Casa Vicens, la primera vivienda de Gaud¨ª, abrir¨¢ el pr¨®ximo oto?o
MoraBanc, despu¨¦s de comprarla en 2014, invierte cuatro millones de euros en su restauraci¨®n
El Palau G¨¹ell, la Casa Batll¨®, La Pedrera, la Sagrada Familia, la Torre Bellesguard, el Park G¨¹ell y los pabellones G¨¹ell hacen de Antoni Gaud¨ª el arquitecto de Barcelona, y, quiz¨¢ de todo el mundo, con m¨¢s edificios abiertos al p¨²blico. Un autor que sumar¨¢ a esta larga lista de construcciones singulares otro a partir del pr¨®ximo oto?o: la Casa Vicens que abrir¨¢ sus puertas despu¨¦s de 130 a?os como vivienda privada, tras una profunda remodelaci¨®n de cuatro millones de euros. Este edificio, situado en la calle Carolines 24 , es la primera casa proyectada por Gaud¨ª, cuando contaba con 31 a?os, tras el encargo que recibi¨® de Manel Vicens en 1883 para construir una finca de veraneo en la entonces vecina villa de Gr¨¤cia, y es el ¨²nico edificio de los ocho que cuenta la ciudad de Barcelona declarados Patrimonio de la Humanidad que abrir¨¢ sus puertas al p¨²blico. Doble buena noticia para los barceloneses.
En 2014 se supo que esta vivienda hab¨ªa sido adquirida por la entidad andorrana MoraBanc a la familia Herrero-Jover, sus propietarios desde 1899, cuando se la compraron a la viuda de Manuel Vicens. La compra se produjo por una cantidad que no ha sido desvelada, pero menor a los 35 millones de euros por los que se puso a la venta en 2007.
Ayer, el anunci¨® de la pr¨®xima apertura del edificio ¡ªdespu¨¦s de haberse anunciado una anterior para finales de 2016¡ª cont¨® con la presencia de los m¨¢ximos responsables del proyecto que aseguraron que han previsto unas visitas controladas, que quiere huir de las masificaciones. Ser¨¢n grupos de 25 personas, cada 30 minutos. En total 500 personas diarias que podr¨¢n recorrer esta vivienda ricamente decorada con elementos orientalistas, sobre todo cer¨¢micos, que Gaud¨ª comenz¨® a utilizar aqu¨ª y que seguir¨¢ usando en el resto de sus obras.
Estos 150.000 visitantes anuales representan una cifra lejana a los millones de personas que reciben la gran mayor¨ªa de sus edificios. ¡°Este a?o ha sido declarado el del turismo sostenible, y queremos que la Casa Vicens sea un ejemplo de esto¡±, explic¨® Joan Abell¨¤, que cambi¨® en mayo pasado la gerencia del Macba por la direcci¨®n de este proyecto, que estuvo acompa?ado de Mercedes Mora, representante de la familia, Marta Antu?ano, responsable de la museolog¨ªa y los arquitectos Jos¨¦ Antonio Mart¨ªnez Lape?a y David Garc¨ªa, que llevan a cabo la reforma junto a Elies Torres, que no pudo acudir.
De entrada una sorpresa: la fecha de finalizaci¨®n de la casa no es la que se pensaba. Seg¨²n Antu?ano no hay constancia de que la obra se entregara en 1888 como estaba establecido, sino tres a?os antes, en 1885, por lo que no hay duda de que estamos en la primera casa privada creada por el genial arquitecto.
Una historia de ida y vuelta
- 1885. Gaud¨ª termina la casa de veraneo de Manel Vicens.
- 1925. La familia Jover compra la casa y encargan a Serra de Mart¨ªnez su reforma. Se construye una cascada, un mirador y una capilla.
- 1946. Comienza la reducci¨®n de la superficie del jard¨ªn.
- 1969. Se declara Monumento Hist¨®rico Art¨ªstico.
- 2005. Se declara Patrimonio de la Humanidad.
- 2007. Se pone a la venta.
- 2014. MoraBanc compra la casa para abrirla al p¨²blico.
- 2015. Comienza las obras.
- 2017. Inauguraci¨®n prevista para el oto?o.
En 1925 la casa vivi¨® una profunda remodelaci¨®n por encargo de la familia Jover efectuada por el arquitecto Joan Baptista Serra de Mart¨ªnez, que tras mostrar su proyecto a un anciano Gaud¨ª que lo bendijo, transform¨® la casa de veraneo en la residencia para tres familias. Desde ese momento, se inicia la ¨¦poca de esplendor de Casa Vicens en la que, como muestran las fotograf¨ªas antiguas, la enorme finca, ampliada en 1927, contaba con una cascada, un mirador y una capilla dedicada a San Rita, justo donde hab¨ªa un manantial de agua a las que se atribu¨ªan propiedades curativas; todo rodeado por un largu¨ªsimo muro coronado por la t¨ªpica valla realizada con hojas de palmito que se prolongaba hasta la calle Princep d¡¯Asturias. A partir de 1946 comienza la segregaci¨®n y venta de parcelas que han llevado a que la casa aparezca rodeada por enormes bloques que la oprimen. ¡°Es un ejemplo de las tropel¨ªas que se han hecho en esta ciudad¡±, asegur¨® Lape?a.
Seg¨²n el arquitecto, la restauraci¨®n est¨¢ encaminada a devolver la casa a su estado original eliminando vol¨²menes con que fue ampliada en 1935 y 1964 y recuperar elementos como la terraza y la escalera original en la parte central del edificio, ¡°diferente de la original porque ha de cumplir las normativa actual¡±, que daba sentido a la vivienda unifamiliar que en la reforma de 1925 se perdi¨® para dividir el edificio y conseguir una residencia plurifamiliar habitual.
La visita a la casa se completar¨¢ con una exposici¨®n permanente en la que se explicar¨¢ su historia, su importancia dentro del resto de la obra gaudiana y su contexto social, cultural y art¨ªstico, aunque, explicaron, ¡°la museograf¨ªa est¨¢ por acabar definir¡±.
Mientras, se est¨¢ elaborando un plan de impacto tur¨ªstico que potenciar¨¢ la venta de entradas online (entre 12 y 22 euros). Y entre las cifras que se lanzaron ayer, el que el 20% del p¨²blico sea local. Posiblemente eso sea lo m¨¢s complicado de todo el proyecto ya que la media de visitantes de barceloneses a los museos de su ciudad no llega al 10%.
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