Cuando el cantante es un espect¨¢culo

Toca imaginar. Esta vez, un cruce entre Matt Lucas, uno de los actores de la serie Little Britain, y Juli¨¢n Hern¨¢ndez, de Siniestro Total. Si al resultado le a?adimos chorros de Ottis Redding y toneladas de soul cl¨¢sico obtendremos como resultado a Paul Janeway, un vocalista cuya mera presencia en el escenario bien merece pagar el precio de una entrada. Hora y media de diversi¨®n y m¨²sica cl¨¢sica interpretada por uno de los mejores cantantes por lo que toca a expresar las canciones con el cuerpo y la expresi¨®n facial. Hora y media de soul con algunos apuntes de funk, con baladas para licuarse y piezas para dejarse la suela en la pista. Quien asisti¨® al concierto lo recordar¨¢: puro entretenimiento.

Hay que imaginar a Janeway, un gordito con aire libidinoso capaz de remojarse los labios con la lengua mientras canta, de limpiarse la comisura de la boca con la mano entre estrofa y estrofa, como queri¨¦ndose quitar la saliva, de armar expresi¨®n de asesino en serie antes de cometer una atrocidad. Con una mirada perdida de expresi¨®n extrema, como si fuera capaz tambi¨¦n de soltar un zapato, a todo esto engarzado con brillantes de bisuter¨ªa, para seguir cantando sobre un calcet¨ªn y con la capacidad de escenificar cada acorde, cada par¨®n, cada cambio de ritmo con su cuerpo y sus manos. Bien en pie, bien revolc¨¢ndose por el suelo. Era dif¨ªcil mirar al resto de la banda, siete m¨²sicos, porque ¨¦l era el espect¨¢culo, un cuerpo que cantaba. Pero, adem¨¢s, su voz nasal con tendencia al agudo, todo y no resultar vers¨¢til, demostraba que no s¨®lo hab¨ªa un mero gesticulador en escena. Un grito de soul en el cuerpo imaginado de Ner¨®n antes de Peter Ustinov.

?Qu¨¦ tocaron? Pues es casi igual porque todo acababa sonando a Janeway, incluso el Van Morrioson de I¡¯ve been walking o el Tom Waits de Make It Rain, dos de las versiones que interpretaron junto al I Want You¡±, de Beatles. Luego, repertorio propio con tomas m¨¢s lentas de la gran Don¡¯t Mean A Thing, baladas como Waves o Broken Bones & Pocket Change o soul bailable de toda la vida, tan presente en su repertorio. Pero lo dicho, desde Alabama lleg¨® un cantante con aspecto de no haber tenido novia en su vida y de vivir todav¨ªa con mam¨¢, pero que en el escenario se lo come todo y a todos. Tanto, que hasta pareci¨® sorprenderse de lo loco que se estaba volviendo el p¨²blico. Se lo llev¨®, merecidamente, puesto.