Disc¨²lpenle por no hacer gracia
El director Rick Alverson presenta en La Casa Encendida sus dos ¨²ltimos trabajos, The comedy¡¯ y ¡®Entertainment¡¯, dos comedias que no hacen re¨ªr
Rick Alverson (Virginia, 1971) tiene un talento especial para molestar a la gente. A veces, porque no se entienden sus pel¨ªculas. A veces, porque se entienden demasiado. Este fin de semana presentar¨¢ en La Casa Encendida sus dos ¨²ltimos trabajos, The comedy (2012) y Entertainment (2015). La primera es una obra totalmente desestructurada alrededor de las vidas totalmente desconectadas de la realidad de unos hipsters algo mayores. La segunda es su trabajo formalmente m¨¢s elaborado. Se trata de seguir los pasos de Neil Hamburguer, personaje creado por el c¨®mico Gregg Turkington. Es, como todas las cintas de Alverson, una comedia que no hace gracia. O que hace gracia solo a quienes se esfuerzan un poco por re¨ªrse, contradiciendo aquello que dice que la risa es algo que, cuando se fuerza, no es risa, sino todo lo contrario.
Y por eso est¨¢ casi garantizado que suceda lo que admite que le pasa cuando acude a eventos en los que humanos visionan, en presencia de su creador, sus filmes: "Seguro que alguien se me acerca luego y me dice que debo pedir disculpas al p¨²blico".
El cineasta busca una reacci¨®n en sus audiencias m¨¢s f¨ªsica que intelectual. ¡°Creo que las pel¨ªculas fracasan cuando solo buscan conectar con el intelecto del p¨²blico¡±, afirma v¨ªa correo electr¨®nico. ¡°Preferimos que solo nos afecte lo que tiene relaci¨®n con nosotros mismos cuando vemos que somos vulnerables. Eso mismo nos sucede al ver una pel¨ªcula. Nuestra mente se mete por en medio con el fin de buscar formas m¨¢s gratificantes de gozar de la experiencia, de hacerla m¨¢s comprensible, entretenida y c¨®moda. Pero el mundo y la vida no funcionan as¨ª. Esa metodolog¨ªa es tramposa, ego¨ªsta y narcisista¡±.
As¨ª pues, el reto del cineasta es llegar al est¨®mago del espectador y hacerlo evitando en la medida de lo posible tener que pasar antes por su cerebro. Esto, dice Alverson, es mucho m¨¢s complicado en el cine que en la m¨²sica. Y lo dice con conocimiento de causa, pues lidera una banda llamada Spokane. En la web de su discogr¨¢fica, la independiente Jagjaguwar, se define al grupo como un intento por ¡°objetar la adicci¨®n que tiene por lo r¨¢pido, ruidoso y ostentoso¡±.
Alverson tambi¨¦n ha dirigido videoclips para artistas como Angel Olsen o Sharon Van Etten y en The comedy cont¨® con James Murphy (LCD Soubndystem) entre el elenco de actores. ¡°Si pens¨¢is que el negocio de la m¨²sica es bobo, probad a meteros en el del cine¡±, declar¨® m¨¢s tarde el m¨²sico.
Parte del ciclo ¡®Juas!¡¯
"El sonido sin imagen, o solo con la imagen que proyecta nuestra imaginaci¨®n, es una experiencia f¨ªsica mucho m¨¢s inmediata. Las pel¨ªculas vienen lastradas por unas normas gramaticales y narrativas que limitan la experiencia del espectador. La m¨²sica apela al recuerdo, y este siempre pone en marcha el cuerpo", afirma Alverson.
El ciclo en que se enmarca la programaci¨®n de las dos pel¨ªculas del de Richmond se titula Juas! y est¨¢ celebr¨¢ndose durante los fines de semana de este mes de mayo. Tanto con estas pel¨ªculas como con las del resto del certamen parece pretenderse ahondar en un terreno poco trabajado, al menos cuando hablamos de humor: la contemporaneidad. Sabemos sobre c¨®mo var¨ªa lo que hace gracia seg¨²n en qu¨¦ territorio se est¨¦ y tambi¨¦n sabemos que el m¨¦todo de actualizar la risa es moverla a rebufo de los acontecimientos. Pero existe un humor que se mueve con las realidades de las personas y no con las de los peri¨®dicos, que ayer no se hubiese entendido y que ma?ana igual parece rid¨ªculo, pero que hoy dice mucho m¨¢s de nosotros que cualquier otro. Esa es la comedia que factura Alverson. "El humor de hoy nos devuelve al cinismo", apostilla el director. "Somos esa gente c¨ªnica que vive en el primer mundo. Lo hemos visto todo. El humor se ha convertido en un deseo por ver c¨®mo colisionan lo habitual y lo absurdo. Dice mucho sobre la cultura del momento y se convierte en la mejor forma de librarse de una cultura que no hace m¨¢s que limitarnos. Dicho esto, debo admitir que no tengo ni idea de qu¨¦ es eso del humor".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.