El metro al aeropuerto arranca con un choque entre Puigdemont y el Gobierno

Desde la distancia, el saludo inicial entre Puigdemont y G¨®mez-Pomar pareci¨® cordial: apret¨®n de manos e intercambio de palabras entre sonrisas. Pero los discursos parecen dar por finiquitada la etapa de mano tendida que represent¨® el consejero Santi Vila cuando era el titular de Territorio, a quien Artur Mas lleg¨® a poner como ejemplo de lo que ten¨ªan que ser las relaciones entre los gobiernos auton¨®mico y central. Lo que podr¨ªa haber sido una pl¨¢cida inauguraci¨®n, con el mayor despliegue de kil¨®metros en una sola vez que ha protagonizado la red del metro de Barcelona y la llegada hasta el aeropuerto, acab¨® convertida en un choque institucional.

Puigdemont denunci¨® la falta de inversiones en obra p¨²blica en Catalu?a, cuando no el gasto para mantener las instalaciones existentes. ¡°Si no hacemos nosotros las infraestructuras, no nos las hacen.¡± Y asegur¨® que el servicio que presta el servicio p¨²blico que es titularidad de la Generalitat es mejor que las que presentan las administraciones del Estado. ¡°A parte de tener la responsabilidad, hemos entendido que hab¨ªa que invertir en mantenimiento y all¨ª donde nos ha tocado gestionar a nosotros la responsabilidad de un buen servicio, all¨ª hay resultados.¡±

Antes, la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, la socialista N¨²ria Mar¨ªn, hab¨ªa reclamado ¡°abordar definitivamente¡± las prioridades en la red de Rodalies. Y el de El Prat, Llu¨ªs Tejedor, hab¨ªa animado a impulsar la estaci¨®n intermodal de su ciudad. Pero sus palabras no generaron el malestar de las de Puigdemont. El l¨ªder del Partido Popular en Catalu?a, Xavier Garc¨ªa Albiol, se levant¨® a medio discurso y abandon¨® el acto que segu¨ªan 800 invitados y m¨¢s de un centenar de medios de comunicaci¨®n entre algunos silbidos.

Julio G¨®mez Pomar s¨ª aguant¨® la tormenta, sentado en la primera fila. Sin derecho a discurso, se desquit¨® posteriormente ante algunos periodistas. ¡°Creo que la posici¨®n que viene manteniendo el Gobierno de Catalu?a en relaci¨®n con Espa?a es reiterada y evidente. No voy a entrar a comentar unas palabras que se califican por s¨ª solas¡±, sostuvo sobre el discurso, para defender que el Estado ya inyectado en Catalu?a 11.000 millones en los ¨²ltimos cuatro a?os para construir infraestructuras. El secretario de Estado tambi¨¦n acus¨® al Ejecutivo catal¨¢n de ¡°falta de lealtad institucional¡± por haber cursado las invitaciones al Ministerio de Fomento menos de un d¨ªa antes del acto.

Ese choque institucional puso fin a una inauguraci¨®n que quer¨ªa celebrar ¡°el salto de gigante¡± ¡ªseg¨²n Puigdemont¡ª que significa poner en marcha la L¨ªnea 9 Sur, veinte kil¨®metros de t¨²neles y quince estaciones. El metro de Barcelona llega ahora al recinto de Fira de Barcelona en L'Hospitalet, a Parc Log¨ªstic, a Mercabarna, al pol¨ªgono de Mas Blau o, finalmente, a las dos terminales del aeropuerto. Desde 2010 no se inauguraba ning¨²n nuevo tramo y ahora queda pendiente el ramal de la L¨ªnea 10 (que cubrir¨¢ los barrios de la Zona Franca a partir de 2017, seg¨²n la ¨²ltima promesa) y el resto de la l¨ªnea 9, que tiene que unir Zona Universit¨¤ria y Sagrera. No hay fecha para ello.

El tramo inaugurado ayer lo pudieron poner a prueba a partir de las tres de la tarde miles de personas, que en algunos momentos atestaron los convoyes autom¨¢ticos que cubren el servicio.