Barcelona estudia c¨®mo hacer que los turistas paguen las multas por incivismo
En 11 a?os de vigencia la ordenanza se ha aplicado sobre todo en Ciutat Vella y vinculada al ocio nocturno
La revisi¨®n de la pol¨¦mica ordenanza de Civismo del Ayuntamiento de Barcelona fue una de las promesas electorales del partido de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Casi dos a?os despu¨¦s de las elecciones de mayo de 2015, el equipo del teniente de alcalde de Derechos de Ciudadan¨ªa, Jaume Asens, trabaja todav¨ªa en la futura norma. En parte se apoyar¨¢ en un estudio que ha realizado la Universitat de Barcelona, que concluye que el texto est¨¢ desfasado y que en sus 11 a?os de vigencia la ordenanza se ha aplicado en m¨¢s de la mitad de los casos (53% de las sanciones) en Ciutat Vella y en relaci¨®n al ocio nocturno (multando a lateros, sobre todo). Adem¨¢s, el porcentaje de multas que se cobran ronda apenas el 30%-40% de las que se imponen (la media en 2015 fue de 165 euros por sanci¨®n, se pusieron 80.000). De ah¨ª que el gobierno estudie, entre otras cuestiones, "la f¨®rmula para multar eficazmente a los turistas". Es decir, que paguen si se les multa por conductas inc¨ªvicas en Ciutat Vella.
Tanto los autores del estudio como Asens subrayan que la ciudad y sus retos actuales no tienen nada que con los que afrontaba cuando la ordenanza se aprob¨® en 2005. Entonces, las cuestiones que los ciudadanos expresaban como principales preocupaciones en las encuestas eran la limpieza, la inseguridad y los problemas asociados a la inmigraci¨®n. Ahora, en cambio, son el paro y las condiciones laborales, el turismo y la circulaci¨®n.
Asens tambi¨¦n ha recordado las voces, como las de la S¨ªndica de Barcelona, que reiteradamente han alertado de que la ordenanza se ceba con los m¨¢s vulnerables (personas sin techo, trabajadoras sexuales o vendedores ambulantes). Las multas a estos colectivos apenas se cobran en un 5% de los casos, ha explicado a partir de datos del a?o 2014. "La maquinaria de imponer, tramitar y cobrar las multas es muy costosa para el Ayuntamiento y el bajo ¨ªndice de pago obliga a hacer una reflexi¨®n, nos preocupa", ha dicho Asens este viernes, antes de presentar el estudio a los grupos de la oposici¨®n.
Tambi¨¦n ha explicado que para elaborar el nuevo texto deber¨¢n tener en cuenta sentencias de los ¨²ltimos a?os que tienen que ver con la ordenanza y leyes que antes no exist¨ªan, como la Ley Org¨¢nica de Seguridad Ciudadana (conocida como Ley Mordaza), que tiene impacto sobre el espacio p¨²blico y es de rango superior a una ordenanza municipal. "Nos crea un nuevo campo de juego, hay que ver como afecta", ha dicho.
La futura ordenanza prev¨¦ incrementar las actuaciones de orden social, graduar las sanciones o incrementar la aplicaci¨®n de medidas alternativas a las multas. Estas medidas se ofrecen a los menores de edad y los adultos pueden solicitarlas. Y consisten en recibir formaci¨®n o charlas (por ejemplo a los menores que beben en la calle) o en acciones de mejora en la comunidad. "La nuestra quiere ser una mirada m¨¢s social hacia los vulnerables", ha dicho Asens y ha explicado que los servicios jur¨ªdicos est¨¢n elaborando un estudio "que no podemos revelar".
Los autores del estudio son los doctores en Derecho, Cristina Fern¨¢ndez, y Psicolog¨ªa Social, Andr¨¦s Di Masso, que han explicado que sus conclusiones apuntan a una norma desfasada, aunque hay consenso en que es necesario un marco regulador y sancionador. Tambi¨¦n apuntaron que entre sus 60 entrevistados (desde agentes de la Guardia Urbana, hasta skaters pasando por personas sin hogar) "hay una sensaci¨®n de injusticia" respecto a la ordenanza. "Ha acabado siendo una herramienta para dar respuesta a problemas muy concretos en una zona muy concreta", han apuntado. "Y no reduce la conflictividad", a?aden. Por ello recomiendan modificarla de acuerdo a la realidad actual de la ciudad, promover medidas socioeducativas, facilitar un acceso no excluyente al espacio p¨²blico y que se tenga en cuenta la realidad de cada territorio a la hora de aplicarla.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.