Un cad¨¢ver honorable

Este culebr¨®n culmina la actual temporada con un final espectacular. No como en Borgen, civilizado y sutil, sino como en Juego de Tronos, con sangre a raudales, ejecuciones rituales y venganzas.

1.- Rueda la cabeza m¨¢s preciada. El conductor del proceso, el timonel del viaje a Itaca, tira la toalla. Promete volver y sus fans ya le presentan como m¨¢rtir del proceso que resucitar¨¢ como primer presidente de la rep¨²blica independiente. Quieren vender la derrota como victoria, tejer con ¨¦l una leyenda, como la del rey portugu¨¦s don Sebasti¨¢n, desaparecido en la derrota de Alcazarquivir y esperado desde entonces como salvador de la patria.

Para convencerle de que deb¨ªa echar la toalla han servido todos los instrumentos, con la adulaci¨®n ante todo. La grandeza de su gesto, una talla pol¨ªtica que crece, la visi¨®n del hombre de Estado, el aut¨¦ntico l¨ªder de un pueblo¡­ etc¨¦tera. No es la vanidad su ¨²nica virtud. Cuenta tambi¨¦n el orgullo herido, que necesita mayores sacrificios. Eso es lo que explica este inexplicable pacto de investidura, tejido todo ¨¦l con el crudo lenguaje del poder.

Sus puntos esenciales son los tres primeros, en los que se aseguran a la mayor¨ªa de gobierno los dos diputados que complementan la mayor¨ªa presidencial, se proh¨ªbe a los cupaires formar mayor¨ªas indeseables para el proc¨¦s y se garantiza la investidura en primera votaci¨®n. Los otros dos puntos son meramente ornamentales a efectos de la investidura y de la estabilidad parlamentaria, y tienen como ¨²nica funci¨®n satisfacer el orgullo herido de Mas. En ellos la CUP hace autocr¨ªtica y prop¨®sito de enmienda y adem¨¢s se compromete a remodelar el grupo parlamentario ¡°para visualizar un cambio de etapa¡±. Es de temer que esta factura, vengativa y divisiva, tambi¨¦n pasar¨¢ pronto otras nuevas facturas.

2.- Sufre la idea m¨¢s apreciada, el derecho a decidir, que es el principio democr¨¢tico. Hasta ahora val¨ªan m¨¢s las urnas y los votos que los pactos pasteleados en los despachos. Este acuerdo pasteleado a oscuras y a toda velocidad se ha alcanzado para evitar las urnas, para que los ciudadanos no volvieran a pronunciarse. El independentismo quiere congelar la foto del 27S porque sabe que la cima alcanzada dif¨ªcilmente se repetir¨¢. Su idea de democracia no corresponde a las mayor¨ªas repetidas y persistentes a favor de la independencia que exig¨ªa el Tribunal Supremo canadiense en su sentencia famosa sobre la Ley de Claridad para validar la eventualidad de un refer¨¦ndum, sino a la creaci¨®n moment¨¢nea y oportunista de una mayor¨ªa para desconectar. Un dato preocupante para todos los dem¨®cratas.

3.- Sufre el parlamento, ninguneado y manipulado de formas partidista como instituci¨®n, de forma que se ve obligado a realizar en ocho horas, en domingo, y sin atender a las formalidades y a la cortes¨ªa parlamentaria, lo que en circunstancias normales llevar¨ªa al menos dos d¨ªas. Pero no es extra?o, el proceso deja un reguero de muertos y heridos inacabable, entre los que se encuentran casi todas las instituciones catalanas, desde la presidencia y los medios de comunicaci¨®n p¨²blicos hasta el parlamento, todo bajo la presidencia de un cad¨¢ver m¨¢s que excelente, honorable.