Richard Sennett, en la (Kosmo)polis
El soci¨®logo reclama la convivencia f¨ªsica urbana en el CCCB
Arist¨®teles asegur¨® en Pol¨ªtica que ¡°una ciudad est¨¢ formada por diferentes tipos de hombres; las personas parecidas no pueden hacer existir una ciudad¡±. Para Richard Sennett, ¡°las ciudades actuales est¨¢n sociol¨®gicamente traumatizadas por esa declaraci¨®n. La ciudad inteligente ha evolucionado de forma humana y ahora es o bien una pesadilla o un lugar lleno de promesas, porque la tecnolog¨ªa tanto puede cerrar como abrir la cit¨¦¡±, palabra que hay que entender por c¨®mo se vive la ciudad. Y plantea otros desaf¨ªos directos: la reducci¨®n a los m¨ªnimos imprescindibles en una vivienda f¨ªsica invita, sostiene, a reducir las vidas de los que est¨¢n dentro. Y se pregunta, c¨¢ustico: ?la ¨¦tica puede y/o debe determinar el dise?o de una ciudad? ?Los planes para que una calle sea s¨®lo para viandantes ayudar¨¢n a solucionar la crisis de la vivienda?... Todo eso se cuestiona el soci¨®logo norteamericano en su ¨²ltimo ensayo Construir y habitar. ?tica para la ciudad (Anagrama; Arc¨¤dia en catal¨¢n). Y bajo el influjo de ese contundente bagaje se present¨® ayer en el acto inaugural de Kosmopolis, el festival literario bienal con el que el Centro de Cultura Contempor¨¢nea de Barcelona (CCCB) quiere analizar, en su ya d¨¦cima edici¨®n, los relatos que marcar¨¢n el siglo XXI.
Quiz¨¢ porque hace cinco a?os un ictus le dej¨® entrever de muy cerca a la parca, Sennett (Chicago, 1943) parece como si no pudiera ya perder m¨¢s tiempo y, a pesar de sus pausadas formas bajo una voz lenta y suave y unas peque?as gafas redondas de pasta, se mostr¨® pragm¨¢tico. En la ciudad cuya trama es fruto del primer arquitecto que en 1859 puso juntas las palabras urbanismo y urbanista en un texto (Ildefons Cerd¨¤), Sennett reconoci¨® que en la ¨²ltima entrega del que es el tr¨ªptico que ha bautizado como Homo Faber (junto a El artesano y Juntos: rituales, placeres y pol¨ªtica de cooperaci¨®n) ¡°el extranjero es la figura central¡±.
Tavares y Vila-Matas, ¡®entre ruinas¡¯
Ni cinco minutos necesitaron Gon?alo M. Tavares y Enrique Vila-Matas, dos Exploradores entre ruinas, como les bautizaron para la charla del segundo acto de Kosmopolis, para hallar un nexo entre sus obras, especializadas en narrar el fragmentario mundo de hoy. El link fue la obra del belga Francis Alys, capaz de una performance que moviliz¨® a centenares de personas para hacer crecer un cent¨ªmetro una monta?a. "Es el gran gesto in¨²til, extra?o", dijo el autor luso ("Doctor s¨ªntesis", seg¨²n su colega) de la tetralog¨ªa El reino, que, adem¨¢s, denuncia que se considera hoy la met¨¢fora "otro esfuerzo in¨²til, p¨¦rdida de tiempo en momentos de inmediatez". Vila-Matas se mostr¨® contrario "a los finales en general; Godard prefer¨ªa entrar en el cine con las pel¨ªculas empezadas; eso me hace pensar qu¨¦ es lo que comprendemos hoy y si lo comprendemos bien".
Fijando como tablero de juego intelectual el desaf¨ªo de que ¨¦l busca ¡°la complejidad como leitmotiv de la conversaci¨®n: me interesan los obst¨¢culos, las dificultades que se dan para conectar con el otro¡±, cuestion¨® que organismos como la ONU centren esfuerzos en obligar a entablar di¨¢logos para llegar a comprender al otro ¡°cuando los esfuerzos deber¨ªan ir a obligar a convivir: el cuerpo es la clave para construir la ciudad; la clave de la comunicaci¨®n en las urbes es lo que se hace, por m¨¢s incompleto o ambiguo o complejo que sea lo que se hace¡±.
Insisti¨® en esa l¨ªnea de convivencia y contacto a preguntas de algunos de los m¨¢s de 450 asistentes, en especial cuando una vecina del Eixample le dijo que nunca hab¨ªa cruzado palabra alguna con nadie de la numerosa comunidad china de su barrio. ¡°No se preocupe: en las ciudades no solemos hablar demasiado con los desconocidos; las condiciones urbanas no lo facilitan: la condici¨®n cosmopolita de la ciudad es la condici¨®n del silencio; por ello hemos de aprender a contactar con otros sentidos con el otro: con los ojos, con la presencia f¨ªsica, la corporeidad... Esa es la verdadera manera de tratar con los extra?os¡±.
Tampoco evit¨® Sennett la carpeta de Kosmopolis (Transiciones del capitalismo) en la que se enmarcaba su charla con el arquitecto Carles Muro, con quien comparti¨® clases en Harvard: ¡°El capitalismo global construye la misma ciudad en todas partes; cuando Shangh¨¢i despert¨® de su resaca de manhattanizaci¨®n de los 90 y quiso hace ocho a?os empezar a abandonar las supertorres ya no ha podido volver a los edificios bajos y a los patios... La tecnolog¨ªa es otra manera de estandarizar¡±, alert¨®.
Padre de los estudios urbanos en la London School of Economics y profesor de Urbanismo en el MIT, no cree que la arquitectura pueda resolver por ella sola problemas como la gentrificaci¨®n o el turismo en Barcelona, del mismo modo que la culpa de la urgente redistribuci¨®n de la riqueza no es de las multinacionales: ¡°Debemos focalizar m¨¢s en lo local y no buscar tantas soluciones globales; la causa de los alquileres altos est¨¢ m¨¢s, en muchos casos, en la peque?a burgues¨ªa de las ciudades que en las grandes corporaciones; la respuesta a eso no es destruyendo a Bill Gates; eso es panfletismo de izquierdas¡±. Sennett pas¨® y pis¨® fuerte por la polis.
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