Adivina quien viene esta noche

Miriam abre la puerta de su casa de Alcorc¨®n con una sonrisa. Esta noche ella es la anfitriona. En el sal¨®n ya hay dos personas a las que acaba de conocer en persona; una madre y su hija. Vienen de Estados Unidos, de Boston, a pasar unos d¨ªas en Madrid. ¡°Es la primera vez que hacemos esto de cenar en una casa de alguien que no conocemos personalmente¡±, dice una de ellas. En Madrid, al igual que otras grandes ciudades del mundo, ahora es posible ir a cenar a casa de un desconocido. O preparar una cena para recibir a personas que uno no conoce de nada gracias a plataformas como EatWith, MealSharing, o VizEat.

La idea de las cenas compartidas tiene su origen en el concepto de consumo colaborativo que se populariz¨® en 2010, cuando Rachel Botsman hiciera conocido el termino en un libro que titul¨®: What it?s mine it?s yours: the rise of collaborative consumption (Lo que es m¨ªo es tuyo: el auge del consumo colaborativo). En el libro, la autora inglesa manifestaba que la confianza se convertir¨ªa en la nueva moneda de cambio. Airbnb es, quiz¨¢, el ejemplo m¨¢s conocido, pero hay otras aplicaciones.

¡°Ahora, la ciudad con m¨¢s movimiento en Espa?a es Barcelona. Lo que queremos es potenciar Madrid para que los madrile?os sepan que hay nuevas formas de salir a cenar y conocer gente¡±, dice Leire Laboreo de EatWith Espa?a. ¡°Hay cenas en las que a veces puedes encontrarte con gente que visita la ciudad, pero en otras ciudades, como Barcelona, hay muchas cenas en las que coinciden gente que vive en la ciudad y quiere experiencias nuevas¡±.

Suena de nuevo el timbre de Miriam; llegan m¨¢s invitados. En este caso se trata de Brian, su esposa Pam y sus dos hijas universitarias. Son de Florida y tambi¨¦n visitan la capital. En su perfil de bienvenida, Miriam se ha presentado a s¨ª misma como una persona que le encanta cocinar: ¡°De peque?a siempre ayudaba a mi madre en la cocina y ella me ense?¨® la importancia de preparar todos los componentes de los platos tradicionales desde el principio. Todo hecho en casa¡±.

Luego de abrir una botella de vino y probar los aperitivos (chorizo, queso y jam¨®n) Miriam hace una peque?a introducci¨®n al men¨² de la noche y que los invitados ayudar¨¢n a cocinar. En este caso se trata de una paella t¨ªpica con fumet, calamares, costillas de cerdo y pollo. En las plataformas web, los anfitriones cuelgan el men¨² con todo lo que probar¨¢n esa noche. ¡°Tratamos de que haya un m¨ªnimo de calidad¡±, cuenta Laboreo, que tambi¨¦n se encarga de visitar las casas y cerciorarse de que todo funcione adecuadamente. ¡°Siempre hacemos una cena de prueba a ver si da la talla¡±, a?ade.

Miriam llama a sus invitados a la cocina. ¡°Vamos a prepararlo todo desde el principio¡±, dice antes de repartir tareas culinarias: desde cortar verduras, hasta pelar gambas. Cada paso se explica con detenimiento para que los invitados puedan repetirlo en casa. En la cocina las conversaciones van y vienen, pero el hilo conductor es la paella. Tras algunas copas de vino, llega lo m¨¢s esperado de la noche: probar la cena. Adem¨¢s del arroz, acompa?a ensalada y gambas al ajillo. De postre, natillas. ¡°Lo interesante es el factor sorpresa y el contacto humano¡±, cuentan los invitados, ¡°nunca sabes con qu¨¦, ni con qui¨¦n te vas a encontrar¡±.