Los fundamentos de la CUP
El grupo radical independentista ha adoptado como padre espiritual a Llu¨ªs Maria Xirinacs, el activista que invocaba a Gandhi mientras denunciaba una conjura mundial de naturaleza jud¨ªa

La CUP logr¨® vetar la presidencia de Artur Mas para dar preferencia a Carles Puigdemont. Desde entonces, la gravitaci¨®n de la CUP ha ido afirm¨¢ndose, hasta el punto de que condiciona los Presupuestos de la Catalu?a business friendly y matriz de tantas start ups, para ir amenazando con dejar caer al actual Gobierno auton¨®mico porque no convoca ya un refer¨¦ndum ilegal. En fin, despu¨¦s de Artur Mas, la CUP ir¨¢ a por Puigdemont. Representa un anti-sistema salvaje y con gestos de kale borroka, como sucedi¨® en los disturbios de Gr¨¤cia y recientemente la okupaci¨®n de la sede del PPC. Para los tacticistas m¨¢s risue?os, en unas elecciones anticipadas Ada Colau va a engullir muchos votos de la CUP, con la inc¨®gnita del caos anticapitalista en las calles de Barcelona. Como dicen en la CUP, la primera l¨ªnea es la calle.
Significativamente, la CUP ha implantado a Llu¨ªs Maria Xirinacs como padre espiritual. ¡°El futuro se construye desobedeciendo¡±, dice la CUP. Como se ve, es una desobediencia que va desde la abolici¨®n del capital y el ahorro, escuelas sin autoridad magisterial o cortocircuitar los sem¨¢foros. Llam¨¦mosle institucionalizaci¨®n del colapso. Xirinacs viene a ser, a la vez, el faquir y el comisario. Al publicar La traici¨® dels l¨ªders en 1993, seleccion¨® una frase de Jacques Derrida: ¡°Cuando una responsabilidad se ejerce en nombre del orden de lo posible, comienza a hacerse irresponsable¡± .?Para qu¨¦ matizar entre la ¨¦tica de la convicci¨®n y la ¨¦tica de la responsabilidad?
Para que los Pa?sos Catalans ¡ªuna inanidad hist¨®rica, pol¨ªtica y econ¨®mica¡ª dejen de ser esclavos, seg¨²n propugna la CUP, el ejemplo de Xirinacs es definitorio. Crey¨® factible amalgamar la doctrina de Ghandi y el fervor hacia ETA. De hecho, como hace la CUP siguiendo su ejemplo, aparte de sentirse esclavizado por Espa?a, Xirinacs denunci¨® de forma repetida una gran conjura mundial de naturaleza jud¨ªa. Esa es una de las nociones predilectas del antisemitismo desde la aparici¨®n fraudulenta de Los protocolos de los sabios de Sion: la conspiraci¨®n jud¨ªa para dominar el mundo, como difundi¨® industrialmente Hitler antes de enviar a millones de enemigos de la raza aria a las c¨¢maras de gas.
Para Xirinacs, el eje de la conspiraci¨®n acababa siendo Kissinger, ¡°un h¨¤bil jueu¡± a quien en La traici¨® dels l¨ªders se considera protagonista del supuesto ultim¨¢tum a Carrero Blanco en la vigilia del atentado teledirigido por agentes norteamericanos que hac¨ªan sus pagos nada menos que en una librer¨ªa de Palma de Mallorca. Durante la historia de los imperialismos, siempre ha existido un gobierno mundial en la sombra, dice Xirinacs, citando El jud¨ªo internacional de Henry Ford, un cl¨¢sico ¡ªpor decirlo as¨ª¡ª del antisemitismo. Esa gran conspiraci¨®n mundial ¡ªla misma que la CUP ve moviendo los hilos de la diab¨®lica globalizaci¨®n¡ª hab¨ªa impulsado mal¨¦ficamente nada menos que el Plan Marshall, la recuperaci¨®n econ¨®mica de la Alemania Federal, la ONU, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
En otra gran revelaci¨®n de La traici¨® dels l¨ªders, el capitalismo norteamericano actuaba en Catalu?a por medio de Josep Tarradellas y de los tarradellistas. En este caso concreto, Xirinacs no especific¨® qui¨¦nes eran los ¡°h¨¢biles jud¨ªos¡± responsables de la macro-conspiraci¨®n. Es una p¨¢gina para la psicopatolog¨ªa. En el umbral del maragallismo en el poder, el exsenador Xirinacs reapareci¨® de nueve de la ma?ana a nueve de la noche en la plaza de Sant Jaume de Barcelona. Si la resistencia pasiva de Gandhi no logr¨® impedir la partici¨®n del Pakist¨¢n, Xirinacs invert¨ªa los t¨¦rminos en el intento de que todo culmine en una ¡°Asamblea de los Pa¨ªses Catalanes, generadora de la declaraci¨®n de independencia por v¨ªas ¨²nicamente solidarias y estrictamente no violentas¡±.
Tambi¨¦n la Assemblea Nacional de Catalunya reivindica la figura de Xirinacs. De hecho, seg¨²n diversas informaciones, la estrategia de protestas en caso de inhabilitaci¨®n de la actual presidenta del parlamento auton¨®mico, Carme Forcadell, se dice inspirada por la actitud de Xirinacs. ?l lo dijo en el Fossar de les Moreres, un 11 de setiembre de 2002: ¡°Declaro aqu¨ª, y lo digo bien alto por si hay polic¨ªa o alg¨²n fiscal: me declaro enemigo de Espa?a y amigo de ETA y de Batasuna. ETA no tortura. ETA mata a los que considera sus enemigos, pero no tortura¡±. Puro Ghandi. Entre Los protocolos de los sabios de Sion y la apolog¨ªa fan¨¢tica del terrorismo, Xirinacs ha buscado p¨®stumamente otro p¨²lpito. Es para decir: ¡°La calle es m¨ªa¡±.
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