El templo de tu hogar

Viajemos hasta un pasado lejano, un tiempo en el que los ¨®rganos soberbios de las iglesias y catedrales no estaban cubiertos de polvo, en el que las misas estaban enjoyadas con un cat¨¢logo de m¨²sica escrita para mayor gloria de Dios y de los hombres que la compusieron. Una era de m¨²sicos de corte noble y de maestros de capilla a los que se saludaba con una reverencia. Una ¨¦poca en la que la m¨²sica era camino et¨¦reo para ascender a los cielos.

En ese Barroco de genios enhebrando con la aguja del ingenio el rico bordado del contrapunto, vive Georg Philipp Telemann. El Sacro Imperio Germ¨¢nico se expande por Europa y cada una de las grandes ciudades germanas es un mundo en s¨ª mismo. La ciudad que lo encumbr¨® fue Hamburgo, donde sus dominios se extend¨ªan a las cinco principales iglesias de la ciudad. Tuvo la fortuna o el infortunio de vivir en la misma ¨¦poca que Bach y H?ndel, pero eso no aminor¨® su fama. A pesar de sus grandes logros, lo que el pr¨®ximo s¨¢bado se desentierra de su legado no es la m¨²sica compuesta para las gigantescas naves de piedra de las iglesias. El grupo La Spagna, dirigido por Alejandro Mar¨ªas, rescata al Telemann ¨ªntimo cuyas obras pueden interpretarse en el ¨¢mbito dom¨¦stico, en un concierto en la Casa de la Cultura de Majadahonda.

En esta cita podr¨¢n escucharse una colecci¨®n de cantatas que beben de todos los viajes que Telemann realiz¨®, con un abrazo entre las tradiciones alemana, francesa e italiana. Es un juego de espejos y saltos de agua en el que se resalta la variedad y efectos en matices y motivos. Cada cantata va precedida de una sonata para tr¨ªo, en el que los instrumentos construyen una mara?a de sonidos que van entrelaz¨¢ndose en un di¨¢logo en el que ninguna est¨¢ minusvalorado.