La trampa del falso infiltrado anarquista

Los agentes S¨¢nchez y M¨¦ndez creen que le tienen comiendo de su mano. Que le han engatusado. Le dan los ¨²ltimos consejos para su nueva tarea como confidente en los c¨ªrculos anarquistas de Barcelona: ¡°Cuando entres en los sitios, te cagas en la puta madre que nos pari¨® a todos. Tienes facilidad para hacerlo porque eres uno de ellos. No te sientas observado sin necesidad. Y sobre todo, nada de conversaciones postcoito con tu novia sobre este tema, son muy peligrosas¡±.

Quim Gimeno, de 28 a?os, atiende como un buen alumno las indicaciones de dos veteranos de la Brigada de Informaci¨®n de la Polic¨ªa. Le han prometido una paga mensual de 200 euros por su colaboraci¨®n. Y le han asignado su primera misi¨®n: ¡°Vas a captar informaci¨®n en el entorno de los casales del Poblesec¡±. ¡°Me interesa¡±, le dice uno de los polic¨ªas, ¡°ver qui¨¦n entra o sale, si tal o cual est¨¢ activo, si pertenece a alguna campa?a¡­ Tienes habilidad y eres un t¨ªo intelectualmente brillante, podr¨¢s hacerlo¡±.

Quim asiente, se presta al juego. Pero finge: con el m¨®vil, graba la conversaci¨®n para delatarles. Es 11 de abril de 2016, su quinto encuentro con los polic¨ªas, esta vez en la plaza de la Conc¨°rdia de Barcelona. Necesita una prueba definitiva para denunciarles. Y da el paso. Ahora, casi medio a?o despu¨¦s, la titular del juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 2 de Barcelona, Mar¨ªa Eugenia Canal, ha admitido a tr¨¢mite la querella. E investigar¨¢ a los dos polic¨ªas por un delito de coacciones. Lo primero ser¨¢ confirmar la identidad real de los agentes: ¡°S¨¢nchez¡± y ¡°M¨¦ndez¡± son solo los nombres con los que se presentaron ante el chico.

¡°Vas a captar informaci¨®n en los casales del Poblesec¡±, le dijo un agente

El primer intento por captarle se produjo en enero. Quim acudi¨® a un centro social donde se hablaba del caso Pandora, una operaci¨®n de los Mossos d¡¯Esquadra contra el presunto terrorismo de corte anarquista. El joven permanec¨ªa entonces imputado en la segunda fase de esa operaci¨®n por pertenencia a organizaci¨®n terrorista. Tras el debate, S¨¢nchez se le acerc¨®. ¡°Me dijo que era periodista de la agencia Efe y que estaba interesado en mi caso. Acced¨ª a que nos vi¨¦ramos¡±, explica a EL PA?S.

En la entrevista, S¨¢nchez no se comport¨® como Quim cree que debe hacerlo un periodista. ¡°Me dio a entender que, en realidad, quer¨ªa informaci¨®n de otras personas. Me pregunt¨® qu¨¦ pasar¨ªa si se enterasen en mi trabajo de que hab¨ªa sido detenido. E insinu¨® que ten¨ªa muy buena relaci¨®n con gente de Interior y que podr¨ªa ofrecerme beneficios, como un nuevo pasaporte, porque el m¨ªo me lo hab¨ªan retirado¡­ Empec¨¦ a sentirme intimidado y bloqueado¡±. D¨ªas despu¨¦s, el falso periodista le anunci¨® por SMS que dispon¨ªa de ¡°informaci¨®n relevante¡± sobre la causa en la Audiencia Nacional. Y forz¨® un segundo encuentro, que acab¨® de encender las alarmas de Quim. ¡°Me dijo que, en realidad, trabajaba para el Estado, que hab¨ªa hablado con el juez Berm¨²dez, que me interesaba colaborar con ¨¦l¡­ Ah¨ª ya veo que es un tema peligroso y que puedo salir perjudicado¡±.

Tras consultar con su abogado, Quim decidi¨® grabar el siguiente encuentro, difundido despu¨¦s por el semanario La Directa. Los d¨ªas previos a la entrevista sufri¨® de ¡°insomnio, ansiedad y man¨ªa persecutoria¡±, dice. En esa conversaci¨®n (la ¨²nica grabada) el tono es de cierta confianza. La charla, en cualquier caso, revela las estrategias que emplean los polic¨ªas para captar infiltrados. A Quim le ofrecen una ¡°contraprestaci¨®n fija, mensual¡±, que puede verse aumentada ¡°si hay informaciones relevantes¡±. Los polic¨ªas aseguran que prefieren entregarle ¡°el dinero en mano¡± y le instruyen para abrir una nueva cuenta de correo ¡°limpia¡±.

¡°Beneficios judiciales¡±

Quim pregunta si podr¨ªa lograr ¡°alg¨²n beneficio judicial¡±. S¨¢nchez y M¨¦ndez admiten que ¡°es complicado¡± porque ¡°los jueces son independientes¡±, pero agregan que es m¨¢s factible con la Fiscal¨ªa. ¡°El fiscal es un puto funcionario jerarquizado¡±, dice uno de ellos. A Quim no le hizo falta ayuda externa porque poco despu¨¦s, en junio, la Audiencia Nacional dio carpetazo a la segunda fase de Pandora. M¨¢s all¨¢ de que los detenidos ¡°se re¨²nen en sitios p¨²blicos y mantienen conversaciones¡±, los Mossos d¡¯Esquadra no aportaron ninguna prueba que les vincule a actividades terroristas, reprocha la juez en el auto de archivo.

Andr¨¦s Garc¨ªa, de Ir¨ªdia (Centro por la Defensa de los Derechos Humanos) es el abogado de Quim y el autor de una querella que puede servir, dice, para ¡°poner l¨ªmites a pr¨¢cticas policiales irregulares¡±. Garc¨ªa denuncia que ¡°coaccionar a personas pendientes de procesos penales para lograr informaci¨®n es intolerable en un sistema democr¨¢tico¡±. Fuentes del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa (CNP) admiten la pertenencia al cuerpo de esas dos personas, aunque rechazan ofrecer m¨¢s datos por el car¨¢cter reservado de los servicios de informaci¨®n, que ¡°buscan confidentes en la lucha contra el terrorismo¡±. Esas mismas fuentes opinan que de la conversaci¨®n grabada ¡°no se desprende ninguna amenaza ni intimidaci¨®n¡± y conf¨ªan en que, tras citarles a declarar, la juez archive la causa contra los polic¨ªas.