreversibles. Todos le verbalizaron que, de haber una soluci¨®n, esa era el Sovaldi. No pod¨ªa esperar m¨¢s.

El problema era que en aquella ¨¦poca, en marzo de 2014, la salud p¨²blica no lo suministraba, y segu¨ªa negociando una rebaja de los precios del tratamiento con el laboratorio que lo comercializaba. En algunos pa¨ªses de la UE ya se prescrib¨ªa con notable ¨¦xito.

Volver¨ªamos a pagar el doble para defender su vida¡±,? dice la familia

En esa coyuntura, la familia de A. J. P. G. ya muy enfermo, casado y con dos hijos, y con baja m¨¦dica por dicha enfermedad, ¡ªes aut¨®nomo¡ª tom¨® la decisi¨®n de buscarlo por su cuenta. ¡°?Es eso acceder libremente a la compra del medicamento?¡±, se preguntaba la pasada semana la familia del enfermo, en Bilbao. ¡°?Y si hubiera fallecido o entrado en una fase irreversible. Eso es tener libertad para decidir?¡±, se cuestionaban ante la postura de la Administraci¨®n.

La compra del medicamento no fue un capricho, y tampoco una decisi¨®n precipitada.

En Basurto le propusieron el mismo tratamiento que dispensaban desde hac¨ªa a?os y que siempre le hab¨ªan desaconsejado, por su escaso resultado y por los efectos adversos que iba a provocar. De forma paralela y confidencial le comentaban que la mejor opci¨®n era el Sovaldi por los resultados que estaba ofreciendo en los pacientes que lo recib¨ªan.

Pese a todo accedi¨® a recibir el tratamiento que le proporcion¨® el especialista de la sanidad p¨²blica.

Despu¨¦s de un mes la enfermedad no hab¨ªa retrocedido, sus par¨¢metros segu¨ªan igual de mal. El tiempo corr¨ªa y alguien les sugiri¨® que quiz¨¢s podr¨ªan conseguir el principio activo que estaba logrando terminar con el virus de la hepatitis C en un elevado porcentaje, a trav¨¦s de la sanidad privada, como un medicamento extranjero.

Los requisitos eran duros. Primero ten¨ªa que ser, objetivamente, un paciente susceptible de ser tratado con el Sovaldi, y aunque de eso no ten¨ªan ninguna duda, ya que se lo hab¨ªan diagnosticado tanto los m¨¦dicos de la p¨²blica como los de la privada, despu¨¦s hab¨ªa que lograr la aprobaci¨®n de la Agencia Espa?ola del Medicamento y del Ministerio de Sanidad.

Lo lograron en julio del pasado a?o, un mes despu¨¦s de haber comenzado el tratamiento dispensado por Osakidetza sin ning¨²n ¨¦xito.

Una cl¨ªnica privada de Bilbao lo adquiri¨® como medicamento extranjero, previo pago de m¨¢s de 50.000 euros, ¡ª16.920 euros mensuales durante los tres meses del tratamiento¡ª. Solo dos semanas despu¨¦s de empezar con el Sovaldi ¡ªel propio Hospital de Basurto y sus especialistas le hicieron el seguimiento¡ª el virus hab¨ªa desaparecido.

Pagaron 50.000 euros y la Sanidad p¨²blica lo compra por 25.000

En noviembre finaliz¨® el tratamiento con ¨¦xito y dos meses despu¨¦s el Servicio Vasco de Salud, Osakidetza, pas¨® de dispensar el medicamento exclusivamente por criterios compasivos a suministrarlo por criterios m¨¦dicos. La familia del paciente de Bilbao hab¨ªa seguido solicitando el medicamento nuevo v¨ªa administrativa al sector p¨²blico pero obtuvo la negativa de forma sistem¨¢tica. Como ahora.

La familia opt¨® por defender la vida del enfermo y aferrarse a las posibilidades de que su estado no empeorara, y tom¨® la decisi¨®n de solicitar un cr¨¦dito para afrontar ¨ªntegramente los 50.000 euros que costaba.

Ahora le pide a la Administraci¨®n que le devuelva su esfuerzo con otro. Sanidad pact¨® para el Sovaldi un precio de 25.000 euros por tratamiento. ¡°Volver¨ªamos a hacerlo, a pagar el doble, en igualdad de condiciones, para defender la vida, y volver¨ªamos a gritar que es una injusticia que los derechos y la vida de los pacientes dependan de negociaciones comerciales¡±, sostiene la familia, que est¨¢ decidida a llegar a la v¨ªa judicial si la Sanidad vuelve a decir que no en la v¨ªa administrativa.