Salvajismo rococ¨®

Cuando Igor Stravinsky estren¨® en 1913 La Consagraci¨®n de la Primavera el snob p¨²blico del Teatro de los Campos El¨ªseos de Par¨ªs se ech¨® las manos a la cabeza. Aquella noche hubo murmullos, gritos, quejas, silbidos y abandonos de la sala. El Par¨ªs de principios de siglo ¡ªa¨²n ajeno a las guerras¡ª no estaba preparado para aquella desmesura formal y para la osada concepci¨®n r¨ªtmica de un genio que acababa de cuestionar todo lo establecido. Realmente notable es que aquella obra, a d¨ªa de hoy, siga siendo un esc¨¢ndalo puro, tan rabiosamente moderna como cuando fue concebida. De su interpretaci¨®n de encargar¨¢ este jueves, a las 19.30, la Orquesta Sinf¨®nica de Radio Frankfurt en el Auditorio Nacional.

El programa necesitaba un equilibrio y por ello el conjunto y su director, el prometedor Andr¨¦s Orozco, han seleccionado como contrapunto al tribalismo de Stravinsky una pieza de su compatriota Chaikovski. Las Variaciones Rococ¨® son una pieza en la que el violonchelista se pone frente al p¨²blico para demostrar que puede con el m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa, un reto en esta ocasi¨®n para el exquisito Gautier Capu?on. No es solo una obra compleja por los requisitos t¨¦cnicos que demanda del m¨²sico, sino tambi¨¦n por el talento interpretativo que debe tener el violonchelista ante algunas de las variaciones, cargadas de un lirismo notable para el que el alma desnuda es m¨¢s una exigencia que una opci¨®n.

Como tercer pilar de esta monumental noche regresamos a los inicios de uno de los mejores compositores de la Historia: Beethoven. Dijo de ella un cr¨ªtico que era ¡°una caricatura de Haydn llevada hasta el absurdo¡±. No sabemos si al creador de Bonn le sent¨® bien la definici¨®n, pero lo cierto es que en la ?Sinfon¨ªa n¨²mero 1?de Beethoven hay mucho de su maestro Haydn. Y aunque hoy pueda parecer poco rompedora, esta obra fue en su d¨ªa un pulso a los m¨²sicos vieneses.