Una trinchera sit¨²a la batalla de Madrid a un kil¨®metro de donde se cre¨ªa

¡°Este es el mejor lugar para estudiar la guerra¡±, explica Alfredo Gonz¨¢lez Ruibal, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) y experto en la Guerra Civil espa?ola, mientras se?ala la zanja en zigzag que ha excavado su equipo en la Ciudad Universitaria. En esos fosos, abiertos en la tierra y que todav¨ªa se adivinan entre los matojos, los soldados luchaban y viv¨ªan, de tal forma que es donde m¨¢s restos se encuentran, desde armamento a medallas de la Virgen o de San Antonio de Padua.

El estudio de la munici¨®n localizada en un alto situado en la parte superior de la trinchera excavada a espaldas de la facultad de Psicolog¨ªa de la UNED, ha permitido a los arque¨®logos acreditar un ataque franquista hacia el interior de Madrid del que no se ten¨ªa noticia. ¡°Hemos documentado una penetraci¨®n de los legionarios al interior de Madrid, hacia el barrio de Tetu¨¢n, en noviembre de 1936¡±, aclara el investigador.

Ese descubrimiento les permite situar la batalla de Madrid, de 19 noviembre de 1936, a m¨¢s de un kil¨®metro de la zona donde se cre¨ªa que el Gobierno de la Rep¨²blica hab¨ªa parado a los nacionales. Un hallazgo ¡°verdaderamente importante¡±, se?ala Gonz¨¢lez Ruibal. La Ciudad Universitaria conserva entre cinco y seis kil¨®metros de trincheras, que se comunicaban con el barrio de Tetu¨¢n y con la primera l¨ªnea republicana en la ribera del Manzanares.

El equipo arqueol¨®gico ha llegado a esta conclusi¨®n por el tipo de armamento localizado en la zona. ¡°A los brigadistas internacionales se les pertrech¨® con lo primero que lleg¨® de la Uni¨®n Sovi¨¦tica, fusiles brit¨¢nicos y armas del siglo XIX. Material obsoleto¡±, explica el responsable de la excavaci¨®n.

Su munici¨®n es muy reconocible: incluso se han localizado balas de 1870. Gonz¨¢lez Ruibal concreta: ¡°Cuando encontramos ese tipo de balas, adem¨¢s de restos de mortero o granadas, sabemos en qu¨¦ momento nos encontramos de la Guerra¡±. En este caso, la lucha se desarroll¨® entre legionarios y brigadistas polacos.

En su opini¨®n, este hallazgo ¡°cambia un poco la historia¡±, porque se pensaba que se hab¨ªa parado el ataque sublevado en el r¨ªo Manzanares, en la zona del puente de San Fernando, al sur de Puerta de Hierro. Una circunstancia que demostrar¨ªa que esa zona de la ciudad pudo haber pasado a manos de los sublevados. Adem¨¢s, permite mover el foco de atenci¨®n de lugares ic¨®nicos como la Facultad de Medicina o el Hospital Cl¨ªnico, donde todav¨ªa se pueden observar impactos de proyectiles.

La trinchera localizada en la Casa de Campo tambi¨¦n ha aportado informaci¨®n fundamental sobre la lucha que se desarroll¨® en ese punto, a dos pasos de las ruinas de la Casa de Vacas. ¡°Su estado era muy bueno, debido a que los franquistas no la reutilizaron, porque una vez tomada continuaron el avance¡±, explica el experto. Los arque¨®logos han descubierto en ese lugar una zanja de unos 40 metros, en la que los brigadistas alemanes lucharon durante unas dos semanas. ¡°En otros puntos del parque aguantaron unos escasos dos d¨ªas¡±, puntualiza Gonz¨¢lez Ruibal. Los datos de los que se dispon¨ªa hasta este momento apuntaban a que la mayor parte del combate se centraliz¨® en la zona del Lago y del Puente de los Franceses.

Granadas artesanales

Entre los hallazgos m¨¢s interesantes en este punto se encuentran varias granadas artesanales, algunas sin explotar. Los soldados las fabricaban a mano, debido a la escasez de armas que hab¨ªa en la Rep¨²blica cuando los franquistas estaban a punto de llegar a las puertas de Madrid. ¡°Se hab¨ªan quedado sin suministro de granadas y las fabricaban como pod¨ªan¡±, relata el investigador.

Para ello reutilizaban los tubos de calefacci¨®n de los trenes, cort¨¢ndolos en trozos e introduciendo un relleno de p¨®lvora con una mecha. Y as¨ª las han localizado, algunas sin explotar. Tambi¨¦n ha aparecido un proyectil de artiller¨ªa de 12 kilos intacto, ¡°de los que hac¨ªan da?o¡±, describe Gonz¨¢lez. La Guardia Civil se ha hecho cargo de ¨¦l. Estos restos han permitido documentar varios ataques contra esta trinchera.

El objetivo de la investigaci¨®n es entender la guerra en toda la regi¨®n, de forma global, no solo en el frente de la Ciudad Universitaria. Para lograrlo, los arque¨®logos esperan poder ampliar el proyecto a cinco a?os y cubrir el periodo que va desde 1936 a finales de los cuarenta. Gonz¨¢lez Ruibal explica que siempre ha estado interesado en la arqueolog¨ªa contempor¨¢nea y ha tratado de ¡°estudiar temas que nos tocan a todos, que son emocionantes y que tienen que ver con el presente, aunque hayan pasado hace 80 a?os¡±.