El ¡®goya¡¯ y el ¡®greco¡¯ de Mu?oz Ramonet se acercan a Barcelona
Un juez niega a Manuel Castelo, nieto del industrial, que pueda reclamar las obras
Si hay un pleito largo y enrevesado que tiene como protagonista el patrimonio, ese es el relacionado con la herencia de Julio Mu?oz Ramonet, el industrial textil que leg¨® en 1991 a Barcelona su palacio de la calle Muntaner y la importante colecci¨®n de arte que hab¨ªa en su interior. Despu¨¦s de un buen n¨²mero de sentencias, una de ellas del Tribunal Supremo en marzo de 2012, y de haber pasado 26 a?os desde el fallecimiento del empresario, las obras siguen en poder de sus cuatro hijas que se niegan a entregarlas a Barcelona. El pasado 8 de junio, una nueva sentencia ha vuelto a atizar un varapalo a las aspiraciones de la familia Mu?oz ya que el juez ha desestimado todas las alegaciones para no entregar dos de las obras m¨¢s destacadas y cotizadas del conjunto: La aparici¨®n de la Virgen del Pilar de Francisco de Goya y La Anunciaci¨®nde El Greco (valoradas en m¨¢s de 7,5 millones de euros las dos) que Manuel Castelo Mu?oz, nieto de Julio Mu?oz Ramonet reclamaba como suyas.
En otra vuelta de tuerca de las que tiene acostumbrados los descendientes de Mu?oz para retener la colecci¨®n de casi mil obras que don¨® el industrial a Barcelona; su nieto Manuel Castelo Mu?oz, hijo de la fot¨®grafa Isabel Mu?oz y de Jes¨²s Castelo, que ahora dirige gran parte de los negocios familiares, sobre todo inmobiliarios, hab¨ªa alegado que estas dos obras le pertenec¨ªan a ¨¦l y a dos de sus hijos, menores de edad, y no a las cuatro hijas de Mu?oz, ya que las hered¨® de su padre fallecido en 2010 a quien las hab¨ªa dado o vendido el empresario en compensaci¨®n por haberle prestado 225 millones de pesetas durante su exilio suizo. De esto se deriva que las dos obras no pertenec¨ªan al legado del industrial y por eso no se hab¨ªan entregado tal y como exige la ley.
Sin embargo, el juez, despu¨¦s de escuchar a las partes ha asegurado que ni Manuel Castelo ni su padre Jes¨²s Castelo han podido demostrar la propiedad, ni compraventa o pr¨¦stamo de los mismos, m¨¢s all¨¢ de la ¡°mera remisi¨®n a declaraciones efectuadas en otros procedimientos judiciales¡±. Tampoco se ha podido verificar que se pagaron por ellos los 225 millones que se ha asegurado en la demanda.
El juez pone de manifiesto las maniobras y actuaciones de Castelo y su madre, la fot¨®grafa Isabel Mu?oz, para mantener en secreto la ubicaci¨®n de las obras o evitar que pudieran ser recuperadas por el Ayuntamiento de Barcelona; le extra?a que en ning¨²n momento los cuadros se aseguraran por sus propietarios, tan solo para las cesiones para exposiciones y asegura que la documentaci¨®n aportada no prueba que los cuadros fueran de Manuel Castelo y que los pudiera dejar en herencia a su hijo y sus nietos.
Para el juez, si hab¨ªa relaci¨®n entre las obras y el exmarido de Isabel Mu?oz era por ¡°su condici¨®n de administrador de varias sociedades y gestor de los intereses de las mismas¡±, pero por nada m¨¢s.
Denuncias cruzadas
Tampoco ha tenido en cuenta el juez el derecho de usucapi¨®n que reclamaba el nieto de Mu?oz Ramonet, o lo que es lo mismo, la propiedad de los cuadros por posesi¨®n continuada del mismo durante seis a?os, ya que aseguraba estaban en su domicilio desde hace d¨¦cadas. Frente a eso, el letrado dice que, en efecto, constan posesiones en varios lugares y por varias personas: la empresa Culturarte, Jes¨²s Castelo, Isabel Mu?oz, Manuel Castelo y sus dos hijos; ¡°pero no una posesi¨®n de seis a?os ininterrumpida en concepto de due?o, ni siquiera acumulando las posesiones de padre e hijo o las del padre solo¡±. Y argumenta que cuesta reconocer que ¡°alguno de ellos haya realizado actos en concepto de due?o de los mismos¡±.
En un momento recuerda el juez que en el a?o 2000 se produjeron las denuncias cruzadas por robo entre Jes¨²s Castelo e Isabel Mu?oz, por lo que en ese momento no pod¨ªan estar en posesi¨®n de ninguno de los dos. El juez Guillem Soler, que en un momento de su sentencia asegura que ¡°la posesi¨®n material misma de los cuadros ha resultado un misterio complejo de resolver¡±, acaba desestimando la demanda y le impone el pago de las costas del juicio.
Eso s¨ª, la familia de Mu?oz Ramonet puede recurrir esta sentencia en un plazo de 20 d¨ªas, algo que seguro que har¨¢n como as¨ª han actuado desde que falleci¨® Mu?oz Ramonet, hace 26 a?os, siempre que la ley les ha quitado la raz¨®n.
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