La ajetreada vida de ¡®Dumba¡¯
Animalistas denuncian las malas condiciones en las que vive una elefanta en Caldes de Montbui, algo que sus cuidadores niegan
Una campa?a lanzada por la Fundaci¨®n para el Asesoramiento y Acci¨®n en Defensa de los Animales (Faada) denuncia las ¡°p¨¦simas condiciones¡± en las que vive una elefanta en una finca de Caldes de Montbui (Vall¨¦s Oriental), algo que es rechazado por los cuidadores del animal. Estos aseguran que?Dumba?cuenta con espacio m¨¢s que suficiente y que disfruta de todos los cuidados que requiere.?
¡°Somos muy afortunados por compartir nuestra vida con Dumba¡±, expresa la brit¨¢nica Yvonne Kludsky, con quien la elefanta asi¨¢tica de 38 a?os vive y trabaja desde hace tres d¨¦cadas. La elefanta es una de las protagonistas del espect¨¢culo La Familia Kludsky, que los due?os del animal ofrecen a pel¨ªculas, anuncios y otros eventos. La cuidadora y adiestradora asegura que ¡°Dumba disfruta de una vida completa y gracias a su trabajo descubre lugares diferentes, lo que es importante porque fomenta su estimulaci¨®n¡±.?
Kludsky, que se ha criado entre animales, desciende de una familia vinculada al mundo del circo y define su relaci¨®n con Dumba como ¡°cercana, familiar y cari?osa¡±. Seg¨²n su cuidadora, la elefanta cuenta con los mismos veterinarios ¨Cuna experta en animales ex¨®ticos- desde 1982 para supervisar su salud y Dumba dispone de las necesidades que requiere un animal de estas caracter¨ªsticas: ¡°La convivencia con animales es preciosa y muy interesante, pero es un trabajo muy sacrificado donde la rutina es esencial para ellos¡±.
Sin embargo, la Faada ha denunciado las ¡°p¨¦simas condiciones¡± en las que se encuentra la elefanta, seg¨²n han indicado en un comunicado de su p¨¢gina web, en la que se?ala que el animal apenas dispone de 100 metros cuadrados. Seg¨²n el comunicado, Faada notifico el caso en 2010 a la Generalitat, que orden¨® una inspecci¨®n. En 2014, se inst¨® a la pareja a cumplir una serie de medidas correctoras y recomendaciones para el bienestar de Dumba.
Kludsky replica que el recinto en el que vive el animal es de 550 m2 y que la elefanta dispone de un terreno mucho mayor (7.741 metros cuadrados llenos de ¨¢rboles y vegetaci¨®n) por el que puede caminar cuando la acompa?an sus cuidadores. Kludsky y su marido George se ocupan de la alimentaci¨®n, higiene y cuidados puntuales de Dumba, as¨ª como de la pedicura o el mantenimiento de la piel.
¡°Tienen derecho a dar su opini¨®n, pero deber¨ªan informarse mejor¡±, lamenta Kludsky sobre la actuaci¨®n de Faada, que inici¨® una campa?a de recogida de firmas en Change.org al considerar que ¡°no se hab¨ªan producido cambios¡± en el recinto.
Fuentes de la Generalitat explican que "tener una elefanta no es ilegal por s¨ª mismo¡±. Actualmente, desde el Servicio de Biodiversidad y Protecci¨®n de los animales del Departamento de Territorio y Sostenibilidad est¨¢n pendientes de comprobar si se han aplicado los requerimientos obligatorios en cuanto a seguridad, que incluyen la colocaci¨®n de carteles de "Animal peligroso" y una valla de 2,40 metros de altura. ¡°Ya pusimos una valla exterior que rodea la finca y los carteles, pero estamos en proceso de a?adir la nueva valla¡±, se?ala Kludsky, adem¨¢s de puntualizar que tienen todos los permisos necesarios para tener a Dumba.
Faada denuncia en su comunicado que?Dumba ¡°se pasa m¨¢s de la mitad del a?o trabajando de circo en circo por toda Europa¡± y que ¡°est¨¢ obligada a entrenar frecuentemente con su propietaria¡±, lo que le habr¨ªa provocado una notable p¨¦rdida de peso. Kludsky niega las acusaciones y atribuye la p¨¦rdida de peso a una infecci¨®n.?
Kludsky reconoce que la presi¨®n de las entidades animalistas ha aportado beneficios para los animales en los ¨²ltimos a?os, pero opina que ¡°hoy en d¨ªa se ha perdido el sentido com¨²n¡±. En este aspecto, considera que ¡°la gente est¨¢ m¨¢s concienciada y eso es bueno, pero m¨¢s que prohibir los animales en el circo, lo que se deber¨ªa hacer es mejorar la regulaci¨®n¡±. ¡°Cuando ven¨ªan algunos ni?os a verla, les hac¨ªa un peque?o cursillo did¨¢ctico sobre los elefantes, siempre sin ¨¢nimo de lucro, para ense?ar que hay que amar, cuidar y respetar a los animales, ya que en sus pa¨ªses de origen tienen problemas grav¨ªsimos, como el elefante africano con el marfil¡±, explica.
Mientras, Dumba se lleva a la boca algunas hierbas con su trompa. ¡°Un elefante feliz siempre tiene que estar movi¨¦ndose, si est¨¢ quieto es que algo le pasa, y ella est¨¢ siempre en movimiento¡±, agrega Kludsky. ¡°Es como una hija¡±, concluye su marido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.