El desalojo de la sucursal del Banco Expropiado pone en vilo a Gr¨¤cia
Los okupas anuncian que no se ir¨¢n voluntariamente del nuevo local, a 50 metros de la antigua sede
El pr¨®ximo 23 de mayo se cumple un a?o del desalojo del Banco Expropiado de Gr¨¤cia. Un desahucio que, durante semanas, convirti¨® las calles del barrio barcelon¨¦s en un campo de batalla entre okupas y Mossos d¡¯Esquadra. Doce meses despu¨¦s, los activistas del Banco Expropiado llaman a la movilizaci¨®n a sus simpatizantes, porque han recibido una nueva orden de desahucio. En esta ocasi¨®n, les ordenan desalojar la sucursal del Banco Expropiado.
El pasado 17 de agosto los activistas anunciaron la okupaci¨®n de un inmueble en el 173 de la travesera de Gr¨¤cia, a solo 50 metros de la antigua sede del Banco Expropiado. Los okupas accedieron al, segundo, local en plenas fiestas del barrio sabiendo que los Mossos no pod¨ªan programar un desalojo expr¨¦s poniendo en peligro a los miles de personas que celebraban verbenas. Al propietario de la Sucursal no le qued¨® otra que confiar en el proceso judicial para intentar recuperar su inmueble.
Los activistas del Banco Expropiado nunca han nombrado un portavoz y rechazan cualquier tipo de relaci¨®n con los medios de comunicaci¨®n. Han publicado, en las redes sociales, un comunicado informando a sus simpatizantes de que se encuentran envueltos en un proceso judicial que les llevar¨¢, de nuevo, a otro desahucio. Aseguran que a finales de marzo recibieron una notificaci¨®n del Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 32 de Barcelona, que les citaba a comparecer en un juicio de desahucio de la sucursal. Adem¨¢s, aseguran, el propietario del inmueble les exige 24.000 euros por los meses que han permanecido en el local, pide al juez que se le devuelva el inmueble y que se condene a los okupas a las costas del proceso.
Ning¨²n miembro del Banco Expropiado compareci¨® en los juzgados el d¨ªa de la vista oral. Los activistas consideran que ¡°la justicia no es un agente neutral en este conflicto. Como ya ha quedado demostrado en muchas ocasiones, la justicia obedece a los intereses de las clases dominantes¡±.
A finales de abril, el juez dict¨® sentencia: Obliga a los activistas a abandonar la sucursal, pagar las costas y, seg¨²n informan los okupas, a no ¡°inquietar o perturbar¡± a los propietarios cuando hayan? recuperado el local. Los activistas, quienes creen que el desalojo podr¨ªa producirse a principios de junio, justifican su acci¨®n por "la necesidad del Banco Expropiado de tener un espacio f¨ªsico donde desarrollar nuestra actividad pol¨ªtica y, a la vez, utilizar esta okupaci¨®n como herramienta para denunciar la especulaci¨®n inmobiliaria¡±. Acto seguido, el comunicado lo deja claro: ¡°Las diferentes formas que tenemos de responder a un desalojo sirven para visibilizar el conflicto que genera las desigualdades en las cuales se basa el sistema capitalista, Y es una forma de oponernos a la autoridad ejercida por el Estado y sus mecanismos, tanto judiciales como policiales¡±. Y a?aden: ¡°No abandonaremos el espacio y no nos iremos voluntariamente de la sucursal¡±.
En las pr¨®ximas semanas, dicen, publicar¨¢n informaci¨®n sobre sus propietarios, como hicieron con el? due?o del Banco Expropiado, del que fueron desalojados el 23 de mayo de 2016, cinco a?os despu¨¦s de haber entrado sin permiso en ese antiguo local de Catalunya Caixa. El barrio se convirti¨® desde entonces y hasta el 7 de junio en una campo de batalla. Despu¨¦s, el silencio, que se rompi¨® con la okupaci¨®n de la sucursal en agosto.
El domingo 27 de noviembre varias personas reokuparon el Banco Expropiado. Cinco horas despu¨¦s fueron desalojados todos los activistas menos uno, que consigui¨® esconderse y permaneci¨® all¨ª, agazapado, casi 72 horas sin que los Mossos lo detectasen.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.