Fallece el especialista en cine, c¨®mic y novela negra Javier Coma
Dotado de un conocimiento enciclop¨¦dico, public¨® numerosas obras de referencia y reivindic¨® la cultura popular y los g¨¦neros
El conocido estudioso del cine, el c¨®mic y la novela negra Javier Coma (Blanes, 1939) falleci¨® ayer a causa de un c¨¢ncer. Coma, hombre de una cultura vast¨ªsima y un conocimiento enciclop¨¦dico de los g¨¦neros era un autor indispensable para cualquiera que quisiera conocer en profundidad temas como, entre otros much¨ªsimos, el c¨®mic cl¨¢sico estadounidense, el w¨¦stern, el cine b¨¦lico o la caza de brujas en Hollywood. No hay amante de los g¨¦neros que no posea en su biblioteca (y utilice abundantemente) t¨ªtulos como el indispensable Diccionario del cine de aventuras (1994), el Diccionario del cine negro (1995), La gran caravana del w¨¦stern o los dos vol¨²menes de Cine b¨¦lico.
Capaz de apasionarse hasta el exceso hablando de las vi?etas del Pr¨ªncipe Valiente, de las relaciones entre los Nobel y los Oscars, o de las canciones cl¨¢sicas de Hollywood, Javier Coma, que fue colaborador de EL PA?S, era un personaje entra?able que disimulaba a veces su trasfondo tierno revisti¨¦ndose de un aire adusto y profesoral que pod¨ªa parecer, con su voz profunda y su perfil bogartiano, algo severo. Deja un vac¨ªo insustituible, adem¨¢s de por su calidad humana, porque resulta imposible encontrar a alguien hoy en d¨ªa con un conocimiento tan extenso de la cultura popular y una documentaci¨®n como los que ¨¦l atesor¨®.
Javier Coma, cuyo funeral tendr¨¢ lugar el jueves a las 10 en el tanatorio de Les Corts, ha sido un sabio en materias sobre las que, a la Academia en particular, ha costado a?os y a?os admitir que pod¨ªan ser objeto de sabidur¨ªa. Conoc¨ªa la cultura popular norteamericana al dedillo y es responsable de una larga lista de t¨ªtulos sobre el c¨®mic (siempre defendi¨® esta denominaci¨®n frente a las de tebeo o historieta), la novela negra (fue el responsable del relanzamiento de la colecci¨®n La cua de palla en 1985) o Hollywood.
Su enorme erudici¨®n, no solo de las filmograf¨ªas, sino sobre la trastienda de la industria de Hollywood le permit¨ªa proponer libros sobre g¨¦neros ampliamente tratados por otros autores, como el w¨¦stern o el cine b¨¦lico, que no eran repeticiones de lo dicho. Su visita a estos terrenos siempre presentaba un lado original, in¨¦dito. Para escribir, por ejemplo, Doctor libro y M¨ªster Film, explica en el pr¨®logo, busc¨® las versiones en ingl¨¦s de las novelas citadas. Y era particularmente respetuoso con los autores que ya se hab¨ªan acercado al tema tratado. En sus libros hay siempre un p¨¢rrafo de agradecimientos. De ah¨ª que tampoco tragara con los plagios a su trabajo y en 2000 logr¨® la retirada de un volumen donde hab¨ªa copiadas 400 l¨ªneas de sus diccionarios sobre el cine de aventuras y el w¨¦stern.
Publicitario free-lance, ten¨ªa muy presente la manera de comunicar sus tesis, en unos tiempos donde una semi¨®tica sin metabolizar convert¨ªa algunos textos en crucigramas que, al final, solo provocaban un mareo. De su faceta como publicitario quiz¨¢ la obra m¨¢s conocida, aunque de autor¨ªa olvidada, es el eslogan "El Bar?a es m¨¢s que un club", que data de principios de los setenta pero que sigue vivo, vigoroso. Otros inventos publicitarios suyos tuvieron una vida m¨¢s breve como un "Fruco, el hijo de Fruta", cuyas resonancias llevaban a una expresi¨®n inc¨®moda. Lo explica Silvia Coma en su blog sobre libros y cine.
Javier Coma no desde?¨® ning¨²n formato, desde el libro m¨¢s cl¨¢sico, a los diccionarios o los fasc¨ªculos coleccionables (dirigi¨® uno sobre el c¨®mic en este diario). Al margen de temas m¨¢s previsibles como el cine negro o John Wayne, Coma tambi¨¦n se adentr¨® en otros asuntos. Ah¨ª est¨¢n sus trabajos, solo o en colaboraci¨®n, sobre el cine inspirado por novelas; la caza de brujas donde presenta un Hollywood menos festivo, criminalizado y perseguido por la derecha de su pa¨ªs; o el acercamiento del cine americano a la Guerra Civil espa?ola. En La brigada Hollywood explica, por ejemplo, las dificultades con que toparon los cineastas norteamericanos para plasmar en el cine su adhesi¨®n a la Rep¨²blica espa?ola.
El autor de Y nos fuimos a hacer vi?etas no rehuy¨® las pol¨¦micas. Particularmente viva fue la que desencaden¨® un manifiesto en 1984 contra una exposici¨®n dedicada a Tint¨ªn en la Fundaci¨®n Mir¨® de Barcelona. Coma fue uno de sus promotores. Y lo defend¨ªa argumentando que Tint¨ªn ha sido una publicaci¨®n infantil de ¨¦xito pero que no puede compararse con otras propuestas en el terreno de la historieta. Coma achacaba la redenci¨®n cultural de Herg¨¦, su autor, a una promoci¨®n de la derecha francesa que quiso replicar el descubrimiento europeo del c¨®mic americano con un hom¨®logo en el ¨¢rea franc¨®fona.
Otra, l¨®gica, gran pasi¨®n de Coma fue el jazz. Fue uno de los fundadores del Jubilee Jazz Club y quien bautiz¨® el Jamboree. Pasi¨®n por el cine norteamericano, por el c¨®mic (exceptuando a Herg¨¦), por la novela negra. Pero una pasi¨®n documentada y rastreable en m¨¢s de 50 t¨ªtulos.
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