Los negocios p¨²blicos de la familia Sumarroca

La actividad empresarial de los Sumarroca arranca hace poco m¨¢s de medio siglo con el nacimiento de dos empresas que constituir¨¢n el tronco de los negocios de la familia: Emte y Teyco. La primera se dedicaba a las instalaciones el¨¦ctricas, mientras que se la segunda se especializ¨® en la construcci¨®n y la ingenier¨ªa. ¡°Cogimos un local realquilado y para hacer el primer banco de trabajo fuimos a comprar los tablones en una carpinter¨ªa. Como no pod¨ªamos ni pagar un triciclo para llevar las maderas, ¨ªbamos por la calle uno delante del otro carg¨¢ndolas en la espalda¡±, relataba Carles Sumarroca Coixet, el padre del grupo empresarial, al periodista Francesc Canosa en Capitans d¡¯Ind¨²stria.

La familia Sumarroca pronto dejar¨ªa atr¨¢s esas estrecheces. Sus negocios se han ido expandiendo hoy a las infraestructuras, la gesti¨®n de equipamientos o residuos, los hoteles, la energ¨ªa e¨®lica e incluso de vino y cava. Pero el apellido est¨¢, adem¨¢s, estrechamente vinculado a Converg¨¨ncia. Sumarroca Coixet fue fundador del partido y amigo de varios de sus dirigentes, entre ellos Jordi Pujol. La familia form¨® parte de proyectos vinculados con el mundo nacionalista, como el peri¨®dico El Correo Catal¨¢n, la patronal empresarial Femcat o el proyecto de Spanair.

Las relaciones empresariales de los Sumarroca con los gobiernos de CiU siempre fueron estrechas, hasta el punto de ser el centro de varias adjudicaciones pol¨¦micas. Era raro el a?o en el que sus compa?¨ªas no constaban entre las principales adjudicatarias de la obra p¨²blica del Ejecutivo catal¨¢n. El grupo fue objeto de pol¨¦mica en la adjudicaci¨®n del Hospital General de Catalu?a a principios de la d¨¦cada pasada o el controvertido mapa e¨®lico que intent¨® impulsar el tripartito.

Pero fue despu¨¦s del c¨¦lebre ¡°3%¡± que denunci¨® ¡ªy luego se envain¨®¡ª el expresidente Pasqual Maragall cuando saltaron a luz presuntas irregularidades de la empresa p¨²blica de vivienda Adigsa en obras asignadas a Teyco sin contrato. Para hacerlo, se empleaba el mecanismo de los ¡°reformados¡±, es decir, los a?adidos de obras que disparaban la factura para el contribuyente. En los a?os en los que se dieron esas desviaciones ¡ªadvertidas posteriormente por la Sindicatura de Cuentas¡ª las empresas de la familia constaban entre las principales donantes de la Fundaci¨®n Trias Fargas, hoy rebautizada como Catdem y vinculada a CDC.

Las compa?¨ªas no escaparon de la crisis y sufrieron la dr¨¢stica ca¨ªda de la adjudicaci¨®n de la contrataci¨®n p¨²blica por los planes de austeridad. Emte, pilotada por Carles Sumarroca Claverol, se fusion¨® en 2009 con Comsa, propiedad de la familia Miarnau, con la que ya hab¨ªa realizado varios proyectos. Esa uni¨®n alumbr¨® el octavo grupo de infraestructuras y construcci¨®n. Teyco vio c¨®mo su facturaci¨®n ca¨ªa en picado, ante lo cual deshac¨ªa sus alianzas inmobiliarias con la CAM y Banco de Valencia y sal¨ªa a buscar proyectos en Am¨¦rica Latina. A pesar de aprovechar la apertura de los mercados, Jordi Sumarroca abogaba por el proteccionismo empresarial en Catalu?a.

No siempre los Sumarroca han estado en negocios igual exitosos. Carles Sumarroca Coixet era socio de la empresa de curtidos Tipel, cuyo accionariado estaba controlado por la familia de Llu¨ªs Prenafeta, exconsejero de Presidencia de la Generalitat y en la que trabaj¨® el actual presidente Artur Mas. El proyecto hizo aguas y la empresa termin¨® quebrando.