Las estaciones ¡®fantasma¡¯ de Barcelona
Cambios en las l¨ªneas y mejoras en las infraestructuras han dejado varios apeaderos en desuso
En la red ferroviaria de Barcelona hay varias estaciones subterr¨¢neas que ya no se usan. Muchas de ellas no se llegaron a abrir y otras han sido derribadas parcialmente dejando parte de los andenes. El caos en la red de Cercan¨ªas que se ha producido este martes lo ha provocado, seg¨²n la investigaci¨®n, el incendio de un colch¨®n en un apeadero que no se lleg¨® a usar entre Arc de Triomf y El Clot. Los cambios de planificaci¨®n en las l¨ªneas y mejoras en las infraestructuras han dejado instalaciones abandonadas por las que corren leyendas urbanas y visitantes de todo tipo. Hay rutas organizadas para hablar de ellas?e incluso fan¨¢ticos del submundo del ferrocarril que desaf¨ªan las prohibiciones y bajan a las v¨ªas para recorrerlas.
Bifurcaci¨®-Vilanova, la estaci¨®n origen del fuego de este martes, iba a ser la tercera de Barcelona cuando Sants todav¨ªa era de mercanc¨ªas y todo el tr¨¢fico lo concentraban Norte y Francia. Situada poco antes del desv¨ªo en la que hoy es la estaci¨®n de autobuses, se construy¨® este apeadero subterr¨¢neo que conserva mobiliario, escaleras mec¨¢nicas, andenes y vest¨ªbulo. Nunca lleg¨® a funcionar?debido a una reestructuraci¨®n a finales de los a?os 80, en la que desaparec¨ªa el ramal Marina, se soterraba el ramal Gl¨°ries y se creaba el ramal Bes¨®s. Adem¨¢s, parte del and¨¦n tuvo que ser destrozado para sortear un cruce con el nuevo trazado que llevar¨ªa la l¨ªnea de Matar¨® hasta L'Hospitalet. Las instalaciones han estado dejadas durante a?os y han acumulado basura y destrozos. "Hay c¨¢maras de seguridad y en ocasiones, agentes de Adif. Hace tiempo que no se ve gente por esa zona, pero ha habido ¨¦pocas en las que era una rambla", dice un conductor de trenes de Rodalies que prefiere no desvelar su identidad.
Adif asegura que no tiene ning¨²n plan especial para este tipo de instalaciones sin uso. No obstante, fuentes de la compa?¨ªa propietaria de las infraestructuras estatales aseguran que en 2015 tuvieron m¨¢s de 900 denuncias por "tr¨¢nsitos indebidos" en toda Catalu?a.
Hace tiempo que no se ve gente por esa zona, pero ha habido ¨¦pocas en las que era una rambla", dice un conductor de Rodalies
Sin embargo, la mayor¨ªa de las estaciones fantasma?de Barcelona son de la red de metro. Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) no quiere calificarlas as¨ª y las tilda de "derribos". La ¨²nica que aceptan fuentes de la compa?¨ªa es la que tradicionalmente se conoce como Gaud¨ª, en el actual t¨²nel de la l¨ªnea 5 entre Hospital Sant Pau y Sagrada Familia, que no se lleg¨® a inaugurar. Con la uni¨®n de las dos antiguas l¨ªneas V y II ¡ªla anterior nomenclatura era en n¨²meros romanos¡ª en 1970 se decidi¨® dejar fuera de la red. La compa?¨ªa la mantiene porque cuenta con instalaciones como un auditorio y espacios para asociaciones. Los andenes son reconocibles desde el tren.?
El n¨²mero de apeaderos abandonados conocidos var¨ªa seg¨²n los mitos y las leyendas que pululan por Internet. Algunas listas de blogs hablan de 10 o 12 estaciones. Las listas est¨¢n infladas porque muchos blogueros incluyen estaciones que nunca se llegaron a construir como Travessera (L3) o de las que no queda pr¨¢cticamente nada como Ferran (L3) o Bordeta (L1). La empresa de rutas por Barcelona CultRuta se centra en el tramo de la actual V¨ªa Laietana, germen del metro y en el eje de Ferrocarrils de la Generalitat, antiguamente conocido como tren de Sarri¨¤. "A la gente le gustan mucho las historias y los enigmas pero la red de Barcelona no es tan grande como para tener tantas estaciones abandonadas", dice Manuel Marina, historiador que coordina la ruta BCN subterr¨¢nea: historias del metro. Marina lleva a los grupos por las instalaciones accesibles y las superficies y les ense?a fotos de las incursiones que s¨ª ha podido hacer con t¨¦cnicos oficiales de TMB y Adif.
En ese primer tramo de subterr¨¢neo de la Via Laietana hay dos estaciones fallidas: Banc y Correus. La primera est¨¢ a 25 metros de Caixa Catalunya, que en los a?os 30 era la segunda sede del Banco de Espa?a y fruto de m¨²ltiples leyendas. "La gente empez¨® a llamarla 'Banco' porque dec¨ªan era una estaci¨®n secreta que conectaba con la sede de la entidad y que paraban trenes cargados de dinero. Es falso porque est¨¢ a 25 metros y porque el banco se hizo despu¨¦s", explica Marina. La segunda s¨ª existi¨® y se cerr¨® en 1972 con la prolongaci¨®n de la actual l¨ªnea 4 y la construcci¨®n cercana de la estaci¨®n de la Barceloneta. Conserva anuncios de la ¨¦poca e incluso carteles electorales de unas pseudoelecciones municipales durante el r¨¦gimen franquista.
Adif dice que en 2015 tuvo m¨¢s de 900 denuncias por "tr¨¢nsitos indebidos" en ?Catalu?a
El tren Barcelona-Sarri¨¤, actual tramo de las l¨ªneas de Ferrocarrils que van al Vall¨¨s est¨¢ plagado de an¨¦cdotas. Es el t¨²nel m¨¢s antiguo y data del siglo XIX. A¨²n as¨ª, la ¨²nica estaci¨®n fantasma de la que hablan los historiadores es Avenida de la Luz, una galer¨ªa subterr¨¢nea que se construy¨® para salvar el desnivel con la actual l¨ªnea 1 del metro en Ronda Universitat. Marina lleva a sus clientes para explic¨¢rsela al ¨²nico espacio posible, un local anexo a la tienda de cosm¨¦ticos Sephora del centro comercial Triangle.
Los que s¨ª bajan a las v¨ªas son el colectivo trackrunners. Este grupo an¨®nimo que opera en varias ciudades europeas se salta las prohibiciones y forman parte de los "tr¨¢nsitos indebidos" de los que habla Adif. En su web se pueden ver v¨ªdeos y fotogaler¨ªas en las citadas estaciones de Vilanova, en Correus, o las obras del tramo central de las l¨ªneas 9 y 10 de metro, actualmente paralizadas.
"Somos un grupo de gente con un inter¨¦s com¨²n: mirar todo", escriben en su web. Su inter¨¦s por lo subterr¨¢neo lo describen con un halo m¨ªstico que desvela una filosof¨ªa libertaria: "Hay pocas formas en este mundo de ser verdaderamente libre. Este sitio [el colectivo] naci¨® del deseo de mostrar que es posible hacer cualquier cosa. No somos los primeros, ni los ¨²ltimos, s¨®lo un grupo de pasajeros de este tren que llamamos vida tomando una peque?a parte de la ciudad para nosotros mismos".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.