M¨¢s que el impresor de Dau al Set

No sabemos qu¨¦ habr¨ªan dicho los responsables del MoMA de Nueva York si hubieran sabido que la revista Dau al Set, para ellos la mejor publicaci¨®n realizada en Europa en los a?os cincuenta, se imprim¨ªa con una peque?a imprenta de andar por casa. Esa m¨¢quina, con la que se cre¨® una de las revistas m¨¢s avanzadas est¨¦ticamente de su tiempo, plataforma de expresi¨®n para materializar las inquietudes art¨ªsticas e intelectuales de un grupo de creadores en la Espa?a gris de la dictadura, es una modelo Minerva Boston y puede verse en la exposici¨®n Universo Tharrats que se celebra en Pineda de Mar hasta el 3 de marzo. En ella se reivindica al creador, impulsor e impresor de esa peque?a joya que vio la luz entre 1948 y 1956. Pero tambi¨¦n al pintor, grabador, dise?ador gr¨¢fico, ilustrador, editor, escritor e incluso dise?ador de joyas y figurinista que fue Joan-Josep Tharrats (Girona, 1918- Barcelona, 2001) y que no ha sido, hasta ahora, lo suficientemente valorado.

De hecho, incluso algunos de los miembros del m¨ªtico grupo Dau al Set ¡ªAntoni T¨¤pies, Joan Brossa, Modest Cuixart, Joan Pon?, Juan Eduardo Cirlot y Arnau Puig, adem¨¢s de Tharrats¡ª lo ningunearon: T¨¤pies no solo reneg¨® de toda esta etapa, sino que le calificaba, casi despectivamente, como ¡°el impresor", con la intenci¨®n expresa de anular cualquier otra actividad, pese a que Tharrats hab¨ªa escrito en 1950 el primer libro dedicado a este pintor de la materia. "Tharrats era mucho m¨¢s que todo eso, como pretende demostrar esta exposici¨®n", asegura su comisario Ricard Mas, que ha reunido un buen n¨²mero de piezas en la Fundaci¨®n Tharrats Art Gr¨¤fic de Pineda de Mar (hasta el 3 de marzo) para conmemorar el centenario del nacimiento del artista. Una exposici¨®n que llega despu¨¦s de 26 a?os de la ¨²ltima antol¨®gica que se le dedic¨® en el Palau Robert de Barcelona.

Pasear por la exposici¨®n es comprobar, de forma pr¨¢ctica, los m¨²ltiples universos creativos de Tharrats. Recibe la peque?a Boston con algunas de las portadas de la revista Dau al Set (cien ejemplares de cada n¨²mero que se distribu¨ªan por suscripci¨®n y que pese a que el grupo se disolvi¨® en 1952 Tharrats sigui¨® imprimiendo y distribuyendo), para dar paso a sus trabajos como dise?ador gr¨¢fico, con algunos del medio centenar de bellos carteles que cre¨® para eventos como ferias del libros, cubiertas de libros y festivales de m¨²sica, como el de Cadaqu¨¦s, localidad donde comenz¨® a pasar los veranos desde 1956.

En la sala contigua aparece el editor de publicaciones como Negre+; el ilustrador de revistas y poemarios, incluso estampaciones textiles y anuncios comerciales. El Tharrats escritor est¨¢ representado por algunas de sus publicaciones como Cent anys de pintura a Cadaqu¨¦s (1981) y Picasso i els artistes catalans en el ballet (1982) o sus colaboraciones en Diari de Girona, durante m¨¢s de diez a?os. Estas publicaciones comparten espacio con las algunas de las obras creadas y regaladas por artistas como Dal¨ª, Duchamp, Lanfranco Bombelli, Lucio Fontana o Richard Hamilton, acompa?ados de fotograf¨ªas en las que Tharrats aparece con todos ellos, demostrando la intensa vida intelectual que cultiv¨®.

Pero el espacio m¨¢s grande de la muestra est¨¢ dedicado al Tharrats pintor. "Pese a que realiz¨® su primera exposici¨®n en 1950, no encontr¨® su voz propia hasta 1954, con las maculaturas, un procedimiento que invent¨® a partir de las t¨¦cnicas de estampaci¨®n, por la que las impurezas de la imprenta invaden la composici¨®n pict¨®rica", explica Mas, que recalca c¨®mo desde 1959 abandon¨® otras actividades para concentrarse en la pintura, llegando a triunfar en 1961 en Nueva York. En una de las ilustradoras im¨¢genes que acompa?an la muestra se le ve junto a T¨¤pies y Antoni Saura en el patio del MoMA, en un momento en el que los tres ten¨ªan exposici¨®n individual en esta ciudad. "Dal¨ª les ayud¨® mucho a los tres, pero no se ha explicado mucho", destaca M¨¢s delante de otra imagen en la que se ve a Tharrats junto a la famosa pareja en la habitaci¨®n del hotel St. Regis de Nueva York donde Dal¨ª y Gala se hospedaban.

Mas destaca de la pintura las obras informalistas como las que parecen ser fruto de su observaci¨®n a trav¨¦s de un microscopio o de un telescopio, evocadoras de c¨²pulas celestiales o fondos marinos, a la vez que resalta que muchas de sus obras est¨¢n dispersas en museos y colecciones de Europa y Estados Unidos y las de la exposici¨®n son solo una peque?a muestra.