¡°Un dise?o est¨¢ listo cuando emociona¡±

Miguel Mil¨¤ i Sagnier (Barcelona, 1931), Premio Nacional de Dise?o, Compasso d'Oro, Medalla de Oro al M¨¦rito en las Bellas Artes, empez¨® este lunes alabando la iluminaci¨®n del Giardinetto y acab¨® sin poder contener la emoci¨®n ¡ªy emocion¨¢ndonos a todos por ello¡ª. Entremedio, una amena, hermosa y genial lecci¨®n de oficio. Lecci¨®n doble: porque la brind¨® en pantalla y en directo.

El pase en el conocido restaurante barcelon¨¦s en calidad de primicia (se emitir¨¢ en TVE Catalu?a el 1 de febrero a las 19:30 h) del documental de Poldo Pom¨¦s sobre el veterano dise?ador de la familia Mil¨¤, maestro donde los haya, sirvi¨® para recordar (si fuera necesario) la trayectoria creativa de uno de nuestros grandes talentos en la materia (y valga la palabra). Y tambi¨¦n para homenajearle de la mejor manera posible: desde la excelencia de la que ¨¦l ha hecho gala toda la vida. Y es que el filme de Pom¨¦s, con gui¨®n de Marta Feduchi, es un magn¨ªfico recorrido, en el fondo y en la forma, por la personalidad y la forma de trabajar de Miguel Mil¨¤, un hombre al que debemos un pu?ado de objetos memorables entre los que han discurrido nuestras vidas (sus l¨¢mparas, sillas, bancos, o el gal¨¢n de noche Manila) y que ¨¦l ha ido creando haciendo gala de una sabidur¨ªa, una humanidad y una sensatez (y a menudo un humor y un sentido de juego) que contrastan en un mundo que a veces se ha dejado arrastrar por el dislate y hasta la majader¨ªa. Lo subray¨® Mil¨¤ al acabar el pase al referirse de manera muy divertida a su reciente estancia en un innovador hotel de Madrid donde nada funcionaba.

El documental, fruto de dos a?os de trabajo, ha sido producido por Santa & Cole, firma con la que Mil¨¤ mantiene una relaci¨®n desde hace m¨¢s de 30 a?os. Pom¨¦s apunt¨® ayer que ha tratado de dar a ¡°conocer un poco m¨¢s al maestro¡± y que ha querido hacerlo de la manera m¨¢s natural posible. Desfilan por las im¨¢genes ¡ªen las que el propio Mil¨¤ destac¨® ese uso art¨ªstico del blanco que, dijo, Pom¨¦s ha heredado de su padre, el fot¨®grafo y publicista Leopoldo Pom¨¦s¡ª, personas que han compartido la vida de dise?ador de Miguel Mil¨¤, como Federico Correa, Andr¨¦ Ricard o Fernando Amat. Mil¨¤ dialoga con ellas y lo hace tambi¨¦n con la materia y con sus propios dise?os: las l¨¢mparas Cesta, Manila, la M68, la TMM, los bancos Neorrom¨¢ntico o las sillas Salvador. En el documental, el dise?ador recuerda como empez¨® a crear ¡°cosas nuevas¡± con Correa y su hermano Alfonso Mil¨¤, influenciados por Coderch, en una ¨¦poca en la que ¡°no hab¨ªa nada, todo era muy ?o?o¡±. Su primer encargo fue una l¨¢mpara de pie. Habla tambi¨¦n de la empresa y tienda Gres, de la que acab¨® siendo socio y que fue una especie de Ikea avant la lettre.

Las im¨¢genes muestran a Mil¨¤ con un c¨²ter en la mano fabricando un ¨²til y estiloso matamoscas de cuero. En otro momento, muy emocionante, la c¨¢mara lo sigue por un Vin?on espectral dos d¨ªas despu¨¦s de que la tienda cerrara. Y luego montando una de sus l¨¢mparas junto a Ricard, que califica al objeto de ¡°la s¨ªntesis de la s¨ªntesis¡±. ¡°Ahora que nos hemos hecho mayores agradezco que sea tan ligera¡±, acota divertido el creador. Alg¨²n momento el documental de Pom¨¦s, siempre amable, adquiere un simp¨¢tico tinte gamberro, como cuando se lanza una silla Salvador de ca?a de Manila por el balc¨®n para probar su flexibilidad o se recuerda el pasado de cantante de Mil¨¤ influenciado por el tr¨ªo Calaveras.

Mil¨¤ reivindica la est¨¦tica (¡°es fundamental¡±), la econom¨ªa, la artesan¨ªa y el dibujo a mano (¡°nunca el ordenador matiza tanto¡±), y arruga la nariz ante la palabra innovaci¨®n.

Sobre el dise?o en Espa?a opina que ha mejorado pero que sobre todo la gente compra ahora con m¨¢s criterio, y eso hace que suba el nivel. En ese proceso, ¡°Ikea ha contribuido, seguro¡±. De la moda dice que no le interesa. ¡°Mis dise?os no los pongo de moda, yo los pongo en uso¡±.

¡°Me ha gustado, y eso que odio verme¡±, coment¨® el dise?ador tras el pase. Abrumado por las felicitaciones y los elogios, se emocion¨®: ¡°Tengo tendencia al lloro¡±. ?Cu¨¢ndo se sabe si un dise?o est¨¢ bien hecho? ¡°Cuando me empieza a emocionar s¨¦ que est¨¢ listo¡±.

Maestro, ?el gal¨¢n de noche tiene futuro? ¡°Para m¨ª es indispensable. Me horroriza eso que hace la gente joven que tira la ropa al suelo. Dise?ar es poner orden y el orden es fundamental. Sobre todo cuando te haces mayor¡±.

En otro orden de dise?o, preguntado sobre el proc¨¦s, respondi¨®: ¡°?Lo digo con una sola palabra?: Mal. Me parece una p¨¦rdida de tiempo y una trampa¡±. Considera que est¨¢ basado en ¡°un resentimiento¡±, y que ¡°nunca hay que usar el resentimiento como base de una vida¡±.