Dal¨ª es inmortal

¡°?A qu¨¦ tiene miedo se?or Dal¨ª?¡±, le pregunt¨® una periodista al pintor de Figueres en 1970: ¡°Solo a la muerte. Me horroriza la muerte¡±. A Salvador Dal¨ª no le gustaba hablar del tema. ¡°Yo no creo en mi propia muerte¡±, lleg¨® a decir. Tampoco a Gala. A la pareja les causaba una gran impresi¨®n la muerte y delante de ellos era imposible hacer referencia al tema, ni mencionar que alguien hab¨ªa fallecido en Cadaqu¨¦s, tal y como recuerdan algunos de los que vivieron junto a ellos en Portlligat. El miedo de Dal¨ª era tal que cuando pasaba por delante del cementerio donde estaba enterrado su padre desde 1950, le dec¨ªa a su ch¨®fer: ¡°Arturo, ?pasa deprisa, pasa deprisa!¡±. Dal¨ª luch¨® durante toda su vida por conseguir que la muerte no le alcanzase, marcado desde el primer momento por el hecho de que hab¨ªa nacido con la sombra de un hermano mayor que no conoci¨® porque muri¨® antes de que naciera el pintor, pero del que hered¨® su nombre Salvador.

La vida m¨¢s all¨¢ de la muerte que cultiv¨® el artista en sus pinturas y en sus escritos es el tema del documental Salvador Dal¨ª. En busca de la inmortalidad que ha producido la Fundaci¨®n Gala-Salvador Dal¨ª y que podr¨¢ verse en casi 70 salas de toda Espa?a, 15 de ellos catalanes, hoy y los d¨ªas 19 y 20 de abril. Tambi¨¦n podr¨¢ verse en fechas pr¨®ximas en pa¨ªses como Francia, Reino Unido, Italia, Canad¨¢, Ecuador, M¨¦xico y China, que ya han adquirido los derechos.

La cinta, de casi dos horas de duraci¨®n, es un recorrido vital desde 1929 en el que Dal¨ª conoce a Gala y aterriza en Par¨ªs y se hace clave en el movimiento surrealista hasta su fallecimiento f¨ªsico en 1989. Se ha planteado como un di¨¢logo entre Montse Aguer, directora de los Museos Dal¨ª y del Centro de Estudios Dalinianos y Jordi Artigas, responsable de las casa-museos de Portlligat y P¨²bol en presencia del director de la cinta David Pujol (DocDoc Films). Los tres recorren los principales escenarios dalinianos, desde la casa de Portlligat construida a partir de una peque?a barraca que fue creciendo ¡°como una verdadera estructura biol¨®gica¡­ A cada nuevo impulso de nuestra vida le correspond¨ªa una nueva c¨¦lula, una habitaci¨®n¡±. La casa crec¨ªa y la vida de Dal¨ª y Gala era cada vez m¨¢s compleja y popular. El documental, profusamente ilustrado con cientos de las fotograf¨ªas que Gala reuni¨® y conserv¨® a lo largo de su larga vida, muchas de las cuales son in¨¦ditas, cuenta con las voces de Dal¨ª a partir de los textos escritos por ¨¦l, sobre todo en La Vida Secreta de Salvador Dal¨ª, pero tambi¨¦n de su hermana Ana Maria, de Gala o del constructor Emili Puignau que trabaj¨® durante a?os, para conseguir que la primigenia barraca acabara siendo la vivienda que conocemos hoy.

El documental, de factura esteticista, hace incidencia en tres de las historias de amor de Dal¨ª, seg¨²n Pujol: ¡°el paisaje, la pintura y Gala¡±. La c¨¢mara, con impresionantes vistas cenitales, recorre los parajes del Cap de Creus que pint¨® de forma incansable Dal¨ª. ¡°Me s¨¦ de memoria todos los contornos de las rocas y las playas de Cadaqu¨¦s, todas las anomal¨ªas geol¨®gicas de su paisaje ¨²nico y su luz¡­ Yo no soy el hombre que rob¨® un paisaje. El paisaje me rob¨® a m¨ª¡±, escribi¨® y puede escucharse en off durante el documental que remarca la faceta m¨¢s humana e ¨ªntima del artista por encima de la t¨®pica llena de histrionismo del personaje Dal¨ª.

Papel activo de Gala

De Portlligat se pasa a P¨²bol, el castillo que regal¨® Dal¨ª a su musa, en el que ella, haciendo uso de su concepto de amor cort¨¦s, solo permit¨ªa el acceso de su pareja previa invitaci¨®n, cuya adaptaci¨®n y reforma se explica de forma pormenorizada. Y termina, como la vida de Dal¨ª, en Torre Galatea y el Teatro Museo de Figueres. Entre los testimonios que aparecen en la pel¨ªcula, el de Antonio Pitxot que acompa?¨® a Dal¨ª hasta su muerte, la especialista Estrella de Diego, que reivindica el papel activo de Gala en la popularidad y reconocimiento de Dal¨ª, un aspecto que ser¨¢ el eje central de la exposici¨®n que ella comisar¨ªa para el MNAC y que se inaugura en julio.

La Fundaci¨®n Dal¨ª ya produce un nuevo trabajo audiovisual centrado en la juventud del pintor que se estrenar¨ªa, posiblemente, en 2019, coincidiendo con los 40 a?os de la muerte del pintor. Porque Dal¨ª falleci¨® en 1989, pero su obra no. Dan fe los 1,4 millones de personas que visitaron Portlligat, P¨²bol y el Museo de Figueres en 2017 ¡ªo cualquiera de las exposiciones en las que hay obras de este artista¡ª, que hacen largas colas para admirar sus ingeniosas creaciones, tal y como se muestra en los cr¨¦ditos finales de la pel¨ªcula. Por eso, si tenemos en cuenta la sentencia cl¨¢sica de que alguien vive mientras se hable de ¨¦l, Dal¨ª es inmortal.