Colau promueve los entierros ¡®low cost¡¯ ante el fiasco de una funeraria p¨²blica

El gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que no ha conseguido apoyo pol¨ªtico para crear una funeraria p¨²blica, insiste en plantar cara a los operadores privados y en alertar a la ciudadan¨ªa de que enterrar a sus familiares puede ser m¨¢s econ¨®mico de los 6.000 euros que cuestan de media. De ah¨ª que impulse un protocolo de "buenas pr¨¢cticas en informaci¨®n sobre servicios funerarios". Para entendernos: que cuando una persona muera, los profesionales o sanitarios que atiendan a la familia informen de cu¨¢les son sus derechos y tarifas b¨¢sicas antes de que les atienda una funeraria. Que sepan que por 2.300 o 2.500 euros se puede enterrar, aunque sin velatorio ni ceremonia.

De estas cantidades, 1.800 euros corresponden a los servicios obligatorios de las funerarias (recogida y preparaci¨®n de la persona fallecida, ata¨²d y traslado hasta el cementerio o el crematorio). Sobre el resto, en caso de que la familia disponga de un nicho, el entierro cuesta 500 euros y si se quiere incinerar al fallecido, 700. Entierro o incineraci¨®n son dos servicios que ofrecen los cementerios municipales.

?El concejal de presidencia, Eloi Badia, ha recordado la existencia de informes que aseguran que los entierros en la ciudad pueden costar m¨¢s de 6.000 euros y que en verano pasado el Ayuntamiento consigui¨® pactar con las funerarias tarifas bonificadas en funci¨®n de la renta. De los trabajos para crear una funeraria y el debate que se cre¨®, Badia ha subrayado este mi¨¦rcoles que surgi¨® la idea de "garantizar m¨¦todos con informaci¨®n m¨¢s transparente que evitara pr¨¢cticas como el dirigismo" a los dos operadores de la ciudad, Altima y M¨¦mora.

"Informar claramente de que se pueden ofrecer servicios funerarios [sin entierro] por 2.000 euros o con velatorio por 3.000, o de que hay tarifas bonificadas", ha dicho Badia. Y ha afirmado que ¡°lo que hubiera permitido resolverlo todo de una vez era la funeraria, un proyecto que sigue sobre la mesa¡±.

Desde el sector, Josep Ventura, de Altima, ha destacado que el consistorio ya dispone de ¡°herramientas para garantizar unas buenas pr¨¢cticas sin necesidad de establecer protocolos paralelos¡±. La ordenanza de Servicios Funerarios ya permite multar si se detectan malas praxis, ha afirmado la empresa.

El protocolo hace constar que los ciudadanos tienen derecho a tener "informaci¨®n sobre las empresas que operan con independencia de donde se ha producido la defunci¨®n o donde se quiere hacer el entierro o incineraci¨®n, sin tratos preferenciales desde un centro o servicio hacia una o m¨¢s empresas". Tambi¨¦n establece que se explicar¨¢ a los ciudadanos "cu¨¢les son los servicios considerados obligatorios y cuales los opcionales". Y por ¨²ltimo, a las familias que tienen un seguro de defunci¨®n, se les informar¨¢ de que si el entierro que realizan es m¨¢s econ¨®mico del que tienen contratado, pueden pedir que les devuelvan dinero.

La teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laia Ortiz, ve imprescindible el protocolo porque, argumenta, "en un momento de vulnerabilidad, la falta de informaci¨®n a?ade mayor vulnerabilidad, la informaci¨®n es importante". Ortiz ha explicado que los primeros en utilizar el protocolo ser¨¢n los servicios municipales: servicios para personas mayores, residencias y trabajadores sociales. En el futuro, el protocolo se extender¨¢ a los centros sanitarios.

La S¨ªndica de Barcelona, Maria Assumpci¨® Vil¨¤, celebr¨® el protocolo, porque ¡°asegura la transparencia y competencia¡± y record¨® que desde 2015 ha recibido unas treinta quejas sobre el elevado coste de los servicios funerarios en la ciudad.