Ramon Casas, ir¨®nico y cr¨ªtico
El MNAC expone 11 sombras chinas creadas para Els Quatre Gats
Cuando el dentista Josep Meifr¨¦n, hermano del pintor Eliseu, se instal¨® en casa de su sobrina Carolina, llevaba, entre sus pertenencias, una peque?a caja que conten¨ªan unas figurillas articuladas de cartulina y alambre. Un tesoro que conservaba desde que las hab¨ªa creado, junto a Ramon Casas, para hacer representaciones durante las veladas en el templo del modernismo catal¨¢n: el caf¨¦ Els Quatre Gats. Al fallecer Meifr¨¦n, las figurillas que representan a personajes de la ¨¦poca como ?ngel Guimer¨¤, Miquel Utrillo, Pompeu Gener, Pere Romeu o el propio Casas, pasaron a su sobrina y de esta a su hijo Pere Jim¨¦nez-Meifr¨¦n que las ha tenido presidiendo el sal¨®n de su casa hasta hace poco. Ahora, y por diez a?os, estas figurillas ¨²nicas han sido depositadas en el Museo Nacional de Arte de Catalu?a (MNAC). ¡°Es el mejor sitio donde pueden estar, junto a otras obras de Casas¡±, explic¨® el donante ayer durante la inauguraci¨®n de la exposici¨®n Ramon Casas y las sombras chinas de Els Quatre Gats,la aportaci¨®n del museo al A?o Casas que conmemora los 150 a?os de su nacimiento y que descubre, a partir de las sombras chinas y otras 43 obras, la vertiente m¨¢s bohemia e ir¨®nica de este artista.
Las figurillas son la ¨²nica representaci¨®n de una larga tradici¨®n de diversi¨®n popular de la Barcelona del siglo XIX, tal y como demuestran estampas y carteles en los que se anunciaban los espect¨¢culos programados por el grupo en el caf¨¦ que cre¨® Pere Romeu a semejanza de los de Par¨ªs. La exposici¨®n, montada en la sala donde se muestran dos de las ic¨®nicas obras de Casas: Ramon Casas i Pere Romeu en un t¨¤ndem (1897) y Ramon Casas i Pere Romeu en un autom¨°bil (1901), en el que el pintor aparece con dos protagonistas de la vida bohemia de la Barcelona modernista, permite descubrir (mediante un boceto casi in¨¦dito) que el t¨¢ndem fue mutilado por sus lados m¨¢s de un metro por Plandiura para poder exponerlo en su casa. Junto a estas pinturas, posters, ¨¢lbumes y programas de mano donde se anunciaban las sombras chinescas o francesas y espect¨¢culos de polichinelas en Els Quatre Gats y en otras salas similares de Par¨ªs y Londres, dando a entender lo generalizado que estaba las sombras.
La muestra, comisariada por Francesc Qu¨ªlez, reivindica la personalidad contradictoria del pintor, frente al convencionalismo que se ha remarcado a partir de sus obras ic¨®nicas y elitista para la burgues¨ªa, al presentar obras de un arte menor. ¡°Pone en valor y contextualiza un conjunto in¨¦dito del fondo del museo a la vez que reivindica a un Casas bohemio que buscaba la recuperaci¨®n de las tradiciones populares; una visi¨®n que descubre su versatilidad casi renacentista, adem¨¢s de su iron¨ªa y sentido del humor¡±, remarca el comisario.
Seg¨²n Qu¨ªlez, las sombras chinas influyeron tambi¨¦n en el repertorio y aportaron soluciones y efectos visuales en las producciones gr¨¢ficas de comienzos del siglo XX, como la obra m¨¢s emblem¨¢tica y reproducida de esta tipolog¨ªa: El cartel de Steinlen, Tourn¨¦e du Chat Noir (1896), el famoso gato negro de enigm¨¢tica y mal¨¦fica sombra que puede verse en la muestra.
En cuanto al sentido de estas figuras, no existe documentaci¨®n, pero Qu¨ªlez cree que Casas y Meifr¨¦n las crearan para representar peque?as obras para perpetuar la memoria de algunos de los personajes que se reun¨ªan en el caf¨¦. ¡°La llegada del cine acab¨® con las sombras¡±, explic¨®.
Jim¨¦nez-Meifr¨¦n decidi¨® donar las figurillas tras comprobar en una exposici¨®n sobre Casas que se hablaba de las sombras chinas pero que no se conoc¨ªa que hab¨ªan sobrevivido. ¡°Como no puedo vivir sin ellas solo pido a los responsables del MNAC que hagan una reproducci¨®n para volverlas a poner en casa¡±, remach¨®.
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