La Fiscal¨ªa pide hasta 17 a?os para una mafia de carceleros y polic¨ªas

La Audiencia de Barcelona juzg¨® una presunta trama corrupta de funcionarios de prisiones, polic¨ªas y delincuentes comunes el pasado 26 de abril. La Secci¨®n Octava dirimi¨® dos incidentes distintos, con algunos protagonistas en com¨²n: el intento de introducir un paquete de hach¨ªs en la prisi¨®n de Brians, para perjudicar a un preso; y, a la vez, de manera paralela, el secuestro fallido de dos presuntos ladrones, por petici¨®n de sus v¨ªctimas, que buscaban escarmentarles con sus propios m¨¦todos. Dos polic¨ªas locales de Badalona se enfrentan a 16 a?os de c¨¢rcel; dos funcionaros de prisiones, a cinco, y los otros cuatro acusados deber¨¢n responder a la petici¨®n de hasta 17 a?os. El caso qued¨® visto para sentencia el jueves.

Ocurri¨® hace seis a?os, en 2010. Entonces los Mossos d¡¯Esquadra detuvieron a Manuel B., Alfonso C., Jos¨¦ Ram¨®n F. y Clemente P. por intentar introducir hach¨ªs en la celda de un preso, Alcides Gerardo G. La intenci¨®n, seg¨²n el escrito de la Fiscal¨ªa al que ha tenido acceso EL PA?S, era evitar que el interno continuase gozando de los permisos de tercer grado que ten¨ªa. O incluso que fuese acusado de tr¨¢fico de drogas.

Seg¨²n el ministerio p¨²blico, Manuel B. es el que buscaba complicarle la vida al interno, con el que supuestamente ten¨ªa asuntos pendientes. Su objetivo era que la ¡°sustancia fuera encontrada en uno de los registros que se efect¨²an en prisi¨®n¡±, sostiene la fiscal S¨°nia Canal. Para conseguirlo, Manuel B. acudi¨® primero a un exfuncionario de prisiones, Alfonso C., que a su vez recurri¨® a dos funcionarios que estaban en activo en aquella ¨¦poca: Clemente P., y el que fuese miembro del sindicato CSIF, Jos¨¦ Ram¨®n F.

Los tres mantuvieron varias reuniones, en las que hablaban en clave del ¡°libro¡±, en referencia a la droga. Finalmente, Jos¨¦ Ram¨®n F. ¡°contact¨® en varias ocasiones con el acusado Alfonso C. y le inform¨® de que la sustancia estupefaciente, el libro, se hallaba dentro del centro penitenciario¡±, seg¨²n la fiscal. Aunque la droga nunca se encontr¨®.

Ese mismo a?o, investigadores de los Mossos supieron de la intenci¨®n de dos hermanos, Juan Antonio F. y Torcuato F., de dar con los hombres que sospechaban que hab¨ªan robado en casa de un ellos, en Gav¨¤. El contacto era de nuevo Manuel B. A cambio de 1.500 euros, le pidieron que diese con Jorge Elicer R., alias el Alem¨¢n o el Gordo, y Erik Felipe V., alias Dayron, que les secuestren y que se los dejen a ellos para que les puedan dar su merecido por haberles robado y haber herido a la mujer de uno de ellos.

Para conseguir los datos de los dos sospechosos, Manuel B., junto con Alfonso C., contact¨® presuntamente con dos polic¨ªas de la Guardia Urbana de Badalona, Javier S. y Jaime G. A cambio de 500 euros, estos ¡°efectuaron m¨²ltiples gestiones, entre ellas, entraron en el Sistema de Identificaci¨®n Policial y el resto de registros policiales para consultar m¨²ltiples datos de car¨¢cter personal como sus domicilios, veh¨ªculos, personas con las que se relacionaban y antecedentes policiales¡±, recoge la Fiscal¨ªa. El objetivo era ¡°identificar y localizar a los dos individuos, y sacaron fichas policiales con sus fotograf¨ªas¡± para que les pudiesen reconocer.

Los acusados encontraron a una de las dos personas a las que buscaban, lo que llev¨® a la polic¨ªa catalana a precipitar la operaci¨®n para evitar que la cosa fuese a m¨¢s. Fue el 10 de noviembre de 2010. En el domicilio de uno de los acusados, los Mossos encontraron informes y datos de los dos objetivos.

Adem¨¢s, coincide que uno de los dos polic¨ªas de Badalona estaba casado con una prima del exalcalde socialista de Santa Coloma de Gramenet, Bartomeu Mu?oz, que se vio salpicado por el caso Pretoria, de corrupci¨®n urban¨ªstica.