El apoyo a los presos del ¡®proc¨¦s¡¯ fractura a los sindicatos en Catalu?a
Las dos centrales sufren divisiones internas tras anunciar que participar¨¢n en la manifestaci¨®n de domingo en favor de los l¨ªderes independentistas
La crisis pol¨ªtica en Catalu?a ha tensado las costuras de los sindicatos CC OO y UGT, que en los ¨²ltimos tiempos han tenido que hacer equilibrios para encajar el aumento de los afiliados cercanos al independentismo. Su participaci¨®n como entidades convocantes, junto con ?mnium y ANC, en la manifestaci¨®n del pr¨®ximo d¨ªa 15 para protestar por el encarcelamiento de pol¨ªticos soberanistas ha profundizado en esta divisi¨®n interna y ha puesto en alerta a las c¨²pulas de Madrid. especialmente en UGT, que el pasado jueves celebr¨® una reuni¨®n para analizar la situaci¨®n.
La divisi¨®n que el proc¨¦sha generado en la sociedad catalana no solo se pone de manifiesto en el Parlamento catal¨¢n o en las calles, sino que tambi¨¦n se ha instalado en el seno de las organizaciones patronales y sindicatos. La manifestaci¨®n contra el encarcelamiento de los pol¨ªticos que est¨¢n en prisi¨®n preventiva, acusados de rebeli¨®n, sedici¨®n o malversaci¨®n ha ahondado en unas fracturas que se empezaron a notar desde que, en 2013, CC OO y UGT se mostraron partidarios del llamado ¡°derecho a decidir¡± y despu¨¦s por el refer¨¦ndum. La marcha del pr¨®ximo domingo se convoca desde algunas entidades con lemas como ¡°libertad para los presos pol¨ªticos¡± y ¡°el retorno de los exiliados¡±.
El pasado 3 de octubre, durante la huelga general independentista, los sindicatos, junto con organizaciones patronales, secundaron el llamado ¡°paro de pa¨ªs¡± para protestar contra la actuaci¨®n policial durante el refer¨¦ndum, lo cual tambi¨¦n molest¨® a algunos sectores del sindicato. La participaci¨®n de los afiliados en la huelga fue desigual: mientras que la funci¨®n p¨²blica secund¨® los paros, en la industria se minimizaron a descansos pactados con las empresas.
El hecho de que UGT y CC OO vayan de la mano de la Asamblea Nacional Catalana y ?mnium Cultural ha vuelto a hacer emerger el malestar entre sus afiliados y ha redoblado la tensi¨®n de las relaciones con Madrid. La crisis ha pasado sobre todo factura a UGT. Una carta de un delegado territorial se hizo viral en los grupos de whatsapp y una petici¨®n en change.org para que el sindicato se retirase de la manifestaci¨®n ha recogido ya m¨¢s de 17.000 firmas. El secretario general del sindicato, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez, tuvo que salir al paso y avalar la participaci¨®n de la central en la marcha, pero con matices. Si bien consider¨® un ¡°exceso¡± la prisi¨®n preventiva de los l¨ªderes independentistas, ?lvarez reclam¨® en una entrevista en La Sexta un gobierno ¡°transversal, constitucional y estatutario¡± en Catalu?a que procure que la comunidad vuelva a la ¡°normalidad¡±.
Es precisamente este mensaje el que, seg¨²n el presidente de UGT de Catalu?a, Mat¨ªas Carnero, no se ha explicado bien. ¡°No somos un sindicato independentista y esta convocatoria no es independentista, lo que pedimos es que haya un Gobierno de una pu?etera vez¡±. Ante el alud de cr¨ªticas, Carnero convoc¨® dos reuniones la semana pasada ¡ªla ¨²ltima el jueves¡ª para analizar la situaci¨®n junto a los l¨ªderes de las federaciones y consensuar un mensaje com¨²n.
Carnero, representante del sector de UGT m¨¢s pr¨®ximo al PSC ¡ªdel que provienen cuadros destacados de los socialistas como la diputada Eva Granados o el concejal en el Ayuntamiento de Barcelona Jaume Collboni¡ª, hace de contrapeso al sector m¨¢s cercano al independentismo, que tiene como m¨¢ximo representante a su secretario general, Camil Ros. De hecho, del sindicato proceden destacados dirigentes soberanistas, como las exconsejeras Neus Munt¨¦ o Dolors Bassa, esta ¨²ltima en prisi¨®n preventiva.
La situaci¨®n de Bassa hace m¨¢s complicada la posici¨®n del sindicato. De hecho, una carta a UGT de la hermana de la exconsejera, compa?era de Ros en la delegaci¨®n de Girona, ped¨ªa al sindicato que se posicionara en favor de los presos. ¡°No fue un chantaje emocional, hay que entender el dolor de la familia, y siempre hemos apoyado a la que fue nuestra compa?era¡±, destaca Carnero.
Fuentes sindicales, no obstante, se?alan que no pueden obviar el auge del independentismo dentro de sus organizaciones. Y mucho menos, razonan, cuando en las dos ¨²ltimas huelgas generales tomaron protagonismo centrales minoritarias como Intersindical, a la que no quieren regalar el espacio del soberanismo. Y es que CC OO constat¨® hace un a?o el aumento de los sindicalistas cercanos al independentismo. Seg¨²n una encuesta interna de la organizaci¨®n, los afiliados independentistas llegaban al 40% . Esto preocup¨® mucho a los grandes sindicatos.
¡°La situaci¨®n es complicada porque son organizaciones inevitablemente plurales, y es dif¨ªcil mantener la unidad¡±, explica Joan Botella, presidente de la asociaci¨®n Federalistes d'Esquerres, que agrupa a unos 700 sindicalistas de las dos grandes centrales y a independientes. En el otro lado est¨¢ la plataforma Indepes de CC OO, que con 800 asociados presiona a la direcci¨®n para hacer constar sus reivindicaciones. ¡°Hace tiempo que esto no va de independencia, va de democracia, por eso nos sentimos muy representados en la manifestaci¨®n del pr¨®ximo 15 de abril¡±, afirma Baptista Silanes, miembro de esta plataforma.
La protesta del pr¨®ximo domingo en Barcelona est¨¢ convocada por la llamada Plataforma Espacio Democracia y Convivencia que ech¨® a andar el pasado 24 de marzo despu¨¦s de que volvieran a ingresar en prisi¨®n preventiva buena parte de los antiguos miembros del gobierno catal¨¢n. El grupo impulsor de esta plataforma est¨¢ constituido por la Asamblea Nacional Catalana, el Consejo de la Juvetud de Barcelona, Comisiones Orberas, UGT, el sindicato USOC y ?mnium Cultural entre otros.
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