La instrucci¨®n del doble parricidio de Mora?a finaliza sin aclarar el m¨®vil
Los expertos ignoran qu¨¦ desencaden¨® el brutal ataque de David Oubel a sus dos hijas y apuntan al perfil ¡°psic¨®pata¡± del homicida
Despu¨¦s de diez meses de preservar la investigaci¨®n sobre el brutal parricidio de dos hermanas menores de Mora?a (Pontevedra) hace casi un a?o, la juez de Caldas de Reis (Pontevedra) acord¨® el pasado lunes levantar el secreto de las diligencias tras recibir el informe definitivo de las autopsias de las peque?as de 9 y 4 a?os que supuestamente fueron asesinadas con una radial por su padre, Davil Oubel, de 41. A punto de encajar las ¨²ltimas piezas policiales y cient¨ªficas con la comparecencia de un ¨²ltimo testigo clave en el caso, la instrucci¨®n se cierra sin que los investigadores hayan encontrado un m¨®vil o posible desencadenante que explique la brutalidad empleada en ambos asesinatos.
Ni siquiera encaja la hip¨®tesis de un posible caso de violencia de g¨¦nero proyectado en las ni?as para provocar el dolor de su madre. ¡°Desde un punto de vista psicol¨®gico y humano es inexplicable, obra de un s¨¢dico, y no parece claro que hubiese intenci¨®n de venganza hac¨ªa su expareja porque no hab¨ªa una conflictividad seria entre ambos progenitores¡±, explican desde la Fiscal¨ªa de Pontevedra.
Confinado en la prisi¨®n de Mansila de Las Mulas (Le¨®n), una de las de m¨¢xima seguridad, la juez comunic¨® esta semana al presunto parricida los hechos que se le imputan a trav¨¦s de videoconferencia, cumpliendo as¨ª uno de los tr¨¢mites procesales de la instrucci¨®n del caso que ser¨¢ resuelto por un jurado popular.
En la misma l¨ªnea que en comparecencias anteriores, David Oubel recibi¨® la lectura de los cargos que se le imputan sin inmutarse ni pronunciar ninguna palabra o exclamaci¨®n. En estos meses nunca ha querido declarar ni ha mostrado alguna intenci¨®n de hacerlo. Lo defiende un abogado de oficio y no recibe visitas de sus familiares.
De su perfil psicol¨®gico, los expertos extraen alguna de las caracter¨ªsticas que definen la personalidad del empresario inmobiliario y presunto parricida que podr¨ªan ayudar a descifrar los interrogantes en torno a los cr¨ªmenes de sus hijas: ¡°Fr¨ªo y sin empat¨ªa, no es un loco, es un psic¨®pata con una percepci¨®n diferente de lo que ha pasado y con af¨¢n de notoriedad¡±, concluyen.
A mediod¨ªa del 31 de julio de 2015, David Oubel, separado de su mujer con la que compart¨ªa la custodia de sus hijas, pon¨ªa fin tr¨¢gicamente a los 15 d¨ªas de vacaciones que las peque?as hab¨ªan pasado con ¨¦l en la casa de Mora?a, donde los cuatro hab¨ªan vivido. Empleando una sierra rebarbadora que hab¨ªa comprado horas antes en una ferreter¨ªa, el filicida comunic¨® sus cr¨ªmenes a su mujer y su suicidio; en realidad unos peque?os cortes en las mu?ecas.
El fiscal del caso, Alejandro Pazos, tiene previsto redactar el escrito de acusaci¨®n en julio, una vez cerrada la instrucci¨®n, para despu¨¦s iniciar el proceso de elecci¨®n de los miembros del jurado que llevar¨¢ unos meses m¨¢s, por lo que las previsiones de la instructora es que David Oubel sea juzgado a principios del a?o pr¨®ximo.
La conclusi¨®n del sumario se ha retrasado varios meses por las dificultades derivadas del cotejo y cat¨¢logo de hallazgos y pruebas en el escenario del crimen y su cadena de custodia, lo que exigi¨® una mayor coordinaci¨®n para su an¨¢lisis entre los expertos de la polic¨ªa cient¨ªfica y forense que han intervenido.
Adem¨¢s del testimonio de dos peritos y cinco testigos (ahora uno m¨¢s a propuesta del fiscal), la instrucci¨®n concluir¨¢ con el an¨¢lisis del atestado definitivo de la Polic¨ªa Judicial de la Guardia Civil, del Instituto de Medicina Legal de Galicia, el de Antropolog¨ªa Forense y el de Toxicolog¨ªa. Este ¨²ltimo verifica si las ni?as ingirieron alguna sustancia antes de morir o si su padre actu¨® bajo los efectos de alguna droga. ¡°Hay elementos que no concuerdan entre fallecidas y homicida, y ahora hay que verificar las pruebas que lo relacionen con el ataque¡±, a?aden fuentes de la fiscal¨ªa.
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