Fallece a los 74 a?os Carles Canut, un icono del teatro catal¨¢n

Nadie que lo conociera dejar¨¢ de sentir profundamente hoy la muerte de Carles Canut como la de un amigo. Gran actor de los de antes y los de siempre, caracter¨ªstico de lujo, apasionado de los escenarios y de la vida, bon vivant y excelente persona, Canut (Gerri de la Sal, Lleida, 1944) era uno de los rostros m¨¢s populares de la escena catalana, donde ha hecho de todo y con todos, y un personaje que trascend¨ªa sus apariciones en teatro y televisi¨®n -en la que se granje¨® fama en series de TV3 como Vost¨¨ jutja, donde encarnaba a Rafeques- para convertirse en alguien familiar.

Director desde el pasado abril del Teatre Romea de Barcelona, Canut, que luchaba contra el c¨¢ncer, ya no estuvo presente en la presentaci¨®n de temporada de los teatros del grupo Focus a inicios de este septiembre. El actor era tambi¨¦n director de la Fundaci¨®n Romea para las artes esc¨¦nicas, asesor de contenidos de Focus y miembro de su comit¨¦ de lectura de nuevos textos y proyectos.

En el Romea precisamente, un espacio que siempre estuvo vinculado a su memoria profesional, y de la mano del entonces director del teatro Calixto Bieito, Carles Canut vivi¨® una ¨¦poca fecunda de actor en espect¨¢culos como Macbeth (2002), La ¨®pera de cuatro cuartos (2002), El rei Lear (2004), Peer Gynt (2006), Plataforma, sobre la novela de Houllebecq (2006) -con la que obtuvo el Max al mejor actor de reparto en 2008- y Tirant lo Blanc (2007)."He hecho 12 montajes con Calixto Bieito y he sobrevivido", bromeaba.

Recientemente hab¨ªa interpretado Las bruixes de Salem, dirigido por Andr¨¦s Lima, S¨®crates, juicio y muerte de un ciudadano, con Mario Gas, La taverna dels bufons, en la que interpretaban ¨¦l y Joan Pera a dos entra?ables bufones shakespearianos, y, este mismo a?o, Adossats, de Ramon Madaula.

Ese ha sido solo el tramo final de una dilatad¨ªsima carrera que arranc¨® en 1963 y que incluye -adem¨¢s de una larga estancia en Venezuela- un centenar de montajes de teatro bajo directores como, entre otros muchos,Alfonso Marsillach, Jorge Lavelli,? Ariel Garc¨ªa Vald¨¦s, ?lex Rigola, Xavier Albert¨ª, Joan Oll¨¦, o los citados Gas y Bieito. En el Romea actu¨® por primera vez en 1968, travestido en El deseo cogido por la cola.

Canut fue ocasionalmente tambi¨¦n director (le impon¨ªa mucho respeto hacerlo), hizo doblaje y cine (El caballero del drag¨®n, Makinavaja). Recibi¨® la Creu de Sant Jordi en 2016. Dotado de un f¨ªsico rotundo y una voz imponente, no pasaba desapercibido en el escenario hiciera lo que hiciera y muchas veces su sola presencia cautivaba a los espectadores.

Su apariencia ruda y su tono seco, directo y extempor¨¢neo a veces (la diplomacia no era lo suyo), adem¨¢s de su vozarr¨®n, recubr¨ªan un car¨¢cter amable y tremendamente generoso. Persona de gran coraz¨®n y de una fidelidad extrema a sus amistades, Canut disfrutaba especialmente de la vida en la mesa, comiendo o jugando al domin¨®.? En La taverna dels bufons, reivindicaba junto a Pera a los grandes secundarios del teatro, aguardando en un limbo a Shakespeare para ajustar cuentas y lograr la redenci¨®n a trav¨¦s de un ¨²ltimo papel. Es tentador imaginar a Carles Canut en un lugar semejante donde se encuentre lo realmente mejor y m¨¢s puro del teatro y su figura de Falstaff de casa reine para siempre.