El Gran Hermano de Madrid te multa pero no resuelve atropellos

En la era de las fotomultas por pasar un sem¨¢foro en rojo o superar la velocidad permitida todav¨ªa quedan conductores impunes tras darse a la fuga despu¨¦s de un atropello mortal en el centro de Madrid.

Lo hizo a plena luz del d¨ªa el conductor de un coche que golpe¨® mortalmente al joven motorista de 21 a?os Iv¨¢n Garc¨ªa el 20 de julio a las 15.03 en el tramo de la calle Alcal¨¢ entre la plaza de Manuel Becerra y la plaza de toros de Las Ventas.

Era hora punta de un viernes y miles de madrile?os se dispon¨ªan a abandonar la ciudad para disfrutar de un fin de semana de sol. En la calle cercana a la M-30 hab¨ªa numerosos testigos pero se dieron una serie de circunstancias que favorecieron la fuga, entre ellas que una c¨¢mara de control de tr¨¢fico orientada hacia el lugar del atropello, una de las 273 que el Ayuntamiento tiene por la ciudad, no sirve para grabar.

El coche se perdi¨® de vista en direcci¨®n centro sin que decenas de peatones, comerciantes y conductores lograran identificar ni la matr¨ªcula ni el modelo. El cuponero F¨¦lix Santamar¨ªa, cuyo kiosko de la ONCE se encuentra en la esquina por la que desapareci¨® el veh¨ªculo, se hab¨ªa ido a comer media hora antes. El ¨®ptico David Monteser¨ªn, en el campo de visi¨®n del suceso, acababa de echar el cierre met¨¢lico.

¡°O¨ª el golpe y vi salir a la gente de los coches¡±, dice Monteser¨ªn que en su mostrador tiene un bot¨®n para activar el cierre met¨¢lico de su ¨®ptica. ¡°Quiz¨¢s vi pasar el coche pero no fui consciente de que se trataba del culpable¡±.

Lo primero que hicieron varios testigos fue acudir al auxilio de Iv¨¢n, sin reparar en el veh¨ªculo que hu¨ªa. El joven acababa de salir del trabajo en un concesionario de Mercedes-Benz cercano, donde solo llevaba una semana de empleado, y se dirig¨ªa a su casa en Carabanchel para almorzar con sus padres. Iba a 40 kil¨®metros por hora cuando perdi¨® el control de su Aprilia RS de 125 cent¨ªmetros c¨²bicos e invadi¨® el carril contrario, desliz¨¢ndose durante 17 metros hasta que se produjo el atropello, seg¨²n el atestado.

El casco integral que portaba no le salv¨®. Falleci¨® por la fuerte lesi¨®n cerebral causada por el golpe con el veh¨ªculo que huy¨®. Uno de los conductores que vio la escena les dijo a los agentes que el coche aceler¨® tras el golpe. Lo ¨²nico que pudo describir del veh¨ªculo es que ten¨ªa color oscuro.

La polic¨ªa municipal informa de que su investigaci¨®n no ha dado resultados positivos, a diferencia de muchas otras en circunstancias semejantes. ¡°Se han buscado testigos y se ha intentado recabar cualquier dato de cualquier dispositivo de grabaci¨®n, como se ha hecho en otros casos en los que, gracias a c¨¢maras de comercios particulares, se pudo identificar el veh¨ªculo que provoc¨® el atropello¡±, dice por correo un portavoz.

La familia aprecia la labor de la polic¨ªa aunque no entiende por qu¨¦ la c¨¢mara del Ayuntamiento dirigida hacia el lugar del atropello no lo grab¨®. El padre, Antonio Garc¨ªa, dice que no desaprovech¨® la oportunidad para pregunt¨¢rselo directamente a la concejala de Movilidad, In¨¦s Saban¨¦s, cuando coincidi¨® con ella el 18 de noviembre en la plaza de Santa Ana, durante la celebraci¨®n del D¨ªa mundial en Recuerdo de las V¨ªctimas de Accidentes de Tr¨¢fico. Seg¨²n Garc¨ªa, la concejala le explic¨® que la ley les impide grabarlo todo.

Pero seg¨²n la Agencia de Protecci¨®n de Datos, la ley no impide a las autoridades municipales grabar im¨¢genes de la v¨ªa p¨²blica siempre que respeten la confidencialidad y se informe a los ciudadanos de su presencia. En el caso de los comercios las limitaciones son mayores. Solo pueden tomar im¨¢genes de la calle cuando sea imprescindible para fines de vigilancia o resulte imposible evitarlo.

En el centro de Madrid hay c¨¢maras municipales de videovigilancia se?alizadas con carteles en los entornos de Gran V¨ªa, Azca, Plaza Mayor, Puerta del Sol y la Castellana. Adem¨¢s, el Ayuntamiento informa en su web de movilidad que dispone de 273 c¨¢maras de control de tr¨¢fico, entre ellas la que se encuentra en Manuel Becerra. Pero no almacenan im¨¢genes, seg¨²n una portavoz municipal. El Ayuntamiento las usa para observar el tr¨¢fico y tomar medidas de ordenaci¨®n en caso de atascos.

Una fotograf¨ªa de esa c¨¢mara a las 15.53 puede verse en un tuit del centro de Gesti¨®n de la Movilidad informando de retenciones en la zona. La imagen muestra el hospital de campa?a del Samur, polic¨ªas y ambulancias. Los enfermeros trataron de reanimar a Iv¨¢n hasta las 16.00, hora en que certificaron su muerte.

Otras c¨¢maras de tr¨¢fico s¨ª graban im¨¢genes y est¨¢n siendo usadas para atrapar a conductores que se dan a la fuga. Las m¨¢s de 1.000 c¨¢maras que la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico tiene por autov¨ªas de todo el pa¨ªs graban las 24 horas del d¨ªa desde hace casi dos a?os, seg¨²n un portavoz, que indica que anteriormente no se hac¨ªa por limitaciones tecnol¨®gicas. Otros municipios de la regi¨®n de Madrid tienen c¨¢maras de tr¨¢fico que graban. Un mando de polic¨ªa municipal de una localidad de la periferia de Madrid reconoce que se necesita inversi¨®n para almacenar esa informaci¨®n.

En Madrid se suelen producir entre 1.500 y 1.600 atropellos anualmente, de acuerdo con la serie del Ayuntamiento con los datos de 2009 a 2016. Solo en una minor¨ªa de casos el conductor se da a la fuga, seg¨²n abogados de v¨ªctimas de accidentes de tr¨¢fico. En esos atropellos con huida, el conductor normalmente no para por estar bebido o no tener seguro.

Los abogados de accidentes de tr¨¢fico dicen que las c¨¢maras, incluso las que se instalan sobre el salpicadero, se han convertido en una herramienta clave en cada vez m¨¢s juicios. Los l¨ªmites para proteger datos personales han desatado el debate ya que algunos creen que la utilidad de las grabaciones para resolver presuntos delitos deber¨ªa prevalecer sobre la intimidad.

¡°Videovigilar todas las zonas de una ciudad es pr¨¢cticamente imposible pero con las c¨¢maras evitar¨ªamos muchos delitos que no se esclarecen¡±, dice el presidente de la Asociaci¨®n de Abogados de V¨ªctimas de Responsabilidad Civil (Adevi), Manuel Temboury. Cuando no hay im¨¢genes, los testigos en calles muy transitadas como es el caso de Alcal¨¢ suelen aportar informaci¨®n ¨²til.

¡°Este es un caso rar¨ªsimo, fruto de la mala suerte¡±, responde a una consulta de este peri¨®dico el presidente de la Asociaci¨®n Nacional de V¨ªctimas de Accidentes de Tr¨¢fico, Manuel Castellanos. ¡°La mayor¨ªa de los atropellos con fuga en Madrid se resuelven a no ser que se produzcan de noche en una calle peque?a¡±.

La familia de Iv¨¢n no ha perdido la esperanza de que alguien aporte nueva informaci¨®n o que aparezca por voluntad propia el autor del atropello. Han pegado carteles, acudido a plat¨®s de televisi¨®n y estudios de radio para reclamar la colaboraci¨®n ciudadana. Quieren cerrar su duelo y dejar de preguntarse por qu¨¦ el coche no par¨®. ¡°La vida de nuestro hijo no nos la van a devolver, pero queremos saber qu¨¦ pas¨® para poder descansar en paz¡±, dice su madre, Rosario P¨¦rez.

La mejor opci¨®n de la familia pasa por unas im¨¢genes de baja calidad captadas por unas c¨¢maras de vigilancia en la esquina el edificio que coordina la respuesta a emergencias del Ayuntamiento. Las c¨¢maras se encuentran a unas pocas decenas de metros del lugar del atropello y captaron el paso de seis coches de color oscuro en los segundos posteriores, seg¨²n el padre de Iv¨¢n.

El juez envi¨® la semana pasada las im¨¢genes al departamento de investigaci¨®n criminal de la Guardia Civil para que trate de aumentar la resoluci¨®n y se puedan distinguir las matr¨ªculas y modelos, seg¨²n el padre. La Guardia Civil no respondi¨® a una solicitud de este peri¨®dico para conocer las posibilidades de ¨¦xito de esta t¨¦cnica.

¡°Estamos aferrados a eso. Es la ¨²nica esperanza que nos queda¡±, dice Antonio Garc¨ªa. Su hijo era su mejor amigo. Iv¨¢n hab¨ªa heredado la afici¨®n por las motos y desde peque?o hab¨ªa competido en circuitos. Con su padre hab¨ªa hecho rutas en moto por los Alpes o el S¨¢hara.

A las tres semanas del accidente, en medio del dolor por la p¨¦rdida, recibi¨® una carta del Ayuntamiento. Era una multa por exceso de velocidad en la M-30. Para ¨¦l fue indignante, no porque la multa fuera inapropiada, sino por la precisi¨®n con que pudo verse en la foto. ¡°Sientes cabreo porque para recaudar s¨ª que invierten en dinero¡±.