La Generalitat recauda un 30% menos de lo previsto con las bebidas azucaradas
La Agencia Tributaria de Catalu?a obtiene 22,7 millones de euros entre mayo y diciembre de 2017, cuando esperaba recaudar 31 millones en ese periodo
Uno de los nuevos impuestos del anterior Govern, el de las bebidas azucaradas, no ha cumplido con las expectativas. De mayo a diciembre de 2017, la Agencia Tributaria de Catalu?a recaud¨® 22,7 millones de euros en bebidas, lejos de los 31 millones que esperaba obtener desde la aprobaci¨®n de los presupuestos a finales de marzo. La ineficiencia de este ¡°impuesto imprudente¡± seg¨²n escribi¨® el propio Llu¨ªs Salvad¨®, exsecretario de Hacienda, en un correo intervenido por la Guardia Civil, se aparta de los buenos datos de recaudaci¨®n y de lucha contra el fraude.
La idea de instaurar un gravamen sobre refrescos, aguas de sabores, bebidas energ¨¦ticas o n¨¦ctares de fruta ¡ªquedaron fuera del impuesto los zumos naturales, las bebidas alcoh¨®licas o los refrescos sin az¨²car¡ª proviene de la ¨¦poca en que Andreu Mas-Colell era consejero de Econom¨ªa y Conocimiento de la Generalitat. Un tributo con argumentos sanitarios que permitir¨ªa obtener un ingreso extra para unas finanzas catalanas deprimidas por la crisis.
La idea de Mas-Colell top¨® con los recelos de la industria de las bebidas, cuya cifra de negocios, seg¨²n los ¨²ltimos datos, de 2015, fue de 2.968 millones de euros en Catalu?a. Incluso el ministerio de Hacienda de Crist¨®bal Montoro se plante¨® imponer este impuesto, aunque tampoco prosper¨®.
El tributo a las bebidas azucaradas no vio la luz en Catalu?a hasta la aprobaci¨®n de los presupuestos a finales de marzo de 2017, fruto de un acuerdo entre la CUP y Junts Pel S¨ª. El objetivo del Govern era recaudar 31 millones en 2017 a partir de la aprobaci¨®n de los presupuestos y 41 millones en un a?o completo.
El impuesto a las nucleares tambi¨¦n pincha
Adem¨¢s del impuesto a las bebidas azucaradas, el Gobierno de Carles Puigdemont tambi¨¦n cre¨® el tributo sobre el riesgo medioambiental de elementos radiot¨®xicos. Este pretend¨ªa sustituir al impuesto a las nucleares que fue suspendido por el Tribunal Constitucional. En los presupuestos, la Generalitat estim¨® que recaudar¨ªa en 2017 m¨¢s de 28 millones de euros, aunque finalmente los ingresos obtenidos han sido solo 7,4 millones, un 73,5% menos de lo previsto. El impuesto se implement¨® al aprobarse los presupuestos, pero el Tribunal Constitucional lo suspendi¨® a principios de 2018.
Finalmente, la Agencia Tributaria de Catalu?a recaud¨® el a?o pasado 22,7 millones, un 26,7% menos de lo previsto. La Generalitat explica esta circunstancia con el argumento de que el gravamen a los refrescos se inici¨® el 1 de mayo, un mes despu¨¦s de lo previsto. Adem¨¢s, seg¨²n el Ejecutivo, la cifra de 22,7 millones no es nada desde?able, teniendo en cuenta las dificultades con las que cualquier nuevo impuesto se implementa en la sociedad. En este caso, este gravamen implica un incremento de hasta el 7% en el precio de las latas de refresco, y la ley indica que tiene que ser el consumidor final el que abone el tributo. ¡°Es un impuesto disuasorio, el objetivo es que la gente deje de consumir estas bebidas. Si todo va como esperamos, es l¨®gico que se recaude menos cada a?o¡±, indican fuentes de la consejer¨ªa.
El gravamen a las bebidas azucaradas fue dise?ado en la secretar¨ªa de Hacienda que dirig¨ªa Llu¨ªs Salvad¨®, el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya que est¨¢ ahora bajo los focos por una conversaci¨®n machista. Esta charla telef¨®nica fue filtrada a los medios de comunicaci¨®n despu¨¦s de que su tel¨¦fono fuese intervenido por la Guardia Civil en el marco de la investigaci¨®n sobre el ex senador de ERC Santiago Vidal.
Precisamente, en otro documento incautado por la Guardia Civil y filtrado a la prensa, en este caso un correo electr¨®nico, Salvad¨® lamentaba la improvisaci¨®n con la que se hab¨ªan creado nuevos impuestos para obtener el s¨ª de la CUP a los presupuestos. ¡°Hemos asumido hacer un impuesto como el de las bebidas azucaradas sin tr¨¢mite de audiencia espec¨ªfica con los sectores afectados, con calendarios imprudentes. Lo hemos hecho en contra de los informes internos que dec¨ªan que esto no se aguantaba por ning¨²n lado y que mear¨ªamos sangre despu¨¦s. (...) Espero que el Constitucional lo suspenda, porque sino haremos un rid¨ªculo espantoso. (...) Lo que hemos hecho con las bebidas azucaradas no lo haremos m¨¢s¡±, se le¨ªa en el correo.
El deseo de Salvad¨® no se cumpli¨®: a pesar de las presiones de la industria alimentaria, el Gobierno central decidi¨® no recurrir este tributo al Tribunal Constitucional.
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