Un partido en ¡®shock¡¯ v¨ªctima de s¨ª mismo

Tras 35 d¨ªas de crisis por el caso m¨¢ster, con el abrupto remate del v¨ªdeo que precipit¨® la salida de su jefa de filas, en el grupo popular de la Asamblea de Madrid han perdido la capacidad de asombro. El golpe ha sido de tal calibre que ni los m¨¢s pr¨®ximos a Cifuentes se atreven a pronosticar c¨®mo podr¨¢n superar la crisis. ¡°La procesi¨®n va por dentro¡±, describe uno de los diputados que el viernes pasado asisti¨® a la primera reuni¨®n del grupo parlamentario con el equipo de Gobierno convocada por ?ngel Garrido, l¨ªder en funciones del Ejecutivo regional y del partido a la espera de los movimientos de la direcci¨®n nacional.

La reuni¨®n en la C¨¢mara auton¨®mica transcurri¨® entre caras largas y sin intervenciones de los diputados. El encuentro no dur¨® mucho, apenas una hora. El presidente interino se esforz¨® en hacer calar entre los 48 diputados la imagen de un grupo unido y compacto que debe seguir as¨ª hasta el final de legislatura, cumpliendo su programa electoral. Tambi¨¦n intervino en la misma l¨ªnea el portavoz del grupo, Enrique Ossorio, uno de los nombres que junto al propio Garrido y el consejero Pedro Roll¨¢n han sonado como presidenciables en las quinielas. Qued¨® claro que todo el esfuerzo se dirige estos d¨ªas a acallar las voces discrepantes.

Pero incluso entre los m¨¢s firmes defensores de Cifuentes se ha instalado el des¨¢nimo. ¡°Todos estamos muy dolidos con lo que ha pasado¡±, comenta un parlamentario que prefiere no dar su nombre. ¡°Tendremos que aprender de los errores y tomar decisiones, lo que est¨¢ claro es que se abre una nueva etapa¡±, a?ade.

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¡°Todo depende del candidato que designe G¨¦nova y no estar¨ªa mal que se consultara a los diputados m¨¢s veteranos para encontrar a una persona que no despierte los recelos o la animadversi¨®n de los dem¨¢s¡±, advierte otro parlamentario. ¡°Entusiasmo no hay¡±, a?ade, ¡°hay consternaci¨®n. Algunos ya advertimos de que determinadas formas de actuar no eran el mejor camino¡±, opina en referencia a uno de los ¨²ltimos movimientos de Cifuentes en plena huida por el caso m¨¢ster: la entrega a la Fiscal¨ªa por parte del Gobierno de dos expedientes; uno sobre la expansi¨®n del Canal de Isabel II en Latinoam¨¦rica y otro, hace solo unos d¨ªas, sobre el posible desfalco de decenas de millones de euros en la fallida Ciudad de la Justicia. Ambas actuaciones fueron lideradas por sus antecesores y compa?eros de filas en el gobierno de la Comunidad. ¡°Una cosa es que te encuentres una informaci¨®n conflictiva y la remitas a la Fiscal¨ªa, y otra envolverte en la bandera de la lucha contra la corrupci¨®n¡±, sentencia la misma fuente.

El jueves pasado, con el cad¨¢ver pol¨ªtico de Cristina Cifuentes a¨²n caliente, el juez del caso Lezo citaba como investigado al expresidente de la Comunidad y exministro Alberto Ruiz-Gallard¨®n para que explique la compra de empresas en Latinoam¨¦rica por el Canal de Isabel II con dinero p¨²blico. ¡°Estamos frustrados, esto es defenderse todos los d¨ªas de un volquete de porquer¨ªa en el que se nos mete a todos en el mismo saco y no hacemos otra cosa¡±, se desahogaba otro diputado del grupo popular regional que ve la salida del pozo en el que se encuentran ¡°muy negra¡±.

Con la bandera de la regeneraci¨®n interna de nuevo por los suelos, Cifuentes deja al anta?o imbatible PP de Madrid sin rumbo, acosado por la corrupci¨®n e intervenido por la direcci¨®n nacional. En esta plaza electoral clave en la que nadie se hab¨ªa preparado para activar un plan b, urge dar con la persona que al menos ayude a salvar los muebles hasta que finalice la legislatura. Una elecci¨®n que habr¨¢ que hacer con cabeza, advierte otro diputado, ¡°porque tiene por delante un a?o que va a ser muy importante para preparar el camino al candidato que encabece las listas en las elecciones de 2019¡±. Todo ello en un contexto que las ¨²ltimas encuestas no dibujan muy prometedor, con Ciudadanos en ascenso y la presi¨®n creciente de las formaciones de izquierdas.

Quien herede ese tim¨®n deber¨¢ hacer frente tambi¨¦n a la par¨¢lisis de facto que el Gobierno regional y la Asamblea vienen padeciendo desde que hace un mes y una semana estall¨® el caso m¨¢ster, con el factor a?adido de que la expresidenta asistir¨¢ a los acontecimientos desde uno de los esca?os del grupo popular, lo ¨²nico que conserva tras la tormenta que la borr¨® del mapa.