Cuando la noche se traga una hora¡ ?qu¨¦ pasa con mi oficio?
Hay quien sufre con amargura cada minuto extra que le concede al reloj
La madrugada del s¨¢bado al domingo se producir¨¢ el cambio de hora primaveral. Al dar las dos, autom¨¢ticamente ser¨¢n las tres. Por la ma?ana, la noche se habr¨¢ tragado una hora de nuestro tiempo. Un agujero negro imposible de eludir. Un regalo de minutos propios a cambio de un presunto ahorro energ¨¦tico com¨²n. No hay estudios concluyentes al respecto pero el Ministerio de Industria lleva a?os cifrando en 300 millones de euros anuales el provecho que supone alterar los horarios dos veces al a?o. Sin embargo, hay quien sufre con amargura cada minuto extra que le concede al reloj.
"Al cuerpo no lo enga?as, esto es traum¨¢tico"
"Al cuerpo no lo enga?as, esto es traum¨¢tico".?Marta Romagosa es periodista. Encadena cuatro temporadas encarg¨¢ndose de ordenar la actualidad en El Mat¨ª de Catalunya R¨¤dio, el programa matinal de la radio p¨²blica catalana. Se levanta a las cuatro, "a las cuatro y siete", concreta de manera tajante. Sabe bien que, antes del alba, cada segundo de arrullo en el coj¨ªn es oro.
No oculta que, d¨ªas antes de que entre en vigor el nuevo horario, cierta angustia le corroe. "Es muy duro porque, aunque el despertador marque que es la hora, te est¨¢s levantando sesenta minutos antes de lo que acostumbrabas". Un martirio a?adido cuando el desvelo ya es, por tempranero, una fatiga. A pesar de que lleva a?os sufri¨¦ndolos, reconoce que no ha encontrado ninguna estrategia para limitar los da?os que produce cada cambio horario. "Ir a dormir antes quiz¨¢ ser¨ªa una soluci¨®n, pero no es nada f¨¢cil porque el tiempo siempre se te acaba echando encima", apunta. Alargar la siesta, si hay opci¨®n, se presenta como un mal menor. "El cambio de invierno no duele, porque ganas una hora, pero este castiga mucho". Destaca que los perjuicios se alargan hasta media semana. "En la redacci¨®n solemos hablar de la s¨ªndrome del mi¨¦rcoles. Es el peor dia para los que nos levantamos tan temprano porque el reposo del fin de semana queda lejos". En semanas de cambio de horario los s¨ªntomas del s¨ªndrome son desalentadores. Para aplacar la aver¨ªa, "habr¨¢ que tirar de pastelitos de chocolate", confiesa la periodista.
"Cuanto m¨¢s aburridos sean tus horarios, mejor".?Carles Castillejo es atleta de ¨¦lite. Su especialidad son las carreras de fondo, pruebas donde el deportista pone el cuerpo al l¨ªmite de la agon¨ªa. Con 38 a?os est¨¢ en la recta final de su etapa al m¨¢ximo nivel pero acumula cuatro participaciones en Juegos Ol¨ªmpicos y puede presumir de haber completado los 42 kil¨®metros del marat¨®n en 2 horas y 10 minutos. Ha dedicado su vida a mimar su cuerpo, a pulirlo, para lograr ser una bala sobre zapatillas deportivas. Ning¨²n detalle queda en manos del azar. Tampoco, menos que nada, el descanso. Castillejo cuenta que en la disciplina espartana que siguen los atletas de ¨¦lite "cuanto m¨¢s aburridos sean tus horarios, mejor". Refiere que los cambios de rutina alteran la preparaci¨®n y que, en este sentido, lo mejor para el atleta es encarar los h¨¢bitos "como un aut¨®mata".
Este fin de semana se celebra el campeonato del mundo de cross, una prueba que Castillejo ha disputado en el pasado. "Coincidi¨® tambien con cambio horario", recuerda. No afecta especialmente porque la carrera arranca al mediod¨ªa. Lo mismo pasa con la Volta a Catalunya, que se est¨¢ desarrollando esta semana. Fuentes del equipo Movistar ponen de relieve que el hecho de empezar las etapas m¨¢s all¨¢ de las doce del mediod¨ªa minimiza el trastorno que el adelanto del reloj pueda tener sobre el descanso de los ciclistas.
Una hora de adelanto horario puede turbar el ritmo del deportista pero Carles Castillejo matiza que es asumible si se afronta con m¨¦todo. "No te ir¨¢s a dormir una hora antes porque tienes el cuepo acostumbrado a unos horarios pero s¨ª puedes acostarte un poco m¨¢s temprano". M¨¢s all¨¢ del descanso, la alteraci¨®n horaria tambien puede tener efectos en otras rutinas del deportista. "Un maratoniano suele ir al ba?o a hacer de vientre dos o tres veces antes del carrera", cuenta. Si coincide con un d¨ªa de competici¨®n, la alteraci¨®n horaria puede trastocar el h¨¢bito. Cuando el tr¨¢nsito intestinal se encalla, hay soluciones. "Para evitar sorpresas durante la carrera, siempre queda la opci¨®n de recurrir al Fortasec, muchos corredores lo usan", cuenta el maratoniano.
"Tendremos que empezar a trabajar una hora antes, no nos queda otra"
Castillejo refiere que los principales problemas los ha sufrido en carreras que requieren de viajes transoce¨¢nicos. "Un salto horario de seis o siete horas, s¨ª es un porrrazo para el cuerpo", dice.
"Tendremos que empezar a trabajar una hora antes, no nos queda otra". Josep Maria Font es panadero artesano. Horno de le?a, masa trabajada con esmero y una regla de oro: no meterle prisas al pan. "Si le quitan una hora a la noche, tendremos que empezar a trabajar una hora antes, no nos queda otra".
Es el presidente del gremio de panaderos de Girona y dirige las cinco tiendas que la Fleca Sunyer tiene repartidas por el Empord¨¤. Es un noct¨¢mbulo que vive encadenando empalmadas. Sus noches se mezclan con el d¨ªa, sin tregua. "Soy capaz de aguantar durmiendo dos horas y media o tres horas al d¨ªa". El adelanto horario de cada primavera a?ade m¨¢s le?a al fuego que abrasa sus desajustes de sue?o.
"Es evidente que para los panaderos artesanos este cambio horario es un problema", lamenta. "El pan tiene su proceso y no lo puedes acelerar ni quitarle diez minutos por que, entonces, no queda igual", se?ala. Font refiere que normalmente el personal empieza a trabajar sobre las once de la noche pero que este s¨¢bado ser¨¢ menester adelantar la hora de entrada al obrador."El cliente quiere el pan puntual por la ma?ana", apunta, y a?ade: "Si nos recortan el horario por la cola, tenemos que alargarlo por la punta".
Trabajar de noche suele implicar, a menos que uno sea disc-jockey, te?ir de deberes y de formalidad unas horas que en teor¨ªa est¨¢n reservadas para el recreo personal. "Si un s¨¢bado por la noche, de normal ya causa disgusto irte de casa y dejar a la familia para trabajar, tener que marcharte una hora antes es un fastidio", describe Font.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.