La galer¨ªa Alejandro Sales de Barcelona cierra tras 32 a?os
La clausura de la hist¨®rica sala se suma a una larga lista de desapariciones forzosas y visualiza la crisis que sacude el sector
Ma?ana ser¨¢ el ¨²ltimo d¨ªa de trabajo para Alejandro Sales en su galer¨ªa de la calle Juli¨¢n Romea de Barcelona. No es un cierre por vacaciones: Sales tira la toalla y se suma a una larga lista de galeristas obligados a dejar un negocio connotado por la pasi¨®n por un coctel letal de crisis econ¨®mica, falta de coleccionistas, presi¨®n fiscal y ausencia de incentivos para el mecenazgo y la proyecci¨®n internacional de las galer¨ªas. ¡°Barcelona se muere de ¨¦xito. La situaci¨®n de un turismo de perfil bajo ha ido degenerando hasta ser insostenible. La crisis econ¨®mica s¨®lo ha precipitado un desastre que empez¨® tras los Juegos Ol¨ªmpicos¡±, afirma Sales, rodeado de las obras de su ¨²ltima exposici¨®n Gran Collage, colectiva de los artistas de una galer¨ªa creada en 1985. ¡°Barcelona es m¨¢s conocida en el mundo, pero era mucho m¨¢s internacional hace 25 a?os¡±, afirma quien inici¨® su trayectoria en 1975 pate¨¢ndose los talleres de artistas.
Artur Ramon abandona la calle de la Palla por la presi¨®n tur¨ªstica
Otro galerista que se ha visto obligado a mudarse es Artur Ramon. "Cuando en 1942 mi abuelo abri¨® la galer¨ªa, la calle de la Palla estaba lleno de anticuarios y libreros. Ahora estamos rodeados de tienda de souvenirs y hordas de turistas", explica Ramon, que deja su hist¨®rico espacio cerca de la Catedral para irse a la calle Bail¨¦n, 19, "forzado por la transformaci¨®n de la ciudad". Ramon, que abrir¨¢ la nueva sala en noviembre, cree que s¨®lo sobrevivir¨¢n las galer¨ªas con proyecci¨®n internacional. "Estamos viviendo una gran transici¨®n, no es s¨®lo un fen¨®meno de cambio de sedes sino tambi¨¦n de modelo", asegura el galerista, que este a?o por primera vez participar¨¢ en la secci¨®n principal de la feria de Maastricht, la m¨¢s importante del sector. As¨ª, coincide con Alejandro Sales en que la escena barcelonesa se est¨¢ empobreciendo cada vez m¨¢s. "Cierran galer¨ªas capaces de mover piezas y artistas importantes, mientras que la nueva generaci¨®n aun no tiene la capacidad y los medios para hacerlo".
En su caso, el cierre se debe no s¨®lo a la coyuntura econ¨®mica, sino tambi¨¦n a la falta de inter¨¦s, sobretodo de las instituciones, por la pintura, g¨¦nero que ha privilegiado durante su carrera junto con la fotograf¨ªa, rigurosamente anal¨®gica y positivada por el autor. Lo explica en una carta que ha enviado a amigos y clientes, en la que lamenta la homogeneizaci¨®n de las tendencias representadas en los museos de arte contempor¨¢neo, su desinter¨¦s por la pintura y su af¨¢n por la novedad, que se refleja tambi¨¦n en las ferias. ¡°Si no nadas a favor de estas corrientes, corres el riesgo de que se te traguen las aguas. Siempre mostr¨¦ lo que me interes¨®, fuera de modas y tendencias, con un gui?o especial a la pintura, disciplina muy maltratada¡±, cree Sales.
Tampoco se corta a la hora de achacar responsabilidades: est¨¢ convencido de que el Museo de Arte Contempor¨¢neo de Barcelona (Macba) ¡°ha fallado¡± en su papel vertebrador y ¡°ha ninguneado a las galer¨ªas barcelonesas¡±, independientemente de quien fuese el director. ¡°Me han comprado obras museos de medio mundo, incluidos el Moma y el Reina Sof¨ªa, pero el Macba, nunca. Cuando hice la primera exposici¨®n de Anish Kapoor les ofrec¨ª piezas, pero las compraron en otra parte. El director actual sigue la misma senda: lleva dos a?os y ni siquiera se ha reunido con los galeristas¡±, lamenta Sales, que no descarta escribir un libro con las vivencias de tres d¨¦cadas presentando artistas como Mapplethorpe, Palazuelo, Chillida, Beuys, Lobato, Llim¨®s y tambi¨¦n a un joven Plensa ¡°aunque no s¨¦ porqu¨¦ ahora se niega a admitirlo¡±. ¡°Los galeristas somos una especie en extinci¨®n¡±, concluye Sales, que seguir¨¢ como marchante y asesor de colecciones.
Sales se suma a una lista de cierres de notables galer¨ªas en Barcelona en los ¨²ltimos a?os de la que forman parte, entre otros, Llucia Homs, que abandon¨® en 2009, Mar¨ªa Jos¨¦ Castellv¨ª (en 2010, tras 19 a?os de vida), Ren¨¦ Metras (2013) y Kowasa (2015).
La nueva ley de arrendamiento urbano dio el golpe de gracia al n¨²cleo hist¨®rico de Consejo de Ciento, obligando a las galer¨ªas que quedaban a trasladarse, como le ocurri¨® a la Carles Tach¨¦ (ahora detr¨¢s de CaixaForum) o la Senda (en la calle Trafalgar), mientras la Joan Prats dej¨® su m¨ªtico espacio de Rambla Catalunya para ir a una sala m¨¢s peque?a en la calle Balmes. ¡°Nos subieron el alquiler de casi diez veces. Nos obligaron a dejarlo. Adem¨¢s, en Barcelona falta un coleccionismo fuerte y la ausencia de un IVA cultural no ha ayudado a crearlo¡±, indica Patricia de Muga, directora de la Joan Prats, que ahora realiza los proyectos de grandes dimensiones o m¨¢s experimentales en un espacio de Poblenou antes almac¨¦n.
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