La agon¨ªa del Barrio Ferroviario

Los vecinos del Barrio Ferroviario de Sant Vicen? de Calders se encuentran los s¨¢bados para tomar el aperitivo. Se re¨²nen en el club social alrededor de mesitas de pl¨¢stico, en un patio de hormig¨®n rodeado de vi?as. Hay una caseta donde, gracias al bote com¨²n, la despensa est¨¢ llena de cervezas, refrescos y frutos secos. Delante tienen las v¨ªas del tren que conectan Barcelona con el sur. Los vecinos aseguran que el bloque letra A, el que los protege del viento, est¨¢ totalmente ocupado por inquilinos que han entrado por la fuerza. El barrio ferroviario de Sant Vicen? de Calders es una de las colonias de empleados de Adif m¨¢s antiguas de Espa?a.

M¨¢s de 300 personas viv¨ªan hace 50 a?os en el Barrio Ferroviario. Hoy son poco m¨¢s de la mitad. Renfe, ahora Adif, alquila desde hace un siglo estos apartamentos a sus empleados establecidos en la regi¨®n de Tarragona: maquinistas, interventores, t¨¦cnicos de se?ales, mec¨¢nicos y sus familiares. El Barrio Ferroviario es uno de los centros urban¨ªsticos m¨¢s peculiares de Catalu?a. Son seis pabellones construidos entre 1905 y 1920, edificaciones s¨®lidas, paredes de 50 cent¨ªmetros, techos de 3,90 metros de altura. Aguantaron los intensos bombardeos de la Guerra Civil sobre este enclave estrat¨¦gico del transporte republicano. Tambi¨¦n resistieron la presi¨®n de los a?os de la burbuja inmobiliaria, cuando hubo planes para reurbanizar la zona, tan golosa, a tocar de la playa.

Reliquias de un tiempo pasado

Los once bloques est¨¢n escoltados por higueras y eucaliptos alt¨ªsimos, por cubiertos improvisados con maderas y planchas de metal que los vecinos tienen para guardar sus enseres. Hay la escuela, ahora sin ni?os, utilizada como sede de la Asociaci¨®n Familiar Ferroviaria. En el campo de f¨²tbol todav¨ªa hay un letrero del F¨²tbol Club Estaci¨®n. Tambi¨¦n hay capilla, peque?a y discreta, que se abre para la fiesta mayor. ¡°Mis abuelos se casaron aqu¨ª¡±, dice Emelina. Ella naci¨® aqu¨ª, sus padres tambi¨¦n. Todos eran ferroviarios, su marido, joven como ella, tambi¨¦n trabaja en Renfe. Emelina lamenta la degradaci¨®n del lugar y sobre todo la presencia ¡°de desconocidos que van y vienen y no se sabe qu¨¦ hacen. Nada bueno, seguro. A veces aparecen coches de lujo. Algunos tienen un sistema de cables para avisarse entre pisos¡±.

El Barrio Ferroviario es uno de los centros urban¨ªsticos m¨¢s peculiares de Catalu?a

Josefa Saavedra llega de la playa y me invita a visitar su piso. Vive en el rellano del bloque B con su marido. El apartamento hace unos 70 metros cuadrados y todav¨ªa conserva parte del mobiliario original. El precio de alquiler es de unos 350 euros. El agua es m¨¢s cara de lo habitual, 20 euros al mes. El agua llega de unas cisternas elevadas gigantes que bajan hasta los pisos. Saavedra tiene un vecino nuevo desde hace una semana, ¡°un chico del Este que ha ocupado un piso vac¨ªo. Es simp¨¢tico, saluda¡±. Cada vez hay m¨¢s gente ocupando pisos vac¨ªos ilegalmente. De todas partes salen mangueras con las cuales, seg¨²n los vecinos, obtienen agua potable p¨²blica. ¡°Tienen electricidad y no la pagan, la paga Adif¡±, dice Saavedra.

Diferencias entre Adif y El Vendrell

Acompa?ando a su marido, Saavedra ha vivido en residencias de Renfe en Poblenou, Guadix y C¨®rdoba. ¡°El de Sant Vicen? es el centro m¨¢s grande y donde he pasado m¨¢s tiempo. Claro que nos gustar¨ªa comprar el piso, pero Adif no nos lo vende¡±. Adif tiene un servicio de venta de sus inmuebles en todo Espa?a. En Catalu?a ofrece viviendas en Reus, Montcada i Reixac, Tremp y Vilanova i la Geltr¨². Ninguna oferta es del barrio de Sant Vicen? de Calders. Una portavoz de Adif explica que no quieren vender inmuebles de esta colonia porque est¨¢ pendiente de un plan de derribo del Ayuntamiento de El Vendrell ¨Cdel cual depende Sant Vicen?¨C iniciado el 2007 y que todav¨ªa no est¨¢ cerrado. El alcalde, Mart¨ª Carnicer (PSC), asegura que el objetivo es preservar los bloques y aplicar un plan parcial urban¨ªstico que mejore la zona y que permita un aprovechamiento social de los pisos vac¨ªos. Carnicer a?ade que una idea es la construcci¨®n en el barrio de un parking para pasajeros de la regi¨®n, ¡°para dinamizar el territorio¡±. Carnicer denuncia que Adif no ha tenido nunca inter¨¦s en aceptar ning¨²n plan de mejora. La empresa confirma que se posicionaron en contra del plan del 2007 ¡°porque no quedaba clara la viabilidad econ¨®mica, se preve¨ªa la construcci¨®n de un viaducto por encima de la estaci¨®n, financiado por Adif¡±.

Las escaleras del bloque B, el de Saavedra, tienen un estado lamentable: la pintura de las paredes cae, hay humedades, las barandillas est¨¢n enmohecidas, hay, efectivamente, los cables que describ¨ªa Emelinda, que salen de las ventanas de algunos pisos. ¡°Es que nadie quiere poner ni un duro para hacer reformas¡±, lamenta Saavedra. La responsabilidad primera es de la compa?¨ªa propietaria. La colonia parece dejada de la mano de Dios, no s¨®lo los edificios, tambi¨¦n el empedrado de las calles y los caminitos que atraviesan las v¨ªas. Adif responde que se hacen mejoras pero que ¡°van un poco lentas porque somos una empresa p¨²blica y todo se tiene que hacer con adjudicaciones¡±.

¡°La sensaci¨®n es que la estrategia de Adif es sacarse de encima estas colonias porque las condiciones, el mantenimiento, se tienen que actualizar¡±, dice Josep Mar¨ªn, historiador del museo del Ferrocarril de Catalu?a. Desde Adif confirman que el objetivo es ¡°cuanto m¨¢s inmuebles se vendan, mejor¡±, pero insisten en que la situaci¨®n urban¨ªstica de la colonia de Sant Vicen? s¨®lo los permite buscar nuevos arrendatarios.

Adif no act¨²a, seg¨²n los Mossos

Mar¨ªn destaca que en Catalu?a hay tambi¨¦n las colonias de Ma?anet y la de Portbou, a pesar de que son m¨¢s peque?as. Mar¨ªn naci¨® en el Barrio Ferroviario de Sant Vicen? y vivi¨® hasta los 22 a?os. Recuerda cuando hizo la comuni¨®n en la capilla, los juegos en el patio de la escuela. Ahora va de vez en cuando y confirma este declive de la colonia: ¡°El momento en que tuvo m¨¢s habitantes es a partir del 1956, cuando se electrific¨® la l¨ªnea Zaragoza-Alicante y se instalaron los t¨¦cnicos el¨¦ctricos. A finales de los a?os 60 se empieza a deshabitar porque Renfe ocupa cada vez menos empleados en la zona¡±. Actualmente el 32% de las viviendas est¨¢n vac¨ªas y el 20% ¨C16 apartamentos¨C est¨¢n ocupadas ilegalmente. Adif asegura que ha denunciado estas ¡°ocupaciones no consentidas, pero es dif¨ªcil eliminar este fen¨®meno, y menos por parte de la propiedad. Se han tomado medidas como tapias, incluso dificultar la habitabilidad de las viviendas, pero sistem¨¢ticamente vuelven a ser ocupadas y, de nuevo, se tramita la denuncia¡±. Los Mossos d'Esquadra han pedido en varias ocasiones a Adif que presente denuncia por la v¨ªa civil, ¡°pero no lo ha hecho. Tienen un bloque abandonado donde los hemos sugerido que hagan mantenimiento, pero hasta ahora no ha habido ning¨²n cambio¡±, asegura un portavoz de los Mossos.

La asociaci¨®n de vecinos envi¨® el a?o pasado al Ayuntamiento una carta advirtiendo de problemas de seguridad por la carencia de alumbrado ocasionado por robos de cable. Los Mossos d'Esquadra aseguran que el barrio no presenta un ¨ªndice de criminalidad elevado, en parte porque en la zona de la estaci¨®n se han intensificado las patrullas.