La financiaci¨®n valenciana: ?Qu¨¦ damos y qu¨¦ recibimos?

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Entrevista a Vicent Cucarella

Una injusticia hist¨®rica

La crisis fiscal valenciana

La Comunidad Valenciana est¨¢ mal financiada. Se trata de uno de los pocos asuntos que generan un consenso transversal en la autonom¨ªa, asumido por todos los partidos con representaci¨®n parlamentaria, sindicatos, organizaciones empresariales y otros actores de la sociedad civil. La conclusi¨®n tambi¨¦n la acepta el ministro de Hacienda en funciones, Crist¨®bal Montoro. Los estudios encargados por su departamento sit¨²an a la Comunidad Valenciana como la peor parada en el sistema de financiaci¨®n. Y reflejan que, de las cuatro autonom¨ªas que aportan m¨¢s al Estado de lo que reciben, es la ¨²nica que no puede describirse como rica: su renta per c¨¢pita es 12 puntos inferior a la media espa?ola.

La cantidad de financiaci¨®n adicional que la Comunidad Valenciana necesitar¨ªa para situarse en el promedio depende del m¨¦todo de estimaci¨®n. Y de si se incluye o no en el c¨¢lculo al Pa¨ªs Vasco y Navarra, que tienen sistemas propios. En funci¨®n de ello, el importe oscila entre 750 y 1.300 millones de euros al a?o.

La falta de recursos, advierten los dirigentes de la Generalitat y expertos que han estudiado el asunto, como Francisco P¨¦rez, director del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (Ivie), afecta al crecimiento de la Comunidad Valenciana, condiciona su productividad a medio y largo plazo y refuerza el c¨ªrculo de endeudamiento en el que se han visto inmersos los sucesivos Gobiernos valencianos, m¨¢s all¨¢ de las luces y sombras de su gesti¨®n.

La deuda de la comunidad asciende a 43.164 millones de euros, el segundo importe m¨¢s elevado de Espa?a. Y representa el 41,7% del Producto Interior Bruto auton¨®mico, el porcentaje m¨¢s alto. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal estim¨® hace poco que los valencianos ser¨ªan los espa?oles que m¨¢s d¨ªas de trabajo tendr¨ªan que destinar de forma ¨ªntegra a pagar la deuda de su comunidad, 154, frente a los 53 d¨ªas del Pa¨ªs Vasco o Madrid.

La Generalitat cerr¨® 2015 con un d¨¦ficit equivalente al 2,51% del PIB auton¨®mico, cuando el l¨ªmite era del 0,7%. Y aunque las cuentas han mejorado este a?o por la recuperaci¨®n econ¨®mica y el aumento de la liquidaci¨®n del sistema entregado por el Gobierno, el Ejecutivo valenciano espera que los n¨²meros rojos asciendan en 2016 al 1,4%, el doble de lo permitido, contando con que se concrete la flexibilizaci¨®n del objetivo fijado, y este pase del 0,3% al 0,7%.

La movilizaci¨®n para cambiar el sistema de financiaci¨®n es el primer punto pol¨ªtico del Gobierno que preside Ximo Puig, que ha conseguido atraer a todos los partidos, agentes y entidades sociales relevantes de la comunidad a la firma de un documento en el que se reclama un nuevo sistema.

El consejero de Hacienda y Modelo Econ¨®mico, Vicent Soler, califica la situaci¨®n de ¡°anomal¨ªa incalificable¡±. ¡°Es una verg¨¹enza que la situaci¨®n de la Comunidad Valenciana se haya prolongado durante tanto tiempo sin que se haya querido darle una soluci¨®n, siquiera transitoria, en tanto no se acometa la modificaci¨®n del modelo¡±.

Soler recuerda que el actual sistema, aprobado en 2009, caduc¨® el 1 de enero de 2014 sin que haya sido renovado. Y mantiene que no hay otro caso en el entorno europeo, donde tambi¨¦n se analizan las balanzas fiscales, de un territorio ¡°con una renta per c¨¢pita inferior al conjunto del pa¨ªs que aporte m¨¢s a la caja com¨²n de lo que recibe¡±. ¡°En vez de recibir, dado nuestro nivel de renta, financiamos la riqueza de otros territorios que son ricos. Es un disparate¡±.

?ngel de la Fuente, director ejecutivo de Fedea (Fundaci¨®n de Estudios de Econom¨ªa Aplicada) y uno de los autores de las balanzas fiscales encargadas por Montoro, se?ala que la Comunidad Valenciana es la que tiene ¡°menor financiaci¨®n por habitante ajustado, tanto con los datos de la liquidaci¨®n del sistema, en la que se utiliza un criterio de devengo, como con los del Sistema de Cuentas P¨²blicas Territorializadas, donde se usa un criterio de caja¡±. Pero a?ade: ¡°La financiaci¨®n por habitante ajustado de Valencia est¨¢ en torno a un 7% por debajo de la media. Eso se nota, pero no es la mitad o un tercio. Implica una cierta estrechez de medios, pero no te hace imposible ofrecer servicios cualitativamente similares a los del promedio del pa¨ªs¡±.

Para situarse en la media de las comunidades de r¨¦gimen com¨²n ¡ªsin contar a Pa¨ªs Vasco y Navarra¡ª, la Comunidad Valenciana deber¨ªa recibir entre 750 y 800 millones de euros m¨¢s al a?o, estima De la Fuente. El economista est¨¢ de acuerdo en que, repetida en el tiempo, esa cantidad puede tener un efecto muy nocivo, pero pide ¡°no exagerar¡± en el debate.

El director de Fedea marca distancias con otra demanda planteada en Valencia, consistente en aplicar una quita de la parte de la deuda auton¨®mica atribuible a la infrafinanciaci¨®n, aprovechando que, debido a mecanismos como el Fondo de Liquidez Auton¨®mica (FLA), la mayor parte se mantiene ahora con el Estado. ¡°Una quita ser¨ªa mala idea porque incrementar¨ªa los grandes problemas de incentivos que ya tenemos. Las comunidades est¨¢n demasiado acostumbradas a gastar m¨¢s de lo que tienen y luego a poner la mano¡±. De la Fuente se muestra favorable a ¡°pensar¡± otras f¨®rmulas, como alargar el plazo de devoluci¨®n, ¡°pero pagando intereses razonables¡±.

Las f¨®rmulas para rebajar la deuda ¡°tienen riesgos¡±, admite el director del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas. ¡°Cuando a un deudor le perdonas la deuda, puede pensar que eso pasar¨¢ la pr¨®xima vez que se endeude. Pero hay que ver cu¨¢les son las causas del endeudamiento¡±, matiza P¨¦rez. ¡°Tener m¨¢s d¨¦ficit o m¨¢s deuda a pesar de gastar menos no es lo mismo que tenerlos porque se gasta m¨¢s. Y la Comunidad Valenciana gasta menos que la media en todos los apartados¡±.

La Generalitat destina a servicios p¨²blicos fundamentales, como sanidad, educaci¨®n y protecci¨®n social, solo algo menos que el promedio de comunidades, indica el director del Ivie. ¡°Aunque en materia de dependencia ya hay diferencias importantes con la media espa?ola, porque el sistema no se ha podido desplegar adecuadamente por falta de recursos¡±. Pero una vez cubiertos los servicios b¨¢sicos, no queda dinero para casi nada m¨¢s. ¡°En pol¨ªticas de industria, competitividad, obras p¨²blicas, cultura, agricultura¡­ En todo ese resto que no son servicios p¨²blicos fundamentales, la Comunidad Valenciana gasta un 40% menos que la media. Eso afecta al d¨ªa a d¨ªa, y a largo plazo condiciona nuestra capacidad productiva¡±.

Aunque apoyan la reivindicaci¨®n de mejorar la financiaci¨®n, PP y Ciudadanos han criticado lo que consideran un uso ¡°victimista¡± de la cuesti¨®n por parte de la Generalitat, gobernada por socialistas y Comprom¨ªs. El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, el exconsejero de Hacienda popular Juan Carlos Moragues, lamenta que el discurso del Consell olvide el ¡°auxilio¡± que la Comunidad Valenciana recibe del Ejecutivo a trav¨¦s de instrumentos como el FLA, que ha impedido que se declare en suspensi¨®n de pagos. La vicepresidenta valenciana, M¨®nica Oltra, recuerda que el FLA es un pr¨¦stamo. Y que usarlo de forma intensiva ¡ª29.000 millones al cierre de 2015¡ª, cuando lo que se deber¨ªa hacer es corregir la financiaci¨®n, contribuye a hacer ¡°m¨¢s insostenible¡± la situaci¨®n financiera de la Generalitat.