Puigdemont promete revertir los recortes sin explicar c¨®mo

Carles Puigdemont celebr¨® ayer los cien d¨ªas de su Gobierno presentando un plan para lo que queda de legislatura (de duraci¨®n incierta) y con un objetivo grandilocuente: ¡°Revertir los recortes, revertir sus efectos, y situar Catalu?a a las puertas de un Estado propio¡±. Las intenciones del presidente de la Generalitat van acompa?adas de muchas medidas concretas (hasta 45 leyes prev¨¦ aprobar el Ejecutivo) pero pocas destinadas a su principal objetivo: revertir los recortes. La Generalitat presentar¨¢ en mayo sus cuentas para los que deber¨¢ hacer un encaje de bolillos: el reto es evitar el tijeretazo y convencer a la Candidatura d'Unitat Popular (CUP) de que en las circunstancias actuales no hay otra pol¨ªtica econ¨®mica posible.

El presidente se esforz¨® en vender su plan de Gobierno como la receta necesaria para combinar los dos objetivos: priorizar las pol¨ªticas sociales y trabajar para la independencia. Para lograrlo, plante¨® una bater¨ªa de medidas (hasta 750, seg¨²n el documento presentado) que afectan a todos los departamentos: incluye desde propuestas incluidas en el plan de choque como el paro de los desahucios o la renta garantizada hasta las estructuras de Estado. Todo, supeditado a un solo gesto: el voto de la CUP a unos Presupuestos que, de momento, son una inc¨®gnita. La Generalitat promete revertir los recortes pero para recuperar los dos puntos de d¨¦ficit que le exige el Gobierno debe hacer ajustes adicionales por valor de 3.400 millones de euros.

La CUP comparte el objetivo de aumentar el gasto social y trabajar para la secesi¨®n, pero en la concreci¨®n de c¨®mo se consiguen es donde se enmara?an Junts pel S¨ª y los anticapitalistas. Puigdemont avis¨® la CUP de que sin cuentas el plan de Gobierno quedar¨¢ seriamente mermado: ¡°La herramienta de los Presupuestos es la muleta indispensable para que todo vaya con turbo y no al ralent¨ª. El veh¨ªculo es el Gobierno y un plan ambicioso y los Presupuestos la gasolina¡±, ilustr¨® Puigdemont.

Pese a las turbulencias que los socios parlamentarios han vivido desde que pactaron, Puigdemont ve el vaso medio lleno: ¡°Soy de los optimistas, de los que cree en las bondades del acuerdo de estabilidad¡±. El presidente se remiti¨® al pleno sobre la pobreza (donde la CUP y Junts pel S¨ª acordaron, no sin empe?o, varias resoluciones) para argumentar que lograr¨¢ su objetivo: ¡°Debemos hacer esfuerzos, nosotros no pedimos ning¨²n cheque en blanco a la CUP¡±. El plan de Puigdemont y de su vicepresidente, Oriol Junqueras, pasa por presentar las cuentas en mayo y tenerlas a punto en julio. ¡°Hay inter¨¦s por las dos partes de trabajar a fondo las cuentas¡±, apunt¨® el dirigente.

La CUP celebr¨® las propuestas de Puigdemont al considerar que responden a las demandas de la mayor¨ªa independentista del Parlament, pero le lanz¨® un aviso: ¡°Si el Gobierno se compromete a hacer unos Presupuestos que reviertan los recortes, decimos que de acuerdo pero que implicar¨¢ desobedecer en el marco del Estado¡±, advirti¨® el diputado Albert Botran, en alusi¨®n a las exigencias del Ministerio de Hacienda.

Solo Catalunya S¨ª que Es Pot dio el beneficio de la duda al plan presentado por Puigdemont. El portavoz de la confluencia de izquierdas, Llu¨ªs Rabell, confi¨® en que el presidente ¡°demuestre¡± en las cuentas el compromiso social que promete. A la espera, Rabell celebr¨® ¡°el giro en la ret¨®rica y el discurso¡± de Puigdemont con relaci¨®n a su antecesor, Artur Mas. Eva Granados, del PSC, opin¨® lo contrario: asegur¨® que el Ejecutivo actual representa ¡°la continuidad¡± del de Mas y por ello, concluy¨®, el plan ¡°no es cre¨ªble¡±. Los m¨¢s duros fueron PP y Ciudadanos. Fernando de P¨¢ramo, portavoz de la formaci¨®n naranja, tild¨® la acci¨®n del Ejecutivo de ¡°cien d¨ªas perdidos por el desgobierno¡±. Enric Millo, del PP, asever¨® que Puigdemont utiliza ¡°el sufrimiento de la gente¡± para el independentismo.