Una d¨¦cada de Ego

Samsung Ego, la secci¨®n emergente de la pasarela madrile?a cumple su primera d¨¦cada el pr¨®ximo martes como colof¨®n a los desfiles que comienzan hoy. Se celebra en IFEMA, el mismo espacio donde desfilan firmas consagradas, en la? Mercedes-Benz Fashion Week Madrid y con una infraestructura similar. Pero no siempre fue as¨ª. ¡°Parece mentira que pudi¨¦ramos vestir a 25 modelos en un backstage tan peque?o¡±, recuerda Nando Cornejo, fundador de la firma Potipoti, a prop¨®sito de la primera edici¨®n de Ego, celebrada en febrero de 2006 en Alcal¨¢ 31.

All¨ª, el espacio era tan reducido que apenas dejaba sitio para una pasarela a nivel del suelo, dos filas de asientos e, inmediatamente detr¨¢s de ellas, unos paneles trasl¨²cidos que permit¨ªan adivinar, a modo de sombras chinescas, el movimiento en los vestuarios. Hab¨ªa prisas, estr¨¦s, p¨²blico joven y m¨²sica. Sin duda, una s¨ªntesis perfecta de la faceta m¨¢s atractiva de la industria de la moda, y una dosis de ox¨ªgeno para una pasarela, la madrile?a, percibida como continuista.

Varios nombres de la pasarela ¡®adulta¡¯ que comienza hoy salieron de Ego

El gestor cultural Andr¨¦s Aberasturi fue el impulsor de Ego hace 10 a?os, y hoy sigue al frente del evento desde la agencia creativa Pelonio. ¡°Nuestra referencia era el Circuit de Barcelona, pero quer¨ªamos dar a la escena madrile?a el protagonismo que merec¨ªa¡±, comenta.

Dicho protagonismo lleg¨® a trav¨¦s de propuestas experimentales y visualmente impactantes. ¡°Recuerdo un desfile de Tiago Valente con una instalaci¨®n de madera en plena pasarela, y tambi¨¦n la primera colecci¨®n de Rub¨¦n G¨®mez, que fue presentando sus dise?os mientras un actor los describ¨ªa por megafon¨ªa, como se hac¨ªa en los desfiles de Alta Costura¡±, dice Aberasturi. Cuando G¨®mez regres¨® a Ego, lo hizo con un proyecto igualmente impactante: abrigos que se transformaban en tiendas de campa?a e inclu¨ªan dispositivos digitales. Lo hac¨ªa bajo el amparo de Samsung Ego Innovation Project, un premio centrado en la alianza entre moda y tecnolog¨ªa y que en su anterior edici¨®n fue a parar a una colecci¨®n de Pepa Salazar cuyos dise?os se transformaban con el agua.

La firma tecnol¨®gica coreana es el patrocinador m¨¢s longevo y m¨¢s fruct¨ªfero. ¡°Los patrocinios son esenciales, porque nuestro presupuesto es un 5% del que maneja Mercedes-Benz Fashion Week Madrid¡±, explica Aberasturi. La sostenibilidad financiera es un factor clave, porque de ella depende la base del proyecto: los dise?adores s¨®lo tienen que preocuparse de producir su colecci¨®n, ya que los costes del desfile los paga la organizaci¨®n.

Cada seis meses, el equipo de Samsung Ego recibe las candidaturas para participar y elabora la lista de admitidos. Con el tiempo, ha llegado la necesidad de imponer restricciones: cada dise?ador puede desfilar un m¨¢ximo de tres veces. ¡°Surgi¨® con el tiempo, al principio ni siquiera sab¨ªamos si ¨ªbamos a durar m¨¢s de tres ediciones. La medida facilita el relevo generacional, y es un modo de presionar a pasarelas m¨¢s importantes para que acepten nuevos miembros¡±, explica Aberasturi. En la secci¨®n oficial de la pasarela ¡°adulta¡± que comienza hoy, varios nombres dieron sus primeros pasos en Ego. Que Mois¨¦s Nieto, Man¨¦ Man¨¦, Juan Vidal o Mar¨ªa Escot¨¦, surgidos de Ego, desfilen este fin de semana al mismo nivel que Juanjo Oliva, Agatha Ruiz de la Prada, Amaya Arzuaga o Devota & Lomba dice mucho acerca de la funci¨®n de cantera de talentos que la pasarela emergente ha desempe?ado en la ¨²ltima d¨¦cada. Igualmente representativa es la n¨®mina de dise?adores que han dado el salto hacia la profesionalizaci¨®n plena. Etxeberria o Maria Ke Fisherman hace tiempo conquistaron el mercado global y cuentan con clientes y puntos de distribuci¨®n internacionales. ¡°La internacionalizaci¨®n siempre hab¨ªa sido una asignatura pendiente, y ellos lo han conseguido con poco apoyo¡±, explica Aberasturi.

Lo cierto es que, si bien supone una importante plataforma de difusi¨®n ¡ªya la cobertura medi¨¢tica que reciben estos desfiles sobrepasa con mucho a la que podr¨ªa conseguir cada dise?ador por separad¡ª-, estos 10 a?os han demostrado que el desfile no es un punto de llegada, sino de partida. Repasar la n¨®mina de dise?adores que han mostrado sus colecciones en la pasarela emergente madrile?a implica toparse con numerosas carreras interrumpidas y firmas olvidadas. Tambi¨¦n con dise?adores que, desde siempre, tuvieron claro que su sitio estaba en otro lugar. ¡°Nosotros ven¨ªamos de Berl¨ªn y ¨¦ramos nuevos en Madrid¡±, cuenta Nando Cornejo, de Potipoti. Hoy su firma ha desaparecido de la pasarela madrile?a, pero est¨¢ m¨¢s que consolidada en la capital alemana.

En un sector en el que abrir una tienda o producir prendas destinadas a la venta supone un reto mayor que organizar un desfile, no son pocos los creadores que reconocen que tras Ego llegan tiempos de incertidumbre. ¡°El momento m¨¢s cr¨ªtico viene ahora, cuando termine mi ¨²ltimo desfile aqu¨ª¡±, afirma el dise?ador Xavi Reyes, ganador del premio Samsung Ego a la mejor colecci¨®n el pasado mes de septiembre. El pr¨®ximo martes participar¨¢ por tercera vez en Ego y, por lo tanto, no podr¨¢ volver a repetir. Reyes cuenta con una firma propia, vende sus colecciones en su tienda online y trabaja como consultor para compa?¨ªas como Adolfo Dom¨ªnguez, un perfil profesional muy recurrente entre los j¨®venes dise?adores espa?oles, que tarde o temprano deben elegir entre centrarse en sus proyectos personales o trabajar para empresas m¨¢s grandes.

No es casualidad que los estudios de dise?o de Inditex, uno de los patrocinadores principales de la pasarela madrile?a, empleen a varios dise?adores surgidos de Ego. Es precisamente en ese papel como entidad intermediaria entre los j¨®venes talentos y la industria, los medios de comunicaci¨®n y el mercado textil donde reside la mayor fortaleza de Samsung Ego. La edici¨®n que tendr¨¢ lugar el pr¨®ximo martes no anticipa demasiadas sorpresas, pero su continuidad afirma la consolidaci¨®n de un proyecto afianzado contra todo pron¨®stico en el permanente sobresalto de lo nuevo.