El Rey pide en Barcelona ¡°trabajar juntos, en la misma direcci¨®n y sumar esfuerzos¡±
Felipe VI y Puigdemont coinciden en la conmemoraci¨®n del 25 aniversario de los Juegos Ol¨ªmpicos
El rey Felipe VI ha evocado este martes desde Barcelona el ejemplo de colaboraci¨®n entre todas las administraciones que hicieron posible los Juegos Ol¨ªmpicos de 1992 y reclam¨® la suma de esfuerzos para lograr un objetivo com¨²n del que se sienta orgullosa la sociedad. En el 25 aniversario de la inauguraci¨®n de los Juegos, el que fuera abanderado del equipo ol¨ªmpico espa?ol en 1992 abog¨® porque las instituciones trabajen juntas y remen en la misma direcci¨®n.
El monarca pas¨® la jornada de ayer en Barcelona, donde coincidi¨® con el presidente de la Generalitat en dos actos: el primero, por la ma?ana en Sant Cugat del Vall¨¨s, en el 30 aniversario del Centro de Alto Rendimiento (CAR) y horas despu¨¦s en una recepci¨®n en el Palacete Alb¨¦niz ofrecida por la alcaldesa Ada Colau, y a la que asistieron tambi¨¦n deportistas ol¨ªmpicos y paral¨ªmpicos.
El Rey aprovech¨® el acto institucional del CAR para lanzar su mensaje, en presencia de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa; del ministro de Educaci¨®n Cultura y Deporte, ??igo M¨¦ndez de Vigo, y de varios consejeros de la Generalitat, adem¨¢s de Carles Puigdemont.
¡°Los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona pusieron de relieve ante el mundo y ante nosotros mismos lo que somos capaces de hacer y los grandes ¨¦xitos que podemos conseguir cuando trabajamos juntos y en una misma direcci¨®n, cuando sumamos el esfuerzo de todos¡±, dijo Felipe VI en catal¨¢n.
¡°Porque los Juegos de Barcelona fueron justamente eso: el producto del esfuerzo, de la generosidad y del compromiso de todos; de la unidad de todos en torno a un proyecto que cont¨® con la colaboraci¨®n entre todas las administraciones¡±, a?adi¨®. Junto a ello, el Rey record¨® ¡°la aportaci¨®n invaluable de miles de personas y de voluntarios de Barcelona y de toda Espa?a¡±, adem¨¢s del ¡°empuje de un pueblo ilusionado que se sent¨ªa feliz y orgulloso¡±.
El monarca reafirm¨® su compromiso y convicci¨®n de que esa colaboraci¨®n entre administraciones es el ¨²nico camino para progresar. ¡°Todos juntos continuaremos nuestra trayectoria impulsando, mejorando y acrecentando el progreso que hemos sabido lograr durante d¨¦cadas de esfuerzo solidario, de esp¨ªritu de concordia y de confianza en el futuro¡±, insisti¨®.
¡°Unos Juegos de Invierno en nuestro pa¨ªs¡±
Lo desliz¨® por la ma?ana e insisti¨® por la tarde. Carles Puigdemont reiter¨® en su discurso institucional en el CAR el compromiso de Catalu?a con el olimpismo y desliz¨® la idea de ¡°poner la mirada en la posibilidad de acoger en el futuro una nueva cita ol¨ªmpica¡±.
En la recepci¨®n en el Palacete Alb¨¦niz fue m¨¢s expl¨ªcito: "El Gobierno de Catalu?a est¨¢ convencido de que estamos preparados par presentar una candidatura para organizar unos Juegos Ol¨ªmpicos de invierno en nuestro pa¨ªs y proyectarnos al mundo a trav¨¦s del deporte". En marzo, Barcelona descart¨® liderar una candidatura, pero abri¨® la puerta a que la lidere la Generalitat.
El acto transcurri¨® en un ambiente distendido y el ¨²nico incidente se produjo al iniciarse el discurso de Felipe VI, cuando un asistente se encaram¨® a una silla y exhibi¨® una bandera estelada. Los servicios de seguridad se la quitaron y posteriormente la misma persona mostr¨® un papel con la frase ¡°queremos votar¡±, en referencia al refer¨¦ndum previsto para el 1 de octubre
Antes de los discursos protocolarios, el Rey firm¨® en el libro de autoridades del CAR, como hizo su padre hace 25 a?os. El Centro de Alto Rendimiento fue una instalaci¨®n deportiva promovida por la Generalitat, inaugurada hace 30 a?os, y result¨® decisiva en la preparaci¨®n de los atletas espa?oles y los ¨¦xitos logrados en los Juegos de Barcelona. Un documental encargado por el Gobierno catal¨¢n sobre la importancia de esa instalaci¨®n se fue intercalando con los discursos institucionales. En la cinta se obvia cualquier referencia a Espa?a y las personas que aparecen resaltan la catalanidad de los Juegos.
En otro momento de su discurso, el Rey record¨® que en 1992 se celebraron tambi¨¦n la Exposici¨®n Universal de Sevilla y la Capitalidad Europea de la Cultura de Madrid, hechos que, seg¨²n dijo, no fueron ¡°fruto de la improvisaci¨®n o de una determinada coyuntura¡±, sino el resultado de la previsi¨®n y planificaci¨®n. Fueron tambi¨¦n el resultado de ¡°pensar en grande, en el inter¨¦s de un pa¨ªs y de una sociedad que afrontaba una apuesta crucial ante el mundo despu¨¦s de tan solo 15 a?os de democracia¡±, a?adi¨®.
Por su parte, Carles Puigdemont asegur¨® que ¡°la llama ol¨ªmpica que ilumin¨® la ilusi¨®n y el deporte simbolizan el compromiso que aglutina a las instituciones p¨²blicas y la sociedad civil para construir una sociedad mejor a trav¨¦s del deporte¡± y record¨® que Barcelona ya intent¨® celebrar los Juegos en 1924 y 1936. Estos ¨²ltimos se truncaron por la guerra civil espa?ola y la ¡°imposici¨®n de la intolerancia¡±, a?adi¨®.
¡°Pero la familia ol¨ªmpica catalana persever¨® y gracias a la implicaci¨®n de todos se cumpli¨® el objetivo y no decepcionamos¡±, insisti¨® el president. Y eso fue posible, dijo, por ¡°el compromiso, la lealtad y el cumplimiento de todas las administraciones¡±, apostill¨® Puigdemont, que en otro momento afirm¨® que ¡°Catalu?a siempre ha apostado por el respeto, el di¨¢logo y el pacto¡±.
El presidente de la Generalitat concluy¨® su discurso recordando que el catal¨¢n fue lengua oficial de los Juegos, y de ah¨ª que Catalu?a estar¨¢ siempre agradecida con el movimiento ol¨ªmpico porque abandera la paz y la libertad. El president emple¨® el catal¨¢n en casi todo su discurso, pero recurri¨® al castellano para lanzar un mensaje sobre lo que signific¨® aquella cita deportiva. ¡°Fueron los Juegos de todos y para todos, un reflejo exacto de la forma de ser y de actuar de Catalu?a y de su gente: acogedora, emprendedora e ilusionada, que siempre ha apostado por el multilateralismo¡±, dijo.
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