Ese humilde pollo asado
Sergi Arola ha abierto en Chueca El pollo gamberro, un asador que renueva un plato hist¨®ricamente maltratado en Madrid
El medi¨¢tico chef Sergi Arola ha visto un hueco en el mercado y ha abierto El Pollo Gamberroen Barquillo, 34. La idea de su local de Chueca es sencilla: cocinar pollo ecol¨®gico procedente del mercado de San Ant¨®n asado en horno de carb¨®n, dando la posibilidad de llev¨¢rselo o comerlo all¨ª. Se agradece la iniciativa, porque aunque en los ¨²ltimos a?os se han renovado y dignificado platos ignorados, uno de los que faltaba por actualizar es el pollo asado.
En Madrid se cuentan con los dedos los lugares donde es posible encontrarlos crujientes y jugosos. Los hay en panader¨ªas que aprovechan sus hornos para asar pollos por encargo o lugares como Casa Mingo (paseo de la Florida, 34); La Villa del Narcea en Chamber¨ª (Fernando el Cat¨®lico, 4)¡ª, o El Murciano (calle de Valencia, 18), en Lavapi¨¦s. Son locales tradicionales hasta el extremo, tan excepcionales que se reconocen por las colas que se montan los fines de semana buscando pollos para llevar, una tradici¨®n familiar los fines de semana.
Porque aunque hay asadores en casi todos los barrios, en muchos parece que en vez de cocinarlo le tienen man¨ªa al pobre bicho. Se tiende a abrasarlo y aterroriza la pregunta ¡°?con salsa?¡±, que suele poner al cliente en la disyuntiva de llevarse la zapatilla reseca o sumergida en un l¨ªquido que parece una sopa de extra?a procedencia. Es posible que en el futuro el pollo asado corra la suerte de la hamburguesa, ejemplo de c¨®mo algo a lo que se miraba por encima del hombro se ha transformado en un plato gourmet.O la de la humilde tortilla de patatas que recibe tanta atenci¨®n que se discute hasta el ¨²ltimo detalle. Hay foros dedicados en exclusiva a cuestiones tan trascendentales como la forma de cortar la cebolla. No, no se vislumbra acuerdo.
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